Objetivo: reducir a pavesas al Rey y al régimen del 78

Imagino que el rey Felipe VI le estará dando vueltas a la cabeza respecto a lo difícil del oficio de reinar en un país donde no existen 476 clases de quesos (De Gaulle), pero sí dos territorios autónomos donde sus gobernantes, amparados por la Constitución y la propia Corona, compiten entre sí a ver quién hace más feos al jefe del Estado.

Me malicio que algo parecido no podría suceder en Francia, ni Alemania, ni Reino Unido, por poner tres ejemplos de países de nuestro entorno. El último "feo" ha venido de parte del lendakari Urkullu —tan formalito, tan aseadito y tan estiradito— que dejó solo al jefe del Estado cuando él es la máxima representación de ese Estado en el País Vasco. La excusa argumentada es propia de mal pagador.

La creación de cinturones sanitarios contra las fuerzas que se les oponen bajo la invocación de lo "franquista" de todo aquel que tiene una idea

Los ataques al rey Felipe provienen de los separatistas que lo ven como un murallón sólido contra sus pretensiones —¿acaso podría ser de otra manera?— en coalición con las fuerzas herederas de los sueños equinocciales del 36. Les interesa el descojone, el despelote, la destrucción… La creación de cinturones sanitarios contra las fuerzas que se les oponen bajo la invocación de lo "franquista" y la descalificación 'ad hominem' de todo aquel que tiene una idea ya sea propia o prestada. Esta es la verdad. Y la verdad es siempre la verdad. He aquí, entre otras razones, el por qué Sánchez no cumple su promesa de convocar al pueblo español para que decida.

Se creen moralmente superiores cuando los hechos demuestran todo lo contario. Los alcaldes del "cambio" llevan cuatro años en la mamandurria y de lo que dijeron solo se compadecen en las hemerotecas. Casi todos ellos son los que más cobran (con Manuela Carmena a la cabeza), no viajan en Metro y practican el amiguismo, el nepotismo y hasta la corrupción galopante. Ya sé que los anteriores lo hacían, lo sé. Pero ya no están. Y los que les sustituyeron no han hecho honor a sus votantes.

Derribar han demostrado saber. Construir, no.