Palo Alto
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La rendición
Tengo para mí que la Historia será extraordinariamente dura con Pedro Sánchez y sus acólitos de la mamandurria ministerial
Cuando inmediatamente después de perpetrado el golpe (en realidad fueron varios: en la calle, en el Parlament, en declaraciones oficiales, etc…) el fiscal general recién nombrado José Manuel Maza —que venía de entrevistarse con el entonces 'president' Carles Puigdemont y este le confesó que le quedaba poco como presidente de la Generalitat y no sabía qué haría posteriormente— reunió a todos los fiscales de Sala del Tribunal Supremo —entre los que se encontraba, entre otros, Javier Zaragoza, Consuelo Madrigal— y repasaron conjuntamente qué decía el Código Penal para estos supuestos.
La conclusión fue unánime: Rebelión. "Es de libro", subrayo uno de los fiscales de Sala. Así lo creyó también Maza que unas horas más tarde convocaba a la prensa para una declaración institucional de la Fiscalía General. Así lo entendieron también altos magistrados del Supremo y de la Audiencia Nacional y, por supuesto, el instructor Pablo Llarena, al que han dado el golpe de su vida al tener él la responsabilidad de tabular los legajos y las conclusiones.
La Abogacía del Estado, clave en el proceso, ha bajado la cerviz y traga con las órdenes que le han dictado sus superiores políticos
Nadie en su sano juicio podría pensar que un año más tarde desde el máximo poder ejecutivo del Estado se intentara amparar a los golpistas y quitar importancia a la asonada civil y política contra un país miembro de la Unión Europea. Lo hace el presidente del Gobierno, el Gobierno en pleno (se entiende) encargado de oficio de velar por el mantenimiento del Estado. Se veía venir después de innumerables globos sondas lanzados desde el amplio frente progubernamental al respecto. La Abogacía del Estado, clave en el proceso que se iniciará en breve, ha bajado la cerviz y traga con las órdenes que le han dictado sus superiores políticos. Dicen que ha sido la estrafalaria ministra (sic) Dolores Delgado o alguien de su entorno la encargada de transmitir una orden "tajante y sin discusión": acusación a la baja y buscando resquicios. Andan blanqueando sus procederes a través de la pringosa RTVE a la que las audiencias le ha visto el plumero y huyen como alma que busca aire limpio.
Tengo para mí que la Historia será extraordinariamente dura con Pedro Sánchez y sus acólitos de la mamandurria ministerial. También con aquellos dentro del PSOE que, aborreciendo lo que su secretario general está haciendo, callan por miedo o por la incertidumbre en el tajo de la guillotina.
Claro, que para tener conciencia de eso antes hay que saber qué es la Historia… Están humillando al pueblo español, pero antes se degradan a sí mismos. ¡Demasiado para Sánchez!
Cuando inmediatamente después de perpetrado el golpe (en realidad fueron varios: en la calle, en el Parlament, en declaraciones oficiales, etc…) el fiscal general recién nombrado José Manuel Maza —que venía de entrevistarse con el entonces 'president' Carles Puigdemont y este le confesó que le quedaba poco como presidente de la Generalitat y no sabía qué haría posteriormente— reunió a todos los fiscales de Sala del Tribunal Supremo —entre los que se encontraba, entre otros, Javier Zaragoza, Consuelo Madrigal— y repasaron conjuntamente qué decía el Código Penal para estos supuestos.