Palo Alto
Por
De Eslovenia al Annual
Si conocieran lo que realmente aquello supuso para los entonces famélicos españoles no reirían la gracieta al inexportable Tardà
Lástima que algunos distinguidos colegas de las nuevas generaciones, que han entrado de oficio a formar parte de lo que yo denomino "Brunete Mediática Progubernamental", no sepan qué pasó en Eslovenia (Guerra de los "Diez Días" entre la separatista Eslovenia y la República Federativa de Yugoslavia (1991). De haber estudiado un poco no calentarían el braserillo de ese demente apellido Torra.
Lástima también esa generación de plumillas (incluso algunos con títulos universitarios) que ignore por completo lo que el "Desastre de Annual" representó para el fin del sueño español y la entrada en una crisis que se sustanció con la Guerra Civil. Si conocieran lo que realmente aquello supuso para los entonces famélicos españoles no reirían la gracieta al inexportable Tardà.
Esos dos ejemplos, explicitados por boquitas independentistas, serían tratados mediáticamente con lo que realmente son: vómitos malolientes incompatibles con cualquier atisbo de europeísmo y modernidad. Al menos, han tenido la virtualidad de dejar en evidencia lo que realmente son: fanáticos ensoberbecidos incapaces de sentar cátedra sobre la realidad y el mundo que nos circunda. Talibanes de la peor estofa que tratan de utilizar muertos, sangre y fuego disparando con la pólvora que han robado en las santabárbaras del pueblo.
Ya nadie se puede llamar a engaño, y los que menos el señor Sánchez y la señora Calvo: lo que buscan es un muerto como en su día dijo otro enfebrecido apóstol de la causa, un tal Agustí Colomines, gran abrevador en los bien dotados pesebres pujolistas.
Ni Sánchez, ni Calvo. Pero los demás, tampoco.
Lástima que algunos distinguidos colegas de las nuevas generaciones, que han entrado de oficio a formar parte de lo que yo denomino "Brunete Mediática Progubernamental", no sepan qué pasó en Eslovenia (Guerra de los "Diez Días" entre la separatista Eslovenia y la República Federativa de Yugoslavia (1991). De haber estudiado un poco no calentarían el braserillo de ese demente apellido Torra.