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Graciano Palomo

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El regreso de Guerra

Aquel trueno, vestido de nazareno, ha salido de su retiro sevillano para llevarse las manos a la cabeza ante lo que perpetra su sucesor

Foto: El exvicepresidente del Gobierno socialista, Alfonso Guerra. (EFE)
El exvicepresidente del Gobierno socialista, Alfonso Guerra. (EFE)

¡Quién nos iba a decir a los profesionales de mi generación que llegaría un día en el que Alfonso Guerra se alzara como defensor de la democracia liberal y parlamentaria! Aquel trueno, vestido de nazareno, ha salido de su retiro sevillano para llevarse las manos a la cabeza ante lo que perpetra su sucesor.

Tengo para mí que con unos años menos, el poeta sevillano —en el fondo Alfonso siempre fue un poeta— se merendaría de un bocado a Sánchez. Pero es sabido que el tiempo todo lo puede. Socialdemocracia no es socialismo real, que es como se autodefinían los comunistas ortodoxos moscovitas. Socialdemocracia tampoco es en modo alguno "socialismo del siglo XXI" que es la denominación elegida por los comunistas de hoy tras la caída del Muro de Berlín.

Foto:  El exministro de Asuntos Exteriores José Manuel García-Margallo. (efe)

Lo que le preocupa al exvicepresidente del Gobierno (con Felipe González) y exvicesecretario general del PSOE —cuando este era un "partido" y una organización fiable— es que dando entrada en el poder a los neocomunistas en poco tiempo dejen la formación de sus amores y de su larga vida en las raspas. ¿Recuerdan cuando Joaquín Almunia quiso ganarle a Aznar en el año 2000 apostando una alianza con Francisco Frutos, secretario general del Partido Comunista de España? Que el señor del bigote sacó una larguísima mayoría absoluta.

Me resulta patético escuchar en los aledaños de Sánchez despreciar a los principales dirigentes del socialismo histórico español. "Viejos", "fachas", "corruptos"... Entre ellos no meten a José Bono, no sea que alguien vaya a preguntar por su patrimonio.

¡Quién nos iba a decir a los profesionales de mi generación que llegaría un día en el que Alfonso Guerra se alzara como defensor de la democracia liberal y parlamentaria! Aquel trueno, vestido de nazareno, ha salido de su retiro sevillano para llevarse las manos a la cabeza ante lo que perpetra su sucesor.

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