Es noticia
Músculo ciudadano: dímelo con pico y pala
  1. España
  2. Palo Alto
Graciano Palomo

Palo Alto

Por

Músculo ciudadano: dímelo con pico y pala

¿Qué será de ellos si alguna vez la teta pasa a otras factorías? ¿Cogerán el pico y la pala? ¡Qué gran pueblo si hubiera un mínimo de calidad en sus representantes!

Foto: Un hombre retira con una pala la nieve. (EFE)
Un hombre retira con una pala la nieve. (EFE)

La pandemia sanitaria, la pandemia económica, la pandemia social, la pandemia institucional y, finalmente, la pandemia en forma de nieve –¡madre del amor hermoso! han venido a demostrar algo que cualquier mediano observador de la realidad nacional sabe desde hace tiempo. Ello no es otro que el músculo ciudadano que exhiben los españoles en medio de una tormenta orgiástica de desgracias es muy superior, en cualquier caso, a las capacidades técnicas y, por supuesto, a la entrega de sus gobernantes.

Bien mirado, este ha sido el gran problema de la nación española desde poco después de su constitución como tal, especialmente desde Fernando VII. A mí me gustan los dirigentes políticos y los líderes intelectuales, sociales, mediáticos, económicos que hacen gestos en medio de las catástrofes. Porque el ciudadano es muy capaz de discernir cuándo va en serio o si es la búsqueda de un minuto de gloria.

Porque el ciudadano es muy capaz de discernir cuándo va en serio o si es la búsqueda de un minuto de gloria

Es mucho mejor ver a un dirigente pala en mano, si la ocasión lo requiere, que el ignoto mamandúrrico atizando las llamas de su chimenea mientras se zumba un caldo reserva a costa del contribuyente. Y luego criticar como ha hecho ese analfabético millonario ministro (Ábalos) a los que han tenido la osadía de sumarse al codo de los ciudadanos. Esto también se podría extender al casi largo año que llevamos padeciendo el Covid-19.

Gracias a esa mente de una porción de españolitos que no retiene pervive un poder ejecutivo inútil, despechado y aferrado a la teta como percebe a la roca. ¿Qué será de ellos si alguna vez la teta pasa a otras factorías? ¿Cogerán el pico y la pala? ¡Qué gran pueblo si hubiera un mínimo de calidad en sus representantes!

La pandemia sanitaria, la pandemia económica, la pandemia social, la pandemia institucional y, finalmente, la pandemia en forma de nieve –¡madre del amor hermoso! han venido a demostrar algo que cualquier mediano observador de la realidad nacional sabe desde hace tiempo. Ello no es otro que el músculo ciudadano que exhiben los españoles en medio de una tormenta orgiástica de desgracias es muy superior, en cualquier caso, a las capacidades técnicas y, por supuesto, a la entrega de sus gobernantes.