Errejón se quedará con el rosario

Íñigo Errejón, que abrevó en las mismas fuentes ideológicas que Iglesias, ha demostrado ser mucho más inteligente y estratega que su antiguo comandante en jefe. Ambos fueron fascinados por el marxista italiano Gramsci, si bien, visto lo comprobado, el alumno más aventajado al respecto es el niño 'pijo' de Majadahonda.

Errejón no produce rechazo, su propia imagen y discurso ahuyenta el miedo y algunos de sus desvaríos ("En Venezuela se come tres veces al día", o la farfullería de la beca 'black') se compadece y perdona. Se olvidan sus nepotismos manifiestos y se aplaude la inteligente y moderna manera de conducirse; chapotea entre lo verde y lo radical que tiene muy buena entrada entre las jóvenes generaciones. Y, además, su MM le ha propinado un soberbio puntapié a la izquierda tradicional residenciada en el PSOE.

Su jugada en Madrid ha sido maestra, aunque algunos creen que Mónica García, cooptada directamente por él, es su 'Ayuso' particular en forma de sarpullido de poder interno. No lo creo.

TE PUEDE INTERESAR

Más Madrid supera al PSOE y se convierte en la segunda fuerza más votada

Iván Gil

De modo y manera, que mientras las damas en UP/IU se pelean a navajazos albaceteños por la herencia del extinto conducator y la izquierda radical busca líder a marchas forzadas, Errejón anda por ahí masajeado por una potente maquinaria mediática a la espera de propinar el siguiente zarpazo.

Errejón solo es sospechoso en las formas que de alguna manera recuerdan al histórico dirigente italiano del PCE, Enrico Berlinguer, aunque, creo, que el de Majadahonda no emparenta directamente con la nobleza. Tal y como están las cosas es el heredero –no testado– de Pablo Iglesias; al final, todos (as) (es) llamarán a su puerta y será la venganza elegante del que fuera número dos y estratega de Podemos.

Bueno, exagero. Todos (as), no. Ni Montero ni Monedero. Están vetados.