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El PNV amenaza: exigen la caja llena de nueces
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Graciano Palomo

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El PNV amenaza: exigen la caja llena de nueces

Sé lo que piensa la troika —Ortuzar, Urkullu, Esteban— de Pedro Sánchez y su gobierno. Pero les va bien; es decir, sacan todo o casi todo de lo que piden

Foto: El presidente del PNV, Andoni Ortuzar. (EFE)
El presidente del PNV, Andoni Ortuzar. (EFE)

Convendrán conmigo, sobre la base de hechos incontestables, que si hay una iglesia en España que siempre llena el platillo en su particular estilo ignaciano, esta es el Partido Nacionalista Vasco (PNV) que ha demostrado, bajo el liderazgo de Iñigo Urkullu, ser mucho más práctico e inteligente que sus amados colegas secesionistas catalanes.

Convendrán también conmigo, sobre todo aquellos ciudadanos que viven en el País Vasco (sean nacionalistas o constitucionalistas), que 'de facto' este ancestral territorio de la España sin romanizar, ya ha conseguido su independencia. El Estado no existe y, donde existe, es completamente marginal. Por ejemplo, ¿cuál es la aportación económica de esta autonomía a la caja pública española? ¿Acaso el Estado no invierte mucho más de lo que recibe?

El País Vasco ya ha conseguido 'de facto' su independencia

Todo el mundo conoce que el PNV de Urkullu fue el decapitador definitivo del gobierno Rajoy. Hablaron y negociaron en euskera con Iván Redondo y, los que cinco días antes habían apoyado los Presupuestos Generales del PP (por precio, naturalmente), no tuvieron reparo alguno en afilar la cuchilla de la guillotina. ¡Con un par! Con el argumento de la corrupción partidaria del Partido Popular; que existió, sin duda. ¿El PNV conduciéndose sobre la corrupción? ¡Ah!, la corrupción. Que se haya extendido un grueso manto de silencio sobre la corrupción de los nacionalistas vascos —sobre todo, en el País Vasco— no significa en modo alguno que no haya existido o exista. Ya fueron condenados en firme dirigentes peneuvistas de la cúpula.

Sé lo que piensa la troika —Ortuzar, Urkullu, Esteban— de Pedro Sánchez y su gobierno. Pero les va bien; es decir, sacan todo o casi todo de lo que piden. Ahora ha llegado la prueba del carbono: la Seguridad Social. Sánchez se lo prometió, pero los altos funcionarios de Escrivá se niegan en rotundo. Palabras mayores porque significa romper la caja única de un asunto de comer.

Ha dicho Ortúzar: "Sánchez debe tomar conciencia de quiénes son los que lo han llevado hasta la Moncloa…"

¿Han entendido? Sí, Sánchez el primero. Hechos pronto.

Convendrán conmigo, sobre la base de hechos incontestables, que si hay una iglesia en España que siempre llena el platillo en su particular estilo ignaciano, esta es el Partido Nacionalista Vasco (PNV) que ha demostrado, bajo el liderazgo de Iñigo Urkullu, ser mucho más práctico e inteligente que sus amados colegas secesionistas catalanes.

Convendrán también conmigo, sobre todo aquellos ciudadanos que viven en el País Vasco (sean nacionalistas o constitucionalistas), que 'de facto' este ancestral territorio de la España sin romanizar, ya ha conseguido su independencia. El Estado no existe y, donde existe, es completamente marginal. Por ejemplo, ¿cuál es la aportación económica de esta autonomía a la caja pública española? ¿Acaso el Estado no invierte mucho más de lo que recibe?

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