¿Está a salvo España de los rebrotes que se extienden por Europa?

Nadie quiere pensar en rebrotes del covid. Ni hablar de una futura vuelta a las restricciones si la cosa se torciera este otoño. No vamos a leer ni un artículo más sobre el tema, ni mucho menos a escribirlo. ¿A que no? Ya está bien de pandemia. Sabemos todo lo que teníamos que saber de este virus. No me cuentes que la OMS alerta del aumento de casos de covid en Europa por tercera semana consecutiva. Ni menciones la nueva variante delta plus. Basta de agoreros.

Que si hay aumentos repentinos de contagios en la República Checa, Hungría y Polonia, que si allí los casos de covid subieron un 50% durante la última semana; que si una nueva variante más peligrosa gana terreno en Reino Unido y la presión hospitalaria allí puede desbordarse; que si Rumanía decreta otro toque de queda y Letonia un nuevo confinamiento; que si las empresas turísticas se desploman en bolsa por el recrudecimiento de la pandemia entre los británicos; que si... Basta, por favor.

No quería, de verdad que no. Ahora que en España la incidencia de covid está por debajo de 50 y empezamos a creernos la vuelta a la normalidad, no quería pasarme la tarde hablando con los epidemiólogos, médicos y vacunólogos a los que solía acudir cuando se encendían las alertas en los rebrotes anteriores. Al fin y al cabo, ahora en España la pandemia está bajo control, gracias a que tenemos una de las tasas de vacunación más altas del mundo. Y, sin embargo, vuelve la duda… ¿Está a salvo España de los rebrotes de la nueva variante delta que se extiende por Europa?

España, ¿a salvo?

La buena noticia es que estamos en uno de los países mejor preparados del mundo para protegernos de los rebrotes y las nuevas variantes. La mala, que habrá que convivir con ellos. Pero la parte buena es muy buena. Esta vez, España está en una situación de ventaja. Después de haber sido tantas veces el ejemplo trágico de lo que no hay que hacer en pandemia, los mismos epidemiólogos que hace unos meses ponían verde el descontrol de la gestión del covid en España ahora aplauden: “España va a ser ejemplo para todo el mundo y es muy meritorio”, afirma Susanna Manrubia, vicedirectora del Centro Nacional de Biotecnología del CSIC, que hace un año advertía en esta entrevista de que la segunda ola no era el fin de la pandemia y se mostraba muy crítica. Aunque matiza que el aplauso es para la gente, por haber creído en la ciencia, no para la gestión de las administraciones.

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Manrubia no vende barato el optimismo: “Ole por el país en el que estamos, porque gracias a que la gente se ha vacunado masivamente estamos en una situación buena para este otoño”. Haber llegado a un 90% de vacunados (entre mayores de 12 años) es un mérito colectivo que ahora da sus frutos. Por eso ahora Manrubia es optimista y no lo era en meses anteriores. Cree que vamos camino de la coexistencia con el virus, pero recuerda que faltan 10 millones de personas por vacunarse, incluidos los niños. A sus dos hijos de siete años está deseando vacunarlos en cuanto se aprueben los ensayos clínicos, que “están siendo mucho más exigentes que para otras vacunas”.

Alerta no solo por la delta

En Europa, 31 de los 48 países del continente están experimentando rebrotes. En la mayor parte de ellos, algunos batiendo el pico de muertes de toda la pandemia, la tasa de vacunación completa ronda el 30%. Es el caso de Rumanía y Ucrania. “El común denominador que explica estas olas tan bestias es la baja vacunación”, explica Quique Bassat, pediatra e investigador de ISGlobal. “Nosotros en España estamos a salvo de momento”.

“España ha hecho las cosas bien este verano, el problema es confiarse”

Para estar tranquilos, sin embargo, la vacunación no es el único escudo protector. En Reino Unido, roza el 80% en mayores de 12 años y ya están teniendo de repente 50.000 contagios de covid al día y los hospitales están saturados de nuevo. Este martes, se registraron 233 muertes, la mayor cifra desde marzo. “En Reino Unido está muriendo gente que podría haber salvado la vida si se mantuvieran medidas como las que tenemos en España desde el verano”. Lo recuerda Salvador Macip, médico e investigador de la Universidad de Leicester, que vive en Reino Unido y lo toma de ejemplo de cómo si se quitan todas las barreras de protección puede descontrolarse el virus.

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“España ha hecho las cosas bien este verano, el problema es confiarse”, insiste Macip, convencido de que con la vacuna no basta. “Si ves que los países vecinos tienen problemas con el virus, lo mejor sería prepararse”. Ahora podemos relajarnos porque las cosas van bien, pero siempre con un ojo en la curva de contagios. Según el autor de ‘Lecciones de una pandemia’ (Anagrama), el virus puede volver y habrá aumento de casos: “La cuestión es qué se hace cuando suban los contagios. Si no se hace nada, puede volver a caer en el descontrol”.

Mascarilla hasta Navidad

“Es útil tener espejos en los que mirarse si no se hacen las cosas bien”, comenta Bassat en referencia a Reino Unido. España ha sido ese espejo de cómo no hacer las cosas mucho tiempo, ahora es el ejemplo de cómo combinar una alta tasa de vacunación con otras medidas mantiene a raya los contagios. Al menos, de momento.

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“En España, estamos en una situación privilegiada y ahora sería el momento perfecto de reflexionar lo que hemos hecho mal, que han sido muchas cosas”, añade Bassat. “Es el momento de evitar cagarla de nuevo. La gente ha tenido fe en la ciencia y las vacunas están funcionando, pero es probable que haya rebrotes mientras tengamos 10 millones de personas aún sin vacunar”.

Mantener mascarillas en interiores es un engorro, pero todos coinciden en que está salvando vidas. “En Reino Unido las retiraron en julio, igual que el resto de medidas, antes de tener una tasa de vacunación suficiente para hacer algo así. Y están teniendo 180 muertes de media al día, de las que muchas se podrían evitar”, añade el investigador de ISGlobal. “Si quitásemos las mascarillas ahora, dudo que tuviéramos un impacto tan grande como los británicos, porque tenemos más gente vacunada que ellos cuando las retiraron”. Aun así, no cree que se hayan de quitar aún en España: “Mejor esperar a después de Navidad”.

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Hay más medidas que pueden permitir que la incidencia siga baja, para evitar volver a restricciones mayores como podría necesitar el Reino Unido, al menos mientras se termina de vacunar. Bassat sugiere que no estaría de más un poco más de precaución con los viajeros que vienen de países de alto riesgo, donde hay muchos contagios o nuevas variantes. Exigir un test negativo o el pasaporte de vacunación para asegurarnos de que solo vienen vacunados, como hacen en otros países, ayudaría a reducir riesgos. Macip destaca el rastreo y la importancia de los test, como otra de las medidas fundamentales que no deben caer en el olvido para mantener baja la incidencia y evitar que tengan que volver a restringirse situaciones de riesgo.

Y Manrubia insiste en que para mantener baja la incidencia hay que seguir avanzando en las vacunas, también frente a las nuevas variantes. Estas le preocupan, pero cree que la ciencia puede adaptar rápido las nuevas dosis de refuerzo, a las que nos acostumbraremos. Los pronósticos más pesimistas de esta bióloga experta en virus fueron cumpliéndose en 2020. Esperemos que ahora se cumplan los optimistas.

Si hay algo en lo que todos los expertos están de acuerdo es en la importancia de no perder de vista que la pandemia no ha terminado. Y para que los demás nos podamos ir olvidando del virus, los científicos no pueden dejar de vigilarlo.