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Lo que Shakira recuerda y el Gobierno prefiere ignorar
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Marta García Aller

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Lo que Shakira recuerda y el Gobierno prefiere ignorar

No es la batalla legal de una estrella del pop con la Fiscalía lo que nos debería estar recordando la importancia de la lucha contra el fraude fiscal

Foto: La cantante colombiana Shakira. (EFE/Archivo/Guillaume Horcajuelo)
La cantante colombiana Shakira. (EFE/Archivo/Guillaume Horcajuelo)
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Menos mal que está Shakira. Si no, nadie estaría hablando estos días de fraude fiscal. En pleno debate por las reformas fiscales, la cantante colombiana, a la que la jueza acaba de enviar a juicio por defraudar a Hacienda 14,5 millones, es la única que está poniendo en el debate público el fraude fiscal. A su pesar, claro.

Ningún Gobierno parece interesado en hablar en serio de fraude fiscal en época electoral. Será que subir los impuestos a los ricos, o bajárselos, según convenga a cada uno para complacer a su electorado, tiene mejor prensa que perseguir en serio a los evasores. Es más sencillo también que reformar el sistema fiscal para dificultar los trucos de elusión más habituales. Y no será que no ayudaría a aumentar la recaudación.

Foto: Shakira, en la alfombra roja del Festival de Cannes este 2022. (EFE/Guillaume Horcajuelo)

El fraude en el IRPF supone una merma de 7.000 millones de euros a las arcas públicas y las rentas ocultas en el extranjero suponen un 30% de las declaradas. Según el informe ‘Desigualdad y pacto social’, de Fundación la Caixa, la evasión y elusión de rentas aumenta a medida que ascendemos en la escala de rentas. Es decir, el incumplimiento tributario se concentra entre las rentas más altas. Sería interesante entonces que un Gobierno tan interesado en mejorar la progresividad fiscal pusiera el énfasis en mejorar los recursos de la Agencia Tributaria para perseguir el fraude.

El estudio coordinado por el catedrático Luis Ayala Cañón estima que el 0,4% más rico de la población llega al 13% de ingresos no declarados en el IRPF y hasta el 23% en el caso del 0,1%. Entre el 10% más pobre, sin embargo, es un 8% el porcentaje de renta que se oculta de media al fisco. A más renta, menos cumplimiento y, por tanto, más deterioro en la recaudación. ¿De qué sirve seguir subiendo impuestos a los tramos que mejor se las ingenian para evitar pagarlos con triquiñuelas más o menos ortodoxas si no se mejora el incentivo para cumplir la ley?

Foto: La vicepresidenta económica, Nadia Calviño, y la ministra de Hacienda, María Jesús Montero. (EFE/Martín)

Entre las soluciones que aporta este informe de Fundación la Caixa para reducir la brecha tributaria y contrarrestar una pérdida de recaudación, los expertos recomiendan dejar de tratar las rentas de manera diferente según su origen, que por mucho que sea legal resulta ineficiente y regresivo. Claro, que eso requeriría una revisión integral del modelo tributario español.

Son muchos los informes que van en esa línea para mejorar la recaudación. Ponen énfasis en el galimatías de exenciones, tipos reducidos y privilegios fiscales que se han ido quedando obsoletos en la legislación española. El Gobierno lo sabe de sobra. Se lo dijo hace unos meses el Libro Blanco del comité de expertos que encargó el propio Ministerio de Hacienda y que ahora, en pleno debate tributario, permanece sorprendentemente olvidado en el cajón de las buenas intenciones aparcadas en época preelectoral.

Foto: Fachada de la Agencia Tributaria. (EFE)

El Libro Blanco encargado por el ministerio de María Jesús Montero alertaba de que hay un déficit de recursos de la Inspección de la Agencia Tributaria que, además de dificultar la lucha contra el fraude, desincentiva que los demás cumplan las normas voluntariamente. Los expertos, además, afeaban a la Administración tributaria que trasladase a los contribuyentes que suelen cumplir sus obligaciones la sensación de persecución y culpabilidad, en vez de centrar los recursos en perseguir a los que más evaden.

Shakira es solo el caso más mediático del momento. Pero no es la batalla legal de una estrella del pop con la Fiscalía lo que nos debería estar recordando la importancia de la lucha contra el fraude fiscal en pleno debate sobre cómo mejorar el sistema tributario español.

Menos mal que está Shakira. Si no, nadie estaría hablando estos días de fraude fiscal. En pleno debate por las reformas fiscales, la cantante colombiana, a la que la jueza acaba de enviar a juicio por defraudar a Hacienda 14,5 millones, es la única que está poniendo en el debate público el fraude fiscal. A su pesar, claro.

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