Es noticia
Por qué la deducción por vivienda de Feijóo es una mala idea
  1. España
  2. Segundo Párrafo
Marta García Aller

Segundo Párrafo

Por

Por qué la deducción por vivienda de Feijóo es una mala idea

La dificultad del acceso a la vivienda en España es uno de los principales problemas económicos del país. Y la última propuesta de Alberto Núñez Feijóo para solucionarlo es un buen ejemplo de cómo no solucionarlo

Foto: El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo. (EFE/Eliseo Trigo)
El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo. (EFE/Eliseo Trigo)
EC EXCLUSIVO Artículo solo para suscriptores

En España, 3 de cada 4 jóvenes no pueden comprar una casa. La vivienda en propiedad se ha desplomado a la mitad en la última década entre los menores de 35 años, según un informe del Banco de España. Asimismo, sigue habiendo mucha escasez de vivienda en alquiler, lo que a muchos les deja sin alternativa posible (un joven tendría que dedicar de media el 81,9 por ciento de su sueldo a un alquiler para emanciparse en solitario). Además, comprar en España una vivienda en propiedad requiere de media ocho años de renta bruta, el doble que hace tres décadas. Para colmo, la vivienda social en España está en mínimos de los últimos 40 años, a la cola de la Unión Europea.

El Gobierno no termina de aprobar la Ley de Vivienda, cuyos retrasos en la tramitación siguen acumulándose para desesperación de la coalición. Su proyecto pasa por avanzar en la regulación de los precios de los alquileres, algo que la oposición considera contraproducente. ¿Pero cuál es entonces la propuesta del PP?

Foto: Entrevista a Raquel Sánchez. (O. C.)
TE PUEDE INTERESAR
"Este Gobierno también quiere proteger a los propietarios con la ley de vivienda"
Ruth Ugalde Elena Sanz Vídeo: Patricia Seijas Fotografía: Olmo Calvo

La última medida que acaba de proponer Feijóo pasa, sorprendentemente, por recuperar la antigua deducción fiscal por compra de vivienda. Cree el presidente del PP que desgravar en el impuesto de la renta lo que se paga por el préstamo ayudará a los españoles a pagar las hipotecas. La sorpresa viene de que esta medida ya la desecharon tanto PP como PSOE en la anterior crisis por contraproducente.

No solo concentra las ayudas fiscales en la parte de la población, que ya puede de por sí acceder a un crédito hipotecario (insisto, 3 de cada 4 jóvenes ni siquiera pueden dar la entrada), sino que a menudo esa ayuda en vez de ayudar a los nuevos propietarios lo que favorecía era el aumento de precios, dado que los promotores repercutían la ayuda en un alza de precios.

"Esta ayuda favorecía la burbuja inmobiliaria y creaba un agujero en las cuentas públicas de entre 2.000 y 4.000 millones de euros"

Ayudar con desgravaciones en la compra de vivienda es injusto (destina recursos a los que se pueden comprar una vivienda olvidándose de los que no y cuanto más cara sea la vivienda, más ayuda se recibe) e ineficiente (repercute en el alza de precios). Tanto el FMI como la OCDE advirtieron repetidamente a España hace más de una década, hasta que se eliminó esta desgravación, que esta ayuda favorecía la burbuja inmobiliaria y creaba un agujero en las cuentas públicas de entre 2.000 y 4.000 millones de euros.

La limitación del precio de los alquileres que propone el Gobierno es una medida discutible. Los datos disponibles de los lugares donde se ha aplicado tal medida es que a veces funciona, pero a veces no. Es decir, no es una receta mágica y necesita de otros acompañamientos en las políticas públicas que mejoren el acceso a la vivienda para que limitar los precios no estrangule la oferta. Sin embargo, la situación del mercado de la vivienda en España es tan desesperada que es más fácil de entender que se quiera probar algo nuevo, que ya veremos si funciona o no, que no algo viejo, como la propuesta de desgravar fiscalmente los préstamos, cuyos efectos negativos ya están comprobados.

En España, 3 de cada 4 jóvenes no pueden comprar una casa. La vivienda en propiedad se ha desplomado a la mitad en la última década entre los menores de 35 años, según un informe del Banco de España. Asimismo, sigue habiendo mucha escasez de vivienda en alquiler, lo que a muchos les deja sin alternativa posible (un joven tendría que dedicar de media el 81,9 por ciento de su sueldo a un alquiler para emanciparse en solitario). Además, comprar en España una vivienda en propiedad requiere de media ocho años de renta bruta, el doble que hace tres décadas. Para colmo, la vivienda social en España está en mínimos de los últimos 40 años, a la cola de la Unión Europea.

Alberto Núñez Feijóo Partido Popular (PP) Vivienda
El redactor recomienda