El Vera(neo) maldito de Rodríguez Zapatero y los nostálgicos felipistas

Si las dos tardes de economía de Jordi Sevilla se demostraron insuficientes, sus asesores inmobiliarios tampoco se aplicaron con pericia en enseñarle cómo invertir en época de bonanza. Nadie sabe cómo es posible que Zapatero se comprara una casa en la urbanización El Mirador de Vera.

En esta zona del Levante almeriense hace ya tiempo que ni él ni su mujer ni sus hijas aparecen con bañador y bikini. El veraneo de Zapatero parece no sólo maldito, sino apócrifo. No hay fotos, ni parece que las habrá. La vivienda sigue en venta y nadie parece dispuesto a adquirir una casa erigida sobre terreno inundable.

Les costó 440.000 euros y no la rentabilizarán ni aunque regrese la España del pelotazo y la borrachera del ladrillo más feroz. El Mirador, que linda con la zona nudista y está construida sobre una rambla, está bajo sospecha por irregularidades urbanísticas y aumento del volumen de obra por modificaciones de las normas subsidiarias. Zapatero también disfruta de un chalé con vistas: desde su terraza podría observar cómo se ejerce la prostitución masculina…

Vera se ha convertido en un refugio no sólo de Zapatero, sino de políticos felipistas, nostálgicos que atesoraron un poder omnímodo; esos aspirantes a sobrevivir al naufragio de Rubalcaba servido en bandeja de plata por el todavía presidente del Gobierno, que se tendrá que preocupar a partir de ahora de diseñar sus próximas vacaciones fuera del Palacio de Las Marismillas de Doñana.

La urbanización más selecta de este municipio almeriense de 14.000 habitantes es Puerto Rey, apenas a un kilómetro de la del inquilino de La Moncloa. El comisario europeo Joaquín Almunia tiene un chalé adosado muy cerca de la playa. El secretario de Estado Diego López Garrido también cuenta con vivienda, pero el más habitual, quien reside más semanas al año, es Manuel Marín, ex presidente del Congreso de los Diputados, y muy poco amigo de relacionarse con el vecindario y bares y restaurantes del entorno, como el Lua, en la avenida del Descubrimiento.

Puerto Rey no es una zona de mansiones; abundan los chalés pequeños, independientes, lejos de los barullos de la costa mediterránea o de la zona nudista de Vera, donde se ubica el único hotel 100% nudista de España, donde posee un apartamento la periodista Amalia Sampedro, delegada de Canal Sur en Madrid y ex periodista política de TVE que cubría la información sobre Felipe González.

‘Sinónimo de felicidad’

También en Puerto Rey veranea Nativel Preciado, otra periodista de la cuerda felipista, y allí terminó su muy recomendable libro Amigos íntimos en abril de 1998. “Dedico el resto del año a un trabajo intenso con una sola obsesión: que llegue el verano y, con él, un mes completo entregada al ocio contemplativo que es mi sinónimo de felicidad”. Se refería a Vera…

En El Mirador suele pasar algunas semanas de agosto el filósofo José Antonio Marina, que aprovecha este mes para pensar algunos de los ensayos que ultimará en otoño. José María Álvarez del Manzano, ex alcalde de Madrid, también suele alquilar una casa, al igual que Javier Solana. “Del Manzano fue el primer político que vino sin ser famosa la zona, antes que esto se convirtiera en Rojilandia; bueno casi mejor queda Zapatilandia”, apunta una vecina de Vera. “Se vuelven veraneantes vips y son elitistas, les encanta mantenerse distantes con el resto de la gente”.