El fiscal jefe del TSJ de Murcia se convierte en el nuevo enemigo público del Partido Popular

El nuevo enemigo público del Partido Popular de Murcia es el recién nombrado fiscal jefe del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) regional, Manuel López Bernal. No es el primero, ni será el último. Antes que Bernal, ya hubo otros ‘enemigos públicos’ que sufrieron la acometida de las huestes ‘populares’.

Primero fue, hace ya más de un lustro, algún periodista independiente -que inició la denuncia pública de las trapacerías del PP gobernante- así como los representantes de los grupos ecologistas opuestos al Trasvase del Ebro y a las recalificaciones de suelo protegido.

Luego, tras la victoria socialista del 14-M, fue la ministra Carbona el principal objeto de crítica, difamaciones y hasta insultos públicos. Desde hace unos meses, al empezar a destaparse escándalos urbanísticos susceptibles de terminar en los juzgados, algunos periodistas volvieron a ser objeto de atención preferente de la propaganda e intoxicaciones oficiales emanadas desde el despacho que ocupa el secretario general de la Presidencia regional, el ex periodista Ruiz Vivo, en el Palacio de San Esteban, sede del gobierno murciano.

Pero la última vuelta de tuerca la ha dado un diputado nacional por Murcia, Alberto Garre, que ha cargado con armas y bagajes nada menos que contra el nuevo fiscal jefe del TSJ murciano, Manuel López Bernal.

¿Cuál era el supuesto ‘delito’, es decir, en qué se basaba la acusación de Garre? En que la mujer del fiscal, la abogada Amparo Hornillos, representó al PSOE en varios recursos interpuestos contra algunas trapacerías urbanísticas del PP al tiempo que su marido, López Bernal, desempeñaba el cargo de máximo representante del ministerio público en la Región.

Craso error. Al diputado Garre le habían bailado las fechas, los papeles, o ambas cosas, pues, como Hornillos acreditó documentalmente, la abogada había renunciado a esos casos bien antes de que su marido fuera nombrado fiscal jefe en Murcia –en acto presidido por el Fiscal General del Estado, Cándido Conde-Pumpido, el 11 de enero de 2006-.

Pero el diputado Garre aseguraba, sin fundamento, que esa renuncia se había producido en abril, cosa inexacta e incierta, como se ha acreditado en los mismos medios de comunicación que dieron ‘la gran exclusiva’ del caso del fiscal el domingo 21 de mayo.

En su osadía, Garre llegó a amenazar con plantear el caso en el Congreso de los Diputados al mismísimo Conde-Pumpido. Nada menos. El fiscal jefe se limitó a señalar que esperaba una rectificación, antes de adoptar otras medidas.

En el fondo del asunto está el nerviosismo que se enseñorea cada vez más con las filas del PP murciano al ver que el nuevo fiscal jefe –miembro de la Asociación de Fiscales Progresistas– lleva abiertas catorce diligencias informativas sobre escándalos urbanísticos en Murcia.

El propio fiscal aclaró recientemente en una entrevista que la proporción de casos que afectan al PP y al PSOE se corresponde casualmente con la proporción de ayuntamientos que uno y otro partido gobiernan en la Región: 75% y 25%, respectivamente, de los 45 municipios murcianos.

El PP añora los tiempos del anterior fiscal jefe de Murcia, Guillermo Sena Media, ahora elevado a la presidencia judicial granadina, quien en diez años no actuó ni una sola vez de oficio, a pesar de que el ‘tinglado’ urbanístico que se está descubriendo ahora empezó a tramarse a raíz de la nueva Ley estatal del Suelo en 1998, del PP, adaptada a Murcia gracias a la nueva Ley regional del Suelo, vigente desde 2001.

Y, en consecuencia, mientras los mayoritariamente conservadores círculos jurídicos murcianos hacen correr sotto voce que López Bernal “es muy político”, el PP, por medio del hábil diputado nacional Alberto Garre, intenta buscarle las cosquillas al nuevo fiscal jefe.

Pero sin resultado e incurriendo en ridículo público ante propios y extraños, pues, el mismo lunes 25, al día siguiente de que el primer diario regional murciano publicara a bombo y platillo la falsa irregularidad de la abogada Hornillos y su marido el fiscal jefe, el presidente regional del PP y de la Región, Ramón Luis Valcárcel, tuvo que mostrar públicamente su apoyo y respeto al fiscal.

Todo ello anticipa, sin lugar a dudas, mucho movimiento judicial en Murcia, una vez que sea reformada la actual Ley del Suelo del 98 y sea nombrado el primer fiscal regional Anticorrupción, designación esperada para el mes de junio.

*Vidal Coy es periodista.