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Tribuna
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Retorno al pasado
Pasado significa volver a 2012. Significa volver a un referéndum pactado y acordado con el Gobierno español
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El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha decidido rendir homenaje a Kirk Douglas, en su centenario aniversario, con la reedición de una película mítica del cine 'noir' protagonizada por el eterno Spartacus, como fue 'Retorno al pasado' ('Out of the past'), dirigida por Jacques Tourneur en 1947.
Porque la cumbre soberanista con invitada especial, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha sido, sin duda, un retorno al pasado. Pasado significa volver a 2012. Significa volver a un referéndum pactado y acordado con el Gobierno español. Significa volver a los tiempos en que no había división del espectro político en bloques. Significa volver a un tiempo en que no había espiral del silencio en el espacio construido por los medios de comunicación.
Pero ¿de verdad la conclusión de la enésima cumbre es un retorno al pasado? Lo cierto es que se abren muchos interrogantes tras la cumbre entre los soberanistas, los comunes y los agentes sociales.
El primer interrogante es sencillo, ¿el Gobierno de Rajoy ha cambiado un milímetro su política del no es no al referéndum secesionista? Respuesta también sencilla: No.
El segundo interrogante es: ¿la cumbre era postureo para ganar tiempo? Pues sí. Una de postureo.
La cumbre ha sido una imposición de los sectores radicales para cohesionar el bloque soberanista cansado de tanto navegar hacia Ítaca.
¿Podrá Colau salir indemne de la cumbre trampa? No se sabe. Lo que sí sabemos es cómo acaba la película 'Retorno al pasado'. Acaba mal. Muy mal
A día de hoy los independentistas representan el 18% del electorado que se incrementan por el inmovilismo del Gobierno de Mariano Rajoy. Sin ninguna oferta creíble por parte del gobierno el bloque secesionista representa un 49%. Conclusión, diálogo, sí, imposición, no.
El tercer interrogante es: ¿los soberanistas atraen a la cumbre a Colau y sus comunes para transversalizar el procesionismo?
Correcto. El soberanismo sigue formando un bloque compacto pero sin traspasar sus fronteras electorales. No superan los 62 diputados. Colau es la clave. Los comunes han mantenido la ambigüedad referida al referéndum. En septiembre de 2015, durante la campaña electoral catalana, Pablo Iglesias era contrario al referéndum. Meses más tarde, durante la campaña de las elecciones generales, era favorable. ¿Motivo del cambio? Entrar en los caladeros del voto socialista. Ambigüedad y tacticismo.
El cuarto interrogante es :¿ha sido una cumbre trampa para Colau?
Colau ha caído en la trampa ideada por los soberanistas. Mantiene el argumento del referéndum pactado y acordado. Los soberanistas lo aceptan como paso previo a presionarla cuando toque.
Los comunes han ganado las dos últimas elecciones generales en Cataluña gracias a la ambigüedad. En primer lugar, con el tema del referéndum y, en segundo lugar, sobre el modelo de Estado. Los comunes han dejado de ser federalistas para abogar por la confederación. El problema es que la confusión es mala consejera electoral. Nunca se sabe con el populismo posverdadero.
En segundo lugar, obligar a los comunes a definirse sobre el tema monotemático permite a los soberanistas bloquear el posible crecimiento del futuro partido de Colau. Definición que llegará cuando el no es no de Rajoy sea la respuesta.
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El quinto interrogante es: ¿los soberanistas han aparcado el referéndum unilateral?
Los soberanistas mantienen su calendario hacia el choque de trenes. Saben perfectamente que el Gobierno español va a mantener su no es no. Que Ciudadanos y el PSOE van a estar en la misma trinchera. Los dos bloques perfectamente dibujados en lógica independentista. Y los comunes de Colau en el centro de la presión. Colau ha declarado que un referéndum no acordado es una consulta. Ya se celebró el 9 de noviembre de 2014. Cierto. Pero ni la CUP ni JXS están por la labor del referéndum pactado y acordado. Referéndum unilateral en septiembre y después elecciones constituyentes según la famosa hoja de ruta secesionista.
¿Podrá Colau salir indemne de la cumbre trampa? No se sabe. Lo que sí sabemos es cómo acaba la película 'Retorno al pasado'. Acaba mal. Muy mal.
*Gabriel Colomé, profesor de Ciencias Políticas en la Universidad Autónoma de Barcelona.
El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha decidido rendir homenaje a Kirk Douglas, en su centenario aniversario, con la reedición de una película mítica del cine 'noir' protagonizada por el eterno Spartacus, como fue 'Retorno al pasado' ('Out of the past'), dirigida por Jacques Tourneur en 1947.