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Matrículas a euro
Susana Díaz ofrece matrículas universitarias gratuitas mientras los rectores reclaman un nuevo modelo financiero que acabe con la asfixia económica de estas instituciones
En cuanto se dio el batacazo en su frustrada huida de Andalucía, Susana Díaz quiso sacudirse el fracaso de las primarias del PSOE con una ronda de invitaciones a costa del dinero de todos: “Susana Díaz promete dar matrícula gratuita a universitarios”. Lo que le faltaba al odioso estereotipo de andaluces holgazanes y vagos es que se extendiera la idea de que la Junta de Andalucía nos regala a todos las matrículas universitarias. Esta misma promesa, pero añadiéndole la coletilla de universitarios con buenas notas, fue su bandera para llegar a Madrid y que la devolvió directamente al sur.
Me decía un buen amigo que, menos el alma y el cariño a los hijos, no hay nada gratis en esta vida, y tanto es así que hasta en los proyectos de ayuda humanitaria existe la premisa del 'no' al gratis total. No puedo estar más de acuerdo con esta afirmación. Lo gratuito no se valora, lo gratuito pierde valor. “Ni agradecido ni pagado”, como dice el refrán. La estrategia de Susana Díaz, desde que ha vuelto a palos a su tierra, ha sido inventar medidas populistas, que dejen de hablar de ella y de los graves problemas de gestión de su Gobierno.
Con este regalo envenenado, que pagaremos todos comenzamos el curso, mientras que los más pequeños continúan en sus cárcolas prefabricadas. Mientras la climatización de los colegios se reduce a “beban agua, pongan sombra”. Mientras que nuestras universidades quedan a mucha distancia de la entrada de la lista de Shanghái.
En 2015, el Gobierno de Susana debía a las Universidades 500 millones de euros, ese fue el tope, ahora ‘solo deben’ más de 300 millones
La clave de todo está en la respuesta a una sola pregunta: ¿está Andalucía en condiciones de ofrecer matrícula gratis a los universitarios? De todos los países de la Unión Europea, solo ocho, y no en todas las regiones y no en todos los niveles universitarios, se ofrece matriculación gratuita en las universidades. Entre estos ocho, encontramos a Finlandia, Noruega, Suecia o Alemania. Si el Estado del bienestar en esos países o regiones no atraviesa por ningún problema de financiación y si el sistema educativo es exitoso además de solvente, ¿quién se puede oponer a que las ayudas que se ofrecen a los ciudadanos se amplíen a las matrículas de universidad? En ese caso, ninguna objeción. Lo que directamente me descompone, es que seamos los andaluces, la comunidad con peores ratios económicos, de empleo y educativos los que abanderemos un proyecto, que sabemos será inviable con el gobierno actual.
Una vez más Susana antepone sus proyectos personales a los de la región. Dedica su tiempo a mejorar su imagen, en vez de mejorar nuestra tierra
¿Cómo se puede tener el desahogo de ofrecer matrículas gratis cuando el problema de las universidades andaluzas es la enorme deuda de la Junta de Andalucía? En 2015, el Gobierno de Susana debía a las universidades 500 millones de euros, ese fue el tope, ahora ‘solo deben’ más de 300 millones. Los rectores han reclamado durante años un nuevo modelo financiero que acabe con la asfixia económica de estas instituciones. Este nuevo modelo, que como todo documento del Gobierno regional, ha tardado más de tres años en desarrollarse, vuelve a retrasarse hasta 2018 con un incierto modelo transitorio que desfavorece a las universidades de menor tamaño.
Pertenezco al Consejo Social de una de nuestras universidades andaluzas desde hace varios años. En estos años, la única realidad constante era la falta de pago, la deuda, el retraso que mantenía el Gobierno regional con quienes intentan generar talento en nuestra tierra, las universidades. Y mientras, las universidades siguen recortando, controlando el gasto. Siendo responsables. Imagino la perplejidad de muchos catedráticos, profesores universitarios y hasta el personal de administración y servicios cuando oyeron a la presidenta. Una vez más, Susana antepone sus proyectos personales a los de la región. Dedica su tiempo a mejorar su imagen, en vez de mejorar nuestra tierra. Una promesa más, como tantas otras. Promesas de leyes que nunca vieron la luz. Porque aquí lo único que parece gratis es prometer a sabiendas de que nada se cumplirá.
*Sol Cruz Guzmán es arquitecta y consejera del Consejo Social de la Universidad Pablo Olavide de Sevilla
En cuanto se dio el batacazo en su frustrada huida de Andalucía, Susana Díaz quiso sacudirse el fracaso de las primarias del PSOE con una ronda de invitaciones a costa del dinero de todos: “Susana Díaz promete dar matrícula gratuita a universitarios”. Lo que le faltaba al odioso estereotipo de andaluces holgazanes y vagos es que se extendiera la idea de que la Junta de Andalucía nos regala a todos las matrículas universitarias. Esta misma promesa, pero añadiéndole la coletilla de universitarios con buenas notas, fue su bandera para llegar a Madrid y que la devolvió directamente al sur.