Un nuevo feminismo de mujeres libres y capaces

Este jueves, Día de la Mujer, hay que comenzar valorando el esfuerzo realizado por tantas y tantas mujeres que día a día han luchado y luchan hoy, lucharon ayer y seguramente seguirán luchando mañana por nuestros derechos.

Gracias a ellas, yo puedo estar este jueves aquí.

He podido decidir.

Podría no haber asistido al consejo de gobierno, podría no estar participando en esta rueda de prensa. Reconozco que lo he comentado con el propio presidente. Pero he decidido, porque hoy las mujeres podemos decidir.

Yo este jueves he decidido estar aquí, porque pienso que puedo contribuir aprovechando la oportunidad que me da ser la voz del Gobierno de Castilla y León para hacer una firme defensa de los derechos de las mujeres y de los hombres. De la necesaria igualdad entre ambos. Más allá de leyes, de normas, aun reconociendo que gracias a ellas, yo misma, este jueves, puedo utilizar este escenario para reivindicar nuestros derechos.

Quiero hacer una mención especial a la necesidad de avanzar en el mundo rural. Allí, el esfuerzo que debemos hacer aún es superior

Es cierto que desde la Junta de Castilla y León venimos trabajando intensamente en la lucha contra las desigualdades, pero también lo es que la realidad va por delante de normas, planes y estrategias. NO NOS PODEMOS CONFORMAR con lo conseguido, a pesar de que nuestra comunidad ha avanzado más que otras regiones y países. Ayer mismo, un consenso pleno en la Cortes Regionales instaba a reforzar ayudas económicas para facilitar la conciliación, a flexibilizar horarios, a impulsar aspectos educativos clave para avanzar en igualdad. Y no solo consenso político, hay que recordar que este acuerdo nace del que hace unas semanas firmaba el presidente de la Junta con los agentes del diálogo social. Y que servirá para impulsar una Ley de Igualdad en la que se recogerán estos y otros conceptos que sin duda nos permitirán seguir avanzando. La unidad de acción siempre ha sido y seguirá siendo clave.

Quiero aprovechar el hecho de que la voz del Gobierno de Castilla y León sea una mujer para, sin olvidar lo que se ha avanzado, "reconocer lo mucho que nos queda por hacer", por encima de ideologías que, lejos de contribuir a buscar soluciones, pueden llevar a divisiones, incluso entre quienes somos las protagonistas de este día.

QUIERO APROVECHAR este momento para comprometer el trabajo y el esfuerzo de quienes tenemos responsabilidades de Gobierno en la lucha contra la desigualdad en todas sus expresiones.

CONTRA LA INCONCEBIBLE brecha salarial: no se puede consentir que trabajando lo mismo los salarios sean diferentes.

CONTRA LOS ESTEREOTIPOS que nos arrogan funciones por definición. Debemos avanzar como sociedad y reconocer la IGUALDAD en todos los escenarios de la vida: laboral, familiar, personal. SOMOS IGUALES A LOS HOMBRES, pero cada quién diferente entre sí.

Afortunadamente, día a día desaparecen las barreras en el acceso a la formación y, cada vez más, las mujeres somos libres para elegir nuestra carrera profesional, trabajo y estilo de vida. No podemos, en esta lucha, ser víctimas de los estereotipos, ni debemos considerarnos, por definición, víctimas de una sociedad machista. Eso limitaría nuestra ambición y nos llevaría al conformismo.

Y aun reconociendo que ya hay mujeres rectoras de universidad, juezas, fiscales, políticas, diplomáticas, escritoras o investigadoras, entre otras, debemos seguir trabajando, por ejemplo, en el desafío que aún supone la brecha de género en profesiones de ciencia y tecnología. No podemos dar NADA por conseguido hasta que los límites a nuestro desarrollo profesional sean EXCLUSIVAMENTE nuestros méritos profesionales o nuestra propia decisión y capacidad para desempeñar determinado puesto.

Día a día desaparecen las barreras en el acceso a la formación y las mujeres somos libres para elegir nuestra carrera profesional

Quienes tenemos responsabilidades de gobierno debemos seguir trabajando e instando a toda la sociedad a luchar CONTRA esa gran lacra social que es la VIOLENCIA DE GÉNERO. La violencia no se puede justificar en ningún escenario de la vida. Tanto menos entre iguales. Debemos reconocer que en algo estamos fallando como sociedad cuando asistimos a tragedias continuas, en que mujeres e incluso niños se ven afectados por este grave problema al que no somos capaces de dar solución.

Quiero hacer una mención especial a la necesidad de avanzar en el mundo rural. Allí, el esfuerzo que debemos hacer aún para alcanzar la igualdad social es muy superior. Por eso, precisamente cuando acabe el consejo de gobierno, iré a Magaz de Pisuerga, a mi provincia, a reiterar mi apoyo a las mujeres rurales en un sector profesional con aún poca presencia femenina como es el agrario.

Finalizo felicitando a todas las mujeres en este día. Y comprometiendo mi trabajo diario y el del Gobierno al que represento por seguir luchando por la IGUALDAD con mayúsculas, por nuestra libertad de decisión y capacidad de actuación. Y lanzando un mensaje de unidad a todas las castellanas y leonesas para seguir luchando por nuestros derechos.

*Milagros Marcos, consejera de Agricultura de Castilla y León y portavoz del Gobierno regional.

Este texto fue leído este jueves 8 de marzo tras el consejo de gobierno de la Junta de Castilla y León.