Este es el tablero electoral que maneja Juanma Moreno para gobernar en solitario

Una vez que el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno Bonilla, ha puesto negro sobre blanco la fecha de los comicios (el 19 de junio), el tablero electoral andaluz se presenta despejado para un segundo mandato en el que el PP tratará de gobernar en solitario con Vox fuera del Palacio de San Telmo.

Ese es sin duda el objetivo al que aspiran en el cuartel general del PP andaluz, si el reparto de escaños y el recuento final de los últimos votos de cada circunscripción permiten ese escenario. En Estrategos, hemos realizado un estudio a partir de las encuestas publicadas este año y de su transcripción a partir de técnicas propias basadas en la distribución provincial en las últimas elecciones autonómicas y la posterior distribución de escaños. Estos son los números que podrían dar la reválida a Moreno Bonilla.

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El PP duplicaría sus resultados de 2018 y podría tener más diputados que la suma de toda la izquierda parlamentaria. Con la probable desaparición de Ciudadanos, los resultados del PP se podrían disparar hasta prácticamente duplicar sus resultados. De los 26 actuales hasta una horquilla que oscila entre los 44 y 48 parlamentarios que arrojan las encuestas.

El PP superaría por sí mismo la suma de la izquierda —PSOE (entre 31 y 33), Unidas Podemos (entre seis y nueve) y, en caso de conseguir representación, Adelante Andalucía (entre cero y tres)—. En este escenario, tal y como ocurrió en la Comunidad de Madrid, el PP tendría un argumento sólido para tratar de gobernar en solitario, sin las ataduras de Vox y dejando la foto de Castilla y León, el pacto de Mañueco y Juan García-Gallardo, como un mero 'accidente' electoral.

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La clave estará en el reparto final de escaños en las provincias decisivas. Veamos... El tablero se presenta muy estable en Almería y Jaén. En el caso de Almería, todas las encuestas arrojan un resultado de tres diputados para el PSOE, seis para el PP y tres para Vox, y en Jaén las encuestas reparten cuatro diputados para el PSOE, cinco para el PP y dos para Vox.

La campaña del PP y Vox echará el resto en Málaga. Es la única provincia donde Ciudadanos podría robar el último diputado a Vox —estaría disponible a una distancia de unos 1.000 votos—. Pero los de Abascal empujan fuerte y aspiran a ser segunda fuerza política en esta importante plaza andaluza.

Con una intención de voto entre el 15% y el 20% para los de Abascal en estas elecciones —aún sin candidato o candidata—, Vox tiene asegurada la tercera posición en toda Andalucía.

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En Cádiz, serían Ciudadanos y Adelante Andalucía quienes se podrían disputar el último diputado.

Además, en Sevilla —y esto sí que será un hito— el PP podría ganar por primera vez en su historia al PSOE en una provincia donde nunca, en ninguna elección, los socialistas han dejado de ser la primera fuerza política. Y en Huelva, será Vox quien podría quitarle el último escaño a Unidas Podemos.

El aumento de participación favorece a la derecha

Todas las encuestas apuntan a que, aun con una mayor participación electoral, el PSOE no mejoraría sus resultados. La baja participación de las pasadas elecciones autonómicas perjudicó al PSOE, pero una mayor participación electoral en estas próximas elecciones no parece traducirse en una mayor intención de voto para la izquierda. El PSOE podría, eso sí, garantizarse el mismo número de escaños que ya ostenta.

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Al igual que ocurrió en Madrid, las encuestas indican que el aumento de la participación favorecerá a la derecha, pues, a pesar de que los partidos de la izquierda obtendrían el mismo número de votos, el aumento de la participación se traduciría en un menor porcentaje de voto para estas formaciones.

Sin opciones de gobierno para la izquierda a la vista, la desmovilización favorecerá a Juanma Moreno y las probabilidades de que la derecha no revalide la Junta serán prácticamente inexistentes. Ya sea con o sin Vox. Esa es la cuestión.

* Francisco Jerez y Carles Salom. Asuntos Públicos Estrategos.