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¿Qué significa un DAX a 8.100?
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Yosi Truzman

Análisis Técnico

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Yosi Truzman

¿Qué significa un DAX a 8.100?

Lo primero que se viene a la cabeza, después de un titular como este, es si no se trata de una errata. Y es que el

Lo primero que se viene a la cabeza, después de un titular como este, es si no se trata de una errata. Y es que el selectivo alemán no cotiza a 8.100. Cotiza 300 puntos por debajo de este nivel.

En este gráfico se analiza la evolución del DAX contado en base diaria. El movimiento alcista que se inició a mediados del mes de noviembre tras perforar, en falso, el último máximo creciente del movimiento alcista de grado mayor iniciado en septiembre de 2011 y el último máximo creciente del movimiento alcista de grado menor iniciado en junio de 2012 (zona comprendida entre el 7.000 y el 7.200), ha logrado superar con absoluta claridad y contundencia, tanto la zona de máximos alcanzada en septiembre de 2012 (7.446 a 7.478) como la zona de máximos alcanzada en mayo de 2011 (7.527 a 7.600) de donde partió el último gran movimiento bajista que se agudizó durante el verano de ese año.

La superación de toda esta zona se ve ratificada por el escenario técnico que se aprecia en el gráfico del mismo índice pero en base semanal.

En el año 2007, justo antes del inicio del estallido de la burbuja inmobiliaria en los EEUU, el selectivo alemán logró alcanzar los máximos que había logrado alcanzar durante el momento álgido de la burbuja tecnológica en el año 2000. Estos máximos se fijaron entre el 7.975 (máximo cierre semanal de entonces) y el 8.136 (máximo alcanzado intradiariamente).

A lo largo de ese año, el índice entró en una fase de consolidación lateral amplia en la que intentó, en varias ocasiones y sin éxito, superar sus máximos históricos, formando con ello un amplio proceso de distribución. Esta estructura suele aparecer, generalmente, antes de los grandes cambios de tendencia. La ruptura de la zona comprendida entre el 7.343 y el 7.190, zona en donde se fijó el último máximo creciente de la estructura alcista previa y la base del proceso distributivo durante el mes de enero de 2008 (estallido del escándalo de Kerviel), supuso la confirmación del proceso distributivo previo al cambio de tendencia. El "pullback" posterior del mes de mayo de 2008 demostró que el soporte se había convertido en resistencia, condición necesaria para ratificar un cambio de tendencia según la Teoría de Dow (inversión de papeles de soporte a resistencia).

Esta es la zona que el índice lleva intentando recuperar a lo largo de los últimos 2 años. En 2011 logró superarla en 3 ocasiones, pero ninguno de estos intentos tuvo consistencia . En 2012 se logró superar por primera vez en septiembre tras el anuncio de las políticas monetarias del BCE y de la FED. Sin embargo, esta ruptura tampoco tuvo consistencia. De hecho, la ruptura del 7.190, en cierre semanal, a mitad del mes de noviembre disparó las alarmas ya que generaba la señal técnica que indicaba un nuevo fallo en el intento de superación de la resistencia, lo que podía transformarse en otro movimiento bajista parecido al desplegado en verano de 2011.

Sin embargo, el índice se dio la vuelta con rapidez generando con ello una ruptura de soporte en falso. Desde entonces, ha entrado en una fase alcista continua que ha logrado superar no solo la zona de resistencia crítica mencionada, sino también los máximos de los intentos alcistas anteriores. Este comportamiento apunta a una ruptura consistente de esta zona con lo que el camino hacia los máximos históricos (7.975 a 8.136) está completamente despejado. Solo vueltas por debajo de la zona comprendida entre el 7.450 y el 7.600 podría poner en duda este escenario.

Una vez fijado el escenario técnico más probable para las próximas semanas, hay que preguntarse lo que implica, a nivel macro, que el DAX vuelva a sus máximos históricos. Mantuve esta discusión con mi amigo Alberto Espelosín, gestor de Abante, el pasado jueves y he aquí las principales conclusiones.

En este gráfico se compara la evolución del índice IFO alemán (índice de clima empresarial) y la evolución del dato de PIB alemán interanual. El gráfico se presenta en base mensual porque el dato de clima empresarial se publica con esa cadencia. El dato de PIB es trimestral.

Obviamente, la correlación entre ambas series es muy elevada. Esto es lógico puesto que el clima empresarial que desprenden las encuestas realizadas a los empresarios está íntimamente ligada al crecimiento de la economía alemana. Con ello se aprecia que a los niveles de crecimiento actuales (0,9% interanual), el IFO debería poder alcanzar niveles cercanos a los 105 puntos. Puesto que las previsiones oficiales de crecimiento para 2013 (FMI y Comisión Europea) se sitúan en torno al 0,9%, sería lógico anticipar que el IFO debería moverse alrededor de los 105 puntos a lo largo del año que viene.

En este otro gráfico se analiza la evolución del índice IFO alemán (índice de clima empresarial) y la evolución del DAX. De nuevo, se presenta en base mensual puesto que es la cadencia con la que se publica el dato de sentimiento.

Se aprecia que la correlación existente entre ambas series es también muy elevada. Esto es también lógico en tanto en cuanto el índice alemán debería reflejar la capacidad de generación de beneficios de las empresas alemanas. Si la confianza empresarial es elevada es porque los gestores de las empresas piensan que van a generar unos buenos beneficios. Lo contrario implicaría una perspectiva de beneficios no muy buena con lo que la cotización de las acciones no debería subir.

Para que la subida que se inició en el DAX en octubre de 2011 y que aún sigue vigente tuviese consistencia, el índice IFO debería estar más cerca de los 115 puntos que de los 100. Esta descorrelación es aún más notable desde junio/julio de 2012, momento en el que se produjo la promesa de Draghi.

Si el IFO se ajusta a lo que se espera de PIB para el año que viene que, tal y como se ha comentado, es de un +0,9%, el índice debería llegar a 105. Para ajustarse al actual nivel de DAX y, sobre todo, a la posible llegada del mismo al entorno de máximos históricos que se ha analizado previamente (7.975 a 8.136), el IFO debería alcanzar cotas cercanas al 115. Si volvemos a echar un vistazo al gráfico que compara la evolución de este índice con la del PIB, veremos que niveles de 115 son consistentes con crecimientos de la economía en el entorno del 4,5% a 5,0%, situación que, con toda probabilidad, no se producirá en 2013.

La conclusión a la que se llega es que un DAX en el entorno de los 8.100 está claramente sobrevalorado si se mantiene la hipótesis de crecimiento de la economía alemana en los niveles actuales. Parece evidente que esta sobrevaloración es consecuencia directa de la promesa de política monetaria expansiva del BCE dirigida a salvar el Euro, así como de la puesta en marcha de los programas LTRO’s. Pero, económicamente hablando, parece más que evidente la fuerte sobrevaloración existente.

Esto no significa, volviendo al terreno del análisis técnico, que el índice vaya a desplomarse mañana. De hecho, tal y como ha quedado descrito al principio del post de hoy, es muy probable que se alcancen los entornos del 8.100 a no mucho tardar. Pero lo que sí nos indica es que se debe ser consciente de lo que se está comprando a estos niveles de índice y lo poco probable que, dadas las circunstancias macro, es que el DAX logre superar sus máximos históricos lo que, desde un punto de vista técnico, implicaría la posible formación de un gran triple techo.

Lo primero que se viene a la cabeza, después de un titular como este, es si no se trata de una errata. Y es que el selectivo alemán no cotiza a 8.100. Cotiza 300 puntos por debajo de este nivel.