Es probable que Iberdrola alcance los 4,59 euros

El comportamiento de Iberdrola ha venido siendo muy errático durante todo el año 2013. Durante los últimos días del año pasado y los primeros de este año (periodo de pago del dividendo), el valor intentó superar sin éxito la importante zona de resistencia estructural situada entre los 3,90 y los 4,00. Esta zona representa el mínimo que se alcanzó en 2009 la cual se perforó en 2012 pasando a ser, desde entonces, la principal resistencia estructural (ver gráfico de largo plazo).

Posteriormente, el valor volvió a atacaresta zona de resistencia en mayo sin éxito, lo que volvió a generar una trampa alcista que se tradujo en un proceso correctivo. El último intento de ruptura se produjo a principios del mes de agosto. En esta ocasión, la subida se detuvo ligeramente por encima de los máximos anteriores y volvió a retroceder. Sin embargo, este retroceso ha logrado detenerse en la zona de resistencia superada lo que eleva la probabilidad de que, en esta ocasión, se haya logrado superar de manera consistente (ruptura y pullback).

Por otro lado, hay que resaltar que todos los intentos de ruptura de la resistencia comentados han ido alcanzando máximos marginalmente superiores. Las correcciones que han ido apareciendo posteriormente también han ido marcando mínimos cada vez superiores. Todo ello se traduce en la posible construcción de una lenta estructura de máximos y mínimos crecientes.

Hay que resaltar también que en este último ataquea la resistencia, la configuración de las medias da mayores probabilidades de éxito que las anteriores (todas con pendiente alcista con la de 50 por encima de la de 100 y ambas por encima de la de 200 sesiones). Además, el retroceso de agosto solo ha provocado un acercamiento de la media de 50 a la de 100. La reacción alcista de los últimos días está permitiendo que la pendiente de estas medias empiece a distanciarse de nuevo, comportamiento que se conoce con el nombre de ‘la bonita’ y que apoya el movimiento alcista.

Todos estos argumentos indican que es altamente probable que la zona de resistencia clave estructural situada entre 3,90 y 4,00 pueda considerarse superada lo que abre una ventana alcista de envergadura. Sin embargo, la falta de catalizadores a corto plazo en el valor desde un punto de vista fundamental hace poco probable que se produzca una subida en vertical con lo que lo más probable es que su comportamiento siga siendo lateral alcista y tienda al 61,8% del movimiento bajista que se inició en 2011 situado en 4,59 (se trata del movimiento que perforó consistentemente el mínimo de 2009).

Por ello, se debe aprovechar cualquier vuelta a la zona comprendida entre 4,15 y 4,20 para comprar, añadiendo más posición larga en el caso de que alcance el entorno de los 4,00 a sabiendas que un cierre consistente por debajo de 3,90 sería motivo para liquidar la posición. El objetivo de beneficios debe situarse entre 4,55 y 4,60.