Bolságora
Por
Aparte de Dinamarca, empiezan a oler más cosas mal
La sensación de fallo alcista crece y la posibilidad de una gestión agresiva de la exposición ha sido puesta sobre la mesa tras la jornada de ayer miércoles
Sesión de cambio de humor y al cierre nada. Nada nuevo para el IBEX35. La vela desplegada, de tipo vela de onda alta, plantea un intento de los alcistas de frenar la sangría que tuvo más que ver con la sobreventa de muy corto plazo que con otra cosa. La sensación, reforzada por la llamativa jornada de ida y vuelta a bajista que vivió Wall Street, no sugiere nada nuevo y nos acerca a una ruptura de soporte a nivel eurozona y a un inquietante cierre semanal.
Ruptura en gráfico diario de importante zona de soporte para el Eurostoxx50. Sin paliativos y suficiente para justificar algún tipo de reacción en términos de exposición como el que el IBEX35 planteó en la jornada previa. Mantiene el mercado sin embargo en pie, cierto soporte decreciente y al DAX30 y cabe la duda de lo que pudiera acontecer en cierre semanal considerando que también hubo salida alcista previa y que las rupturas por ambos lados son propias de ciertos patrones laterales. Con todo, la sensación de fallo alcista crece y la posibilidad de una gestión agresiva de la exposición ha sido puesta sobre la mesa tras la jornada de ayer miércoles.
Si tras el cierre de anteayer algo empezaba a oler mal en Dinamarca, la jornada de este miércoles ha incrementado las sensaciones negativas. No tanto por el movimiento bajista adicional, en cierto modo lógico y normal dada la ruptura del Transportes, como por el que éste viniera precedido de una fuerte apertura compradora en el conjunto del mercado -aunque con la inquietante falta de apoyo por parte del Nasdaq- que terminó en sensibles pérdidas. La ruptura de los primeros soportes exigiría una reordenación de la exposición dando por hecho que podríamos tener un retest de la zona de mínimo anual. Sólo por debajo de ésta podría hablarse de cambio de tendencia.
Sesión de cambio de humor y al cierre nada. Nada nuevo para el IBEX35. La vela desplegada, de tipo vela de onda alta, plantea un intento de los alcistas de frenar la sangría que tuvo más que ver con la sobreventa de muy corto plazo que con otra cosa. La sensación, reforzada por la llamativa jornada de ida y vuelta a bajista que vivió Wall Street, no sugiere nada nuevo y nos acerca a una ruptura de soporte a nivel eurozona y a un inquietante cierre semanal.