Bolságora
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Las bolsas siguen haciendo historia
Es momento para mantener, ojo con la euforia, con o sin nuevos altos crecientes del Transportes y/o el Russell2000
Semana en la que Europa vivió algunas hazañas pese a que, como tantas veces desde 2012, vive un proceso tendencial menos agradable para los compradores que el del mercado norteamericano, y con una suerte repartida por barrios. Pese a todo, hoy, salvo en casos como el del IBEX35, hablamos también de máximos históricos generalizados. Y no anda nuestro principal índice tan lejos de ello como la gente cree, empeñada como anda en su mayoría en mirar los gráficos de un modo que no les permite ver el bosque.
El Stoxx600 marcó nuevos altos históricos en versión total return, con claridad, y sigue insistiendo en su propósito de situarse por encima de la directriz alcista principal que perdía a finales de 2019. Asegurar esta pelea dependerá de lo que suceda con el DAX30 y el EuroStoxx50 en sus máximos de las últimas semanas. La zona que atacan los germanos es de máximo histórico (recuerde que los alemanes, que hacen las cosas racionalmente desde hace siglos, utilizan por defecto un índice total return).
La resistencia que puede batir el EuroStox50, manteniéndose sobre línea de tendencia en corto/medio plazo pese a su falta de puch relativo, también va a resultar clave en el asunto. Pero para elemento a tener presente el de del footsei100 de Londres, que marcó máximo histórico ayer viernes pero aún debe superar la resistencia ascendente que define su proceso lateral de los últimos dos años. Es una resistencia que hemos batido los demás. Por supuesto, en versión total return.
Al otro lado del Atlántico, los alcistas siguieron aporreando a los osos con nuevos récords que ya acercan al mercado al techo de los canales alcistas que hemos tenido como referencia desde el suelo que se produce sobre ellos a principios de 2019, y que se validaron como objetivo chartista con la superación de resistencias crecientes del último trimestre. Contra este robusto mercado alcista hoy sólo puede contraponerse a Dow, y su idea de que un mercado es sano cuando la media Transportes apoya a la Industrial. Superar los altos que vimos a mediados de 2018 en el Dow Jones de Transportes y en el Russell2000 remataría a los que siguen teniendo dudas. Y es que el mercado está a punto de liquidar a los que hacen un mal uso de la teoría Dow. Las anomalías por teoría Dow son como las burbujas financieras. Se abusa del recurso, que tiene mala prensa, pero en su inmensa mayoría no explotan sino que dejan de ser tal cosa porque normalizan sus parámetros (entre la explosión de una burbuja y un aterrizaje suave hay otras muchas posibilidades). Estamos a punto de asistir a una nueva lección para los que no entendieron a Charles Dow en el colegio de chartistas.
Pero eso no significa que no vayamos a asistir a esa corrección que tangos esperan. Lo haremos, y empezaremos a estar listos para ello en cuanto alcancemos techo de canal alcista principal. El sentimiento inversor, medido por la media de 10 sesiones del ratio put/call, se encuentra al borde de alcanzar la zona que empieza a delimitar lecturas extremas. Hace tiempo que tenemos al diferencial entre alcistas y bajistas de Investor Intelligence registrando esos niveles… Pero ojo, que un mercado puede no regresar nunca al punto en el que empezó a sobrecalentarse. Es momento para mantener, ojo con la euforia, con o sin nuevos altos crecientes del Transportes y/o el Russell2000. Batir sosteniblemente el techo de canales alcistas tan claros es siempre difícil, sobre todo en índices, pero el mercado puede seguir escalando, corrección menor tras corrección menor, percutiendo contra la que es una resistencia creciente, una y otra vez, durante meses, como ya sucediera en 2014.
Semana en la que Europa vivió algunas hazañas pese a que, como tantas veces desde 2012, vive un proceso tendencial menos agradable para los compradores que el del mercado norteamericano, y con una suerte repartida por barrios. Pese a todo, hoy, salvo en casos como el del IBEX35, hablamos también de máximos históricos generalizados. Y no anda nuestro principal índice tan lejos de ello como la gente cree, empeñada como anda en su mayoría en mirar los gráficos de un modo que no les permite ver el bosque.