Bolságora
Por
Wall Street sigue en su pequeño paraíso
El S&P 500 sigue viajando libre de marca, rumbo a esa súper resistencia ascendente que el Nasdaq dejó atrás al batir los 10.400 puntos
Nuevos altos históricos para el mercado mundial debido a los nuevos récords de algunos índices de Wall Street. Y dentro de esta, para el tecnológico Nasdaq. La salida alcista del movimiento lateral/alcista que se producía hace algunas semanas lo ponía teóricamente fácil -y digo lo de la teoría por el caso de China, al que vuelvo enseguida- y no está defraudando.
Hemos tenido nuevos altos tecnológicos, y por ende en el Standard & Poor´s 500, que sigue viajando libre de marca, rumbo a esa súper resistencia ascendente que el Nasdaq dejó atrás al batir los 10.400 puntos. Lo llamé muro de granito en su día. Vayan buscando un nombre para este que llega, porque teóricamente es más gordo… ¿Muro de acero?
Hacia dicho muro nos movemos. Y lo hacemos con apoyos escasos dentro y fuera de las fronteras norteamericanas a pesar del claro patrón de continuidad, de tipo bandera, que presenta el Dow Jones de Industriales -por cuarta vez desde los mínimos de marzo de 2020-, el mismo patrón que presentó por dos veces el Nasdaq durante el lateral de los últimos meses.
El Russell2000 sigue renqueante aunque cerca de máximos. El Dow Jones de Transportes a duras penas ha rebotado tras un sensible ajuste, por lo que puede estar formando una divergencia de final de tramo en medio plazo. La volatilidad va dejando mínimos, pero no se emplea a fondo a la baja. O no tanto como debiera. De hecho, en una semana de considerable alza del Nasdaq, al que ayer le vinieron muy bien los bonos, el VXN se habría mantenido finalmente en lateral tras momentos de claro rebote pese a las sensibles ganancias del mercado tecnológico.
Y si miramos más allá veremos a un mercado europeo que no acompaña desde hace muchas sesiones, tímido sobre su zona de primer soporte, con los bancos tocados en el corto plazo desde hace días y sin nueva foto mientras no se rompan los 360 puntos del sectorial total return. Pero no todo acaba ahí, porque una plaza que parecía haberse reordenado al alza desde nivel de soporte a medio plazo se muestra renqueante de nuevo. Y el patrón del CSI300 es de los que uno ataca con los ojos cerrados cuando se rompen los 5.200 puntos. Y ahí está, renqueante. Y francamente, todo ello me preocupa más de lo que me alivia la recuperación que los bonos mantienen desde abril. Una recuperación, por otro lado, bastante amorfa.
Un S&P500 alcanzando el citado muro de acero en estas circunstancias, con este tipo de problemas en la calidad del movimiento, y con un sentimiento inversor por las nubes desde hace meses, nos hablaría un mercado que tal vez va sugiriendo que nos tomemos a partir de ahí unas buenas vacaciones.
Nuevos altos históricos para el mercado mundial debido a los nuevos récords de algunos índices de Wall Street. Y dentro de esta, para el tecnológico Nasdaq. La salida alcista del movimiento lateral/alcista que se producía hace algunas semanas lo ponía teóricamente fácil -y digo lo de la teoría por el caso de China, al que vuelvo enseguida- y no está defraudando.