Ya tienes el pánico que caracteriza a los suelos bursátiles

Desde hace un par de semanas me hago preguntas sobre el sentimiento inversor a la espera de que todo haga click. La semana pasada progresamos, pero no todo encajaba. El momento en que todas las piezas encajaron llegó el pasado miércoles.

Se lo contaba a los clientes de Blackbird y a los escuchantes de Capital radio el miércoles. La hora había llegado y sin embargo en los precios empezaba a parecer que todo estaba perdido. La corrección del 1% que mantenía el Nasdaq mientras hablaba con Rocío Arviza se difuminó al cierre, y ayer tuvimos un día de gloria. El Click parece haber funcionado.

Como saben los que me conocen, uso diferentes herramientas de sentimiento inversor porque soy analista técnico pero no me he caído del guindo hace unos pocos telediarios. Batallo con esto desde 1995 profesionalmente, y sé que la tendencia es mi amiga a veces y que hay muchas clases de tendencias. Como explique durante el programa de Rocío, una de las cosas que utilizo combina a la volatilidad, a la encuesta de Investors Intelligence, al dato diario del ratio put/call y a un criterio para medir la descarga y acumulación diaria de papel. Al final todo ello configura un pequeño algoritmo que en principio me señala si el mercado ha llegado a un miedo extremo en tendencia principal. El miércoles ese algoritmo dijo: ahora sí.

Como puede verse en el siguiente gráfico, este setup comprador se dio al final del mercado bajista de primeros de los años ´90, producido por la Guerra del Golfo. Volvió a darse en 1998 mientras Rusia colapsaba y el LTCM se iba al garete. De aquellos barros monetarios, los lodos que hoy habitamos. Volvió a activarse días después de los atentados terroristas del 11S y a finales del mercado bajista de primeros del siglo XX, en 2002.

Durante más de un lustro no volvimos a verlo en acción. En 2009, sin haberse activado una sola vez en toda la gran crisis financiera, nuestra pequeña herramienta de sentimiento volvía a levantar la voz. Completé entonces el argumento que venía describiendo en lo que resultó mi famosa “C” de Barack, la detección de un suelo que denominé como generacional mientras se hablaba del fin del capitalismo. Fui nominado por elEconomista para el premio “Joven y brillante” de periodismo económico, algo a lo que nunca había aspirado alguien que no fuera periodista. Ignoro si ha pasado después, aunque lo dudo mucho.

Tras la histórica ventana de 2009, esta señal de sentimiento inversor extremo volvió a visitarnos en 2010 y en 2011, importantes movimientos correctivos en los que todo esto del sentimiento inversor jugó su papel en mis predicciones de suelo realizadas en aquella casa de la que aguardo tan amargo recuerdo. Misma historia en 2015 y 2016, y mismo discurso ya desde esta casa. Finales de 2019, haga el favor y no venda. Marzo de 2020, un rayo de luz en medio de las tinieblas con recomendaciones de compra en medio del pánico. El pasado miércoles, llamada a la calma. Honestamente, lo que cerramos en los 16.000 puntos del Nasdaq100 debería ser recomprado total o parcialmente. Sólo tengo dudas de que el suelo se haya desplegado ya exactamente porque venimos de la súper resistencia ascendente. No descartaría que en algún momento, y tras un fuerte rebote que ya debería estar en marcha, los índices recaigan tal y como sucedió en 2016 para que se repitiese la señal que ya habíamos visto en 2015. Pero tengamos presente que eso permite diferentes posibilidades, incluso una vuelta a la gran resistencia creciente para una posterior recaída.

En cualquier caso, ni siquiera la única vez que este indicador no señaló un suelo en tendencia de largo plazo, septiembre de 2001, desmereció su uso para trading en tendencia: el rebote fue superior al 20% en el S&P500 antes de que el índice recayese con estrépito.

¿Y qué ha sucedido con la volatilidad y los precios esta semana?

Desde hace semanas, las bolsas europeas, China y Japón, se niegan a acompañar mercado norteamericano en sus nuevos mínimos anuales. En casos como el del IBEX35, el ejercicio de resistencia a la recaída es espectacular: una pequeña bandera de continuidad alcista tras un freno en zona de máximo previo. Impresionante. El DAX40 y el Eurostoxx50, ni siquiera con una directriz bajista tan impresionante como la que tienen, se han sentido en cierto modo cómodos, frenando sobre un pequeño soporte decreciente de corto plazo.

Por su parte, la corrección norteamericana, mucho más problemática desde un punto de vista chartista por haber generado nuevos y generalizados mínimos descendentes, ha propuesto cosas importantes. Destaca el Dow Jones de Transportes, que los ha negado en todo momento. El Dow Jones de Industriales canaliza perfectamente. El Nasdaq y el S&P podrían verse también como banderas pese a una violenta dilatación del suelo de un canal que, gracias a la brutal recuperación de ayer, mantienen los precios en cierre semanal desplegando velas potencialmente alcistas de tipo martillo. La dilatación bajista de los canales, además, se ha caracterizado por la falta de confirmación de la volatilidad al movimiento de los precios tal y como he venido señalando aquí semanalmente, y desde el web de Blackbird Broker a diario. Ver al Nasdaq100 bajo los 12.000 puntos ha sido muy inquietante, pero al cierre semanal los precios se han mantenido por encima de esa cota, acompañados por un VIX que en realidad ha descendido ligeramente pese a los retrocesos del S&P500.

Por cierto, el que canaliza escandalosamente bien es el Russell2000 en versión total return, que tras dejarse cerca de un 30% ha llegado a su media de 200 semanas para alcanzar prácticamente la impresionante zona de soporte definida por los altos de 2018 y 2020.