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“Chicos de 27 años están vendiéndome CDS de Japón…”
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Marc Garrigasait

El Abrazo del Koala

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“Chicos de 27 años están vendiéndome CDS de Japón…”

Kyle Bass es una de las mentes más brillantes en los mercados financieros actuales y no trabaja en Nueva York. Con tan solo 44 años es

Kyle Bass es una de las mentes más brillantes en los mercados financieros actuales y no trabaja en Nueva York. Con tan solo 44 años es el gestor del hedge fund Hayman Capital Management L. P. en Dallas (Texas). En febrero de 2006, tuvo muy claro que era el final de la burbuja inmobiliaria norteamericana y empezó a comprar Credit Default Swaps (CDS) de las emisiones hipotecarias de peor calidad. Sus beneficios en 2007 y 2008 fueron estratosféricos.

En primavera de 2009 compró también CDS de Portugal, Irlanda, Italia y Grecia (aparentemente no de España), apostando un futuro default que no se produjo y le originó unas pérdidas de 110 millones de dólares, pero mantuvo sus operaciones abiertas, aunque me imagino que acabó con pérdidas.

Su recomendación para los próximos diez años es “comprar oro, vender yenes japoneses (short) e irse a dormir”. Claro que quizás esta semana se ha despertado de golpe, ya que el oro ha sufrido la mayor caída en dos días consecutivos desde el año 1983. No me extrañaría nada que, en un futuro, se conozca que la Fed manipuló la cotización del oro y de la plata. Ya lo hizo posiblemente unos años atrás.

Os recuerdo cómo funcionan los CDS y por qué AIG quebró. Si vendes un CDS y ingresas una pequeña prima; el comprador del CDS que te la ha pagado se está cubriendo ante una quiebra o default del subyacente en cuestión. De producirse, el que ha ingresado la prima -es decir, AIG en su día-, debe compensarte con la totalidad del nominal del contrato. Un ejemplo, imaginaros que el riesgo de quiebra de una empresa es del 1%. En este caso, por cada dólar pagado cobrarías 100 dólares si la empresa quiebra antes de una fecha determinada. En caso que no ocurra, que es lo más probable, pierdes la prima pagada, que pasa a ser un beneficio del emisor de la prima. ¿Qué hacía AIG antes de 2008? Vender sin parar CDS sobre todo tipo de activos, pero básicamente hipotecarios. Era una máquina de ingresar primas y ganar dinero a cada vencimiento de las mismas, pero nadie controlaba que los nominales arriesgados eran billonarios. El día que se hundió el mercado inmobiliario en USA, de inmediato AIG estaba en quiebra y recibió dinero publico para ser rescatada. Era un caso muy sencillo de apalancamiento desproporcionado, sin control ni interno ni externo, por parte del regulador norteamericano.

Kyle Bass, en una reciente conferencia en Chicago en el mes de febrero, explicó lo que está ocurriendo otra vez con los Credit Default Swap (CDS), esta vez de Japón, y alertó de la nueva locura de apalancamientos bancarios sin límites, permitida otra vez por los reguladores. Para el gestor norteamericano, Japón va a una quiebra por su elevada deuda publica. Por este motivo, ha ido acumulando una cartera comprada de CDS sobre Japón. Lo más chocante es el relato de Kyle Bass. Según él, “uno de los mayores bancos del mundo” está haciendo lo mismo que llevó a AIG, la mayor aseguradora del mundo, a la quiebra y a ser rescatada por el gobierno. Es sorprendente que en 2013 volvamos a caer en el mismo error, aunque esta vez en Japón.

Su relato exacto era: "El caso de AIG vuelve otra vez –chicos de 27 años de edad me venden CDS sobre Japón por menos de 1 punto básico (0,01 sobre 100) por nada menos que 5.000 millones de dólares. Si suena la campana al final del año, el joven de 27 años de edad obtendrá un gran bonus, pero si el viento sopla en contra el banco explotará en mil pedazos ".

Pero no acaba aquí el relato de Kyle Bass:

Kyle Bass es una de las mentes más brillantes en los mercados financieros actuales y no trabaja en Nueva York. Con tan solo 44 años es el gestor del hedge fund Hayman Capital Management L. P. en Dallas (Texas). En febrero de 2006, tuvo muy claro que era el final de la burbuja inmobiliaria norteamericana y empezó a comprar Credit Default Swaps (CDS) de las emisiones hipotecarias de peor calidad. Sus beneficios en 2007 y 2008 fueron estratosféricos.