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La vida es equilibrio y si no … ¡apagón!
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Rodrigo Rodríguez

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La vida es equilibrio y si no … ¡apagón!

Europa carece prácticamente de reservas significativas de petróleo, gas o carbón, de ahí que nuestra única ventaja competitiva es apostar por las a renovables que son baratas y limpias

Foto: Imagen del apagón. (EP/Alberto Paredes)
Imagen del apagón. (EP/Alberto Paredes)

Ante todo, mis más sinceras disculpas por faltar a nuestra cita la semana pasada, pero el maratón de Londres resultó más duro de lo que esperaba y me quedé sin fuerzas para escribir nuestra columna semanal. Afortunadamente, lo terminé, y sobre todo conseguí los fondos que tanto necesitan las familias de Miracles (www.miraclesthecharity.org). Sin duda, el tema de conversación en España esta semana ha sido el apagón eléctrico.

No me considero en ningún momento un experto en la materia y creo que hay personas mucho más capacitadas que yo para entrar en los detalles de por qué se produjo, sin embargo, como defensor de la energía nuclear que soy, así como de la necesidad de almacenamiento energético, creo que al menos debo dar unas pinceladas de lo que puede haber ocurrido y lo que podría ser parte de la solución.

Antes de empezar, quiero pedir perdón a todos los expertos en redes eléctricas e ingenieros, con muchísimo más conocimiento que yo sobre la materia por la simplicidad con la que voy a intentar abordar este tema.

El tema energético, como casi todo en la vida, depende de un equilibrio. En este caso un equilibrio entre la oferta y la demanda de electricidad. Básicamente, cada vez que apretamos el interruptor creamos una demanda de energía que necesita ser generada o creada a lo largo de la red energética, esa demanda y esa oferta tienen que estar en equilibrio. En caso contrario, empiezan los problemas.

Foto: Parque solar flotante. (EFE/Archivo/Paula Fernández)
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Nuestro sistema está diseñado de tal manera que cuando existe una gran variación en esa oferta o demanda, las distintas centrales energéticas conectadas a la red incrementan o reducen su producción para que no se sobrecargue el sistema. La clave es el equilibrio, pues si este se pierde se produce un efecto de desenganche para proteger la red y permitir que se reinicie en veinticuatro horas como pasó.

La energía eléctrica se puede producir a través de diversos mecanismos: bien con petróleo o con gas, siendo Estados Unidos el mayor productor de ambos, bien con carbón, como es el caso de China, donde más del 60 % de la producción eléctrica se produce a través de carbón con el fin de protegerse de cualquier dependencia exterior.

Foto: Apagón en España y Portugal. (Europa Press/Alberto Paredes)

Europa carece prácticamente de reservas significativas de petróleo, gas o carbón, de ahí que nuestra única ventaja competitiva es apostar por las a renovables que son baratas y limpias, pero que como voy a explicar producen inestabilidad en el sistema, especialmente una vez que hemos decidido prescindir o reducir la producción energética nuclear, que para mí era la más ventajosa.

La energía renovable, especialmente la fotovoltaica y la eólica, son energías inestables, puesto que pueden producir altos picos y valles en su producción dependiendo de la hora del día, del calor que haga o del viento que sople. Esta sobreproducción o baja producción suele ser estabilizada entres otras por las centrales hidráulicas a través de saltos hidráulicos reversibles, o por las centrales nucleares cuyas máquinas ajustan la velocidad de generación dependiendo de la necesidad del sistema o también a través del almacenamiento energético.

El problema es que recientemente hemos reducido el número de centrales nucleares conectadas a este sistema, incluso el número de centrales hidráulicas y, por tanto, el número de agentes estabilizadores. Hemos querido vender al mundo que el 100% de nuestra electricidad era renovable. Pero el problema es que si queremos depender en tal alto grado de las energías renovables, solo podemos hacerlo si tenemos un mecanismo de almacenamiento energético que actúe como elemento regulador y sobre todo que se active en caso de que haya una caída en la oferta similar a la del pasado lunes.

Foto: Fotografía de la Gran Vía sin luz este lunes durante el apagón masivo del sistema eléctrico en Madrid. (EFE/Borja Sanchez-Trillo)

El ejemplo más reciente de un apagón similar al de España se produjo en el estado de California en el 2003. Al igual que en España las causas son aún inciertas, pero lo que es importante es que su respuesta ha sido crear capacidad de almacenamiento a través de una serie de baterías, ahora mismo tienen capacidad de 13 GW que es una cuantía similar a los famosos 15 GW que el presidente Sánchez dice que desaparecieron de nuestro sistema a las 12:30 del pasado lunes.

Sin almacenamiento no podemos dejar de utilizar energía nuclear. Es más, es esta falta de almacenamiento, incluso a nivel individual, lo que ha hecho que todos aquellos que tenían placas solares en sus casas también hayan carecido de luz. Nuestro sistema está obligado a conectarse en la mayoría de los casos a la red eléctrica, con lo cual cuando se produce un efecto como el de los del lunes estas placas dejan de generar energía para evitar posibles cortocircuitos, es decir, para que pudieran seguir generando energía, deberían trabajar en modo isla o tener su propio almacenamiento.

Ante tal tesitura, decidí mirar potenciales soluciones en Internet y encontré un proyecto que creo que no solo explica lo que ha pasado con bastante claridad, sino que ofrece soluciones especialmente a los pequeños pueblos españoles.

Foto: Respuesta escrita al Congreso del Ministerio para la Transición Ecológica. (EC)

Este proyecto se llama comunidad solar (https://comunidadsolar.es/) y pretenden conseguir la "individualización total de la energía". (Que quede claro que no tengo participación alguna en esta compañía)

Lo que ellos ofrecen, en pequeña escala, es lo que yo les he dicho que necesita el sistema, pues le proponen la posibilidad de generar su propia energía bien a través de sus propias placas fotovoltaicas, bien a través de proyectos de comunidad solar, donde usted compra participaciones en parques eólicos, centrales hidráulicas y parques fotovoltaicos que generan una energía que usted va a utilizar de manera remota.

En el primer caso, si usted decide optar por sus propias placas, estas pueden funcionar en modo isla (aisladas) y además le incluyen una batería de almacenamiento, para cuando esas placas no estén generando energía.

Foto: Molinos en Santurce. (EFE/Luis Tejido) Opinión
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En caso de tomar participaciones en los distintos proyectos de parques renovables, usted tendrá acceso a una gran oferta energética y se beneficiará de una energía más barata, pero necesitará de batería de almacenamiento si quiere evitar un potencial apagón.

Por último existe una tercera vía, que es la que creo entender que esta comunidad solar propone para los pequeños municipios, pues de acuerdo con la ley de autoconsumo los usuarios que están a menos de 2 km de la fuente de generación se pueden conectar virtualmente a la red, el problema es que incluso en este caso hasta que no se le dé independencia de la red, y se permita que estos municipios regulen su producción y consumo el problema subsiste, pues carecemos de almacenamiento

En resumen, creo que la situación producida en España ha puesto claramente de manifiesto la necesidad de un equilibrio.

Foto: Central nuclear de Ascó I.

No debemos olvidar que gracias a la energía renovable España tuvo los costes de electricidad más bajos de Europa en 2024.

Sin duda la energía renovable es el caballo de batalla ganador de Europa, generando una energía limpia y barata, pero esta energía renovable no puede ir en perjuicio de los servicios ofrecidos al consumidor final, y ahora mismo necesita, como hemos dicho, de factores reguladores siendo uno de los factores más importante son las centrales nucleares.

Desde hace tiempo llevo diciendo que cerrar las centrales nucleares es un grave error, puesto que es una producción de energía en grandes cantidades, estable, limpia y barata. Es más, ahora mismo hasta que no desarrollemos el almacenamiento energético no solo es algo beneficioso, sino algo que ha quedado claramente que es indispensable.

Foto: Vista de un centro de datos en Madrid. (Europa Press/Alberto Ortega)

Si opinan que el gobierno va a seguir con su cabezonería, entonces le recomiendo que se pongan en contacto con comunidad solar o con alguien con una oferta similar, pero que empiecen a almacenar su energía, pues producirla solo no es suficiente.

Con la fuerte caída que han experimentado tanto las compañías listadas renovables, como las relacionadas con la energía nuclear, creo que es un buen momento para acumular posiciones en ambas. Solaria y Acciona Renovable necesitan análisis aparte pues creo que en breve serán parte de algún evento corporativo. Red eléctrica penalizada esta semana, mantiene un monopolio por ahora de mucho valor.

Ante todo, mis más sinceras disculpas por faltar a nuestra cita la semana pasada, pero el maratón de Londres resultó más duro de lo que esperaba y me quedé sin fuerzas para escribir nuestra columna semanal. Afortunadamente, lo terminé, y sobre todo conseguí los fondos que tanto necesitan las familias de Miracles (www.miraclesthecharity.org). Sin duda, el tema de conversación en España esta semana ha sido el apagón eléctrico.

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