Es noticia
El subidón de azúcar de las bolsas
  1. Mercados
  2. No Brain, No Gain
Vicente Varó

No Brain, No Gain

Por

El subidón de azúcar de las bolsas

Tienen los anglosajones una curiosa expresión para referirse al grado de "sobreexcitación" que suelen experimentar alguien cuando consume demasiado azúcar. Es “sugar high” y, salvo que

Tienen los anglosajones una curiosa expresión para referirse al grado de "sobreexcitación" que suelen experimentar alguien cuando consume demasiado azúcar. Es “sugar high” y, salvo que haya una frase castellana adecuada que yo desconozca, lo podríamos traducir como “subidón de azúcar” de las bolsas.

La utilizó ayer Mohammed El-Erian, uno de los gestores más reputados y director de inversiones de Pimco, para referirse a la subida que han registrado las principales bolsas mundiales en julio. En una entrevista con la CNBC explicó que esta parte final de la subida, la de las últimas semanas, ha ido demasiado lejos y que, de alguna manera, no estaba justificada por los datos económicos que se están conociendo.

Muchos otros inversores también piensan esto mismo, pero lo llevan pensando desde que empezó el rebote de los mercados, porque se quedaron atrás y ahora les cuesta más subirse al tren. La diferencia entre ellos y El-Erian está en que este último sólo dice que la última parte de la subida está sobredimensionada; hay otros muchos que siguen pensando que el Ibex debería estar por debajo de los 4.000 puntos.

Pero hay un detalle que me llama la atención. Puede que este atracón de azúcar se lo hayan pegado hasta ahora sobre todo los inversores institucionales, pero no del todo los particulares. Según la encuesta semanal de la American Association of Individual Investors, hay más inversores particulares bajistas (un 42,4 por ciento de los encuestados) que alcistas (un 37,6 por ciento), y también bastantes neutrales (un 20 por ciento).

Como ya es sabido, una forma interesante de leer estas estadísticas suele ser que quien se ha declarado bajista ya ha vendido. Con lo que es muy probable que muchos de estos se acaben convirtiendo a la religión del optimismo si ven que el mercado sigue tirando hacia arriba para no quedarse fuera. Esto parece haber ocurrido en el rally de las dos últimas semanas.

En la encuesta de AAII del 9 de julio el número de bajistas era muy superior, más del 50 por ciento, mientras que sólo aproximadamente uno de cada cuatro encuestados veía el mercado preparado para seguir subiendo. En resumen, que mientras el mercado se ha disparado en las últimas semanas han sido más los inversores que eran bajistas y se han subido al carro que los que eran alcistas y se han bajado.

Además, el indicador de “dinero tonto” que traté en uno de mis primeros post en No Brain No Gain también refleja que los inversores particulares tampoco se han creído del todo este rally y llevaron al indicador a volver a niveles menos extremos. ¿Dónde nos deja esto?

Saber que harán los mercados en las próximas semanas resulta muy complicado, pero volviendo a la metáfora de El-Erian, puede que todavía haya muchos inversores particulares que están empezando ahora a tomar dulces, y muchos que se lo están pensando y si ven más subidas empezarán a comerlos. Es decir, que el subidón de azúcar real todavía podría estar por llegar, al menos entre los inversores particulares.

Tienen los anglosajones una curiosa expresión para referirse al grado de "sobreexcitación" que suelen experimentar alguien cuando consume demasiado azúcar. Es “sugar high” y, salvo que haya una frase castellana adecuada que yo desconozca, lo podríamos traducir como “subidón de azúcar” de las bolsas.