La nueva Endesa, con una bicefalia condenada a entenderse y Europa en manos de E.On

Manuel Pizarro, ex presidente de Endesa, vuelve donde siempre, a la Bolsa, y dice que no cree en las vocaciones tardías, así que será difícil que recale en la política. Pronto le veremos opinar de Economía y Bolsa después de haber salido triunfante de esa operación en la que la primera eléctrica española se ha convertido en la segunda por capitalización- tras una Iberdrola cada vez más grande- y va camino de perder sus posesiones en Italia, tercera eléctrica; Francia- segunda del país vecino-y en Polonia.

El fruto del acuerdo entre Acciona, Enel y E.On, con el objetivo de que los alemanes no denunciaran ni ante EEUU ni ante Europa las maniobras orquestales en la oscuridad, deviene en una Endesa capitidisminuida en Europa pero con una parte importante de su negocio en Latinoamérica.

Endesa ha pasado de ser una multinacional europea a una latinoamericana. Si eso es bueno o malo el tiempo lo dirá, así como los planes de negocio que tienen previsto pronto poner negro sobre blanco, una vez ya sentados en el consejo los distintos miembros y normalizada la situación.

Además, la que fuera primera eléctrica española ha pasado a ser filial esencial de una semipública italiana que en fin posee el 67% de la compañía, frente a poco más del 25% de la entidad que tiene Acciona. Y de esta asimetría de participaciones ha surgido, sin embargo, por arte de pacto parasocial, un consejo en el que el presidente es José Manuel Entrecanales y el incombustible Rafael Miranda se queda como consejero delegado. Para completar el cuadro se creará un holding, con más peso español.

El resultado de la intervención del Gobierno Zapatero mantiene si se quiere una empresa con una participación española, de perfil hasta ahora financiero, y un socio industrial italiano mayoritario. Los expertos insisten en que deberán ser los italianos los que acaben tomando las riendas de la compañía, aunque sea después de 2010.

La política sin duda crea extraños compañeros de cama, en este caso condenados a entenderse. Al fin y al cabo si Acciona en un futuro sale, tiene garantizado un precio estupendo que compensaría, según todos los indicios, su entrada en la operación.

Endesa y el Ibex

La nueva Endesa ha logrado milagrosamente quedarse en el Ibex, aunque no se sabe por cuándo tiempo puesto que con free float de poco más del 8% lo lógico es que acabe siendo desplazada.

Los accionistas que se han quedado por lo pronto observan una pronunciada caída del valor, aunque todo parece indicar que la compañía mantendrá su agresiva política de dividendos puesta en práctica por los hombres de Pizarro como autodefensa primero frente a Gas Natural y luego a los de E.On. Esa política de dividendo revierte esencialmente sobre los propietarios y les permitirá hacer más liviano el endeudamiento alcanzado para llevar a cabo la compra. Otra cosa que es que en los planes estratégicos futuros se mantenga o no.

Fulvio Conti, presidente de Enel, insiste en esa política de hacer declaraciones ante las agencias y los medios italianos. Las últimas relacionadas con la futura presentación de un plan de inversiones. Estará bien conocer exactamente cómo queda la nueva Endesa en España tras los acuerdos con E.On sobre todo en lo relativo a centrales eólicas, hidroeléctricas y de biomasa. Nace un nuevo operador con la compra de Viesgo por E.On que completará con ese troceo previsto, pero no explicitado, de una parte de Endesa.

Una compañía cuya actual propiedad no se puede entender sin la intervención del Gobierno Zapatero, que primero luchó por la solución catalana, aunque acabó dándole el abrazo del oso a Gas Natural, y después apostó claramente en contra de los alemanes de E.On. Unos germanos que se ofrecieron como caballeros blancos y terminaron como tiburones. Escaldados por cierto ante la flexibilidad repentina de la ley de OPAs- escándalo mediante en la CNMV- y que terminó con la entrada de Acciona y Enel en el accionariado.

Todo ello con una posición tan confusa como contradictoria a veces del Partido Popular que inició su batalla luchando contra unos inexistentes molinos del nacionalismo catalán- en pleno parto del Estatut- y terminó entre la defensa de tesis aparentemente liberales y de la cabeza visible de la compañía. Y a la vuelta de la esquina, elecciones ¿Qué es lo que queda de aquella Endesa, primera de España, segunda de Francia, tercera de Italia, importante en Polonia y preeminente en Latinoamérica? ¿Ha sido troceada, o no? Juzguen ustedes.