El valor del tiempo

Los inversores debemos tener claro qué le aportamos a los empresarios, ¿Por qué nos necesitan? Tenemos que entender cuál es nuestro papel. La respuesta parece sencilla, aportamos dinero. Sin embargo, resulta paradójico que necesiten dinero las empresas porque simplificando mucho son máquinas creadas para generar dinero. En otras palabras, les aportamos algo que por lógica les debería sobrar..

Si les hacemos falta es por la diferencia de tiempo existente entre el pago a sus proveedores (empleados, mercancía, alquileres, sistemas, etc) y el cobro de sus clientes. Algunos empresarios consiguen ingeniárselas para crear las empresas sin apenas financiación. Suelen actuar previo pago de sus clientes o pagando con gran retraso a los proveedores.

No obstante la inmensa mayoría de las empresas requieren invertir muchos recursos para estar en condiciones de ofrecer un producto o servicio que satisfaga las necesidades de sus clientes. Entender que nuestras inversiones cubren ese espacio temporal es fundamental para descubrir el valor que aportan.

Por otro lado, es cierto que al invertir asumimos un elevado riesgo. Mayor cuanto más largo sea el plazo de la inversión y más inciertos sean los ingresos futuros. Por lo tanto, el riesgo también depende del plazo entre desembolso y cobro. En conclusión, la variable tiempo es muy relevante para analizar la viabilidad y rentabilidad de cualquier empresa.

Lo lógico sería pensar que cuanto más tiempo sea necesario (más capital haga falta), más rendimiento podría exigir el inversor. Sin embargo muchas empresas no gestionan eficientemente el capital y suele ocurrir lo contrario. Cuánto más ajustados estén los plazos, habrá menores necesidades de capital y más rentables serán las inversiones.