Es noticia
El lento despertar de las primas de riesgo
  1. Mercados
  2. Telón de Fondo
Víctor Alvargonzález

Telón de Fondo

Por

El lento despertar de las primas de riesgo

El BCE está manipulando la realidad. Los tipos de interés actuales de los bonos europeos no reflejan ni la realidad de la inflación ni la de los niveles de deuda de los países de la UE

Foto: iStock
iStock

Hace aproximadamente un mes escribí un artículo en el que decía que, si el BCE seguía adormeciendo las primas de riesgo, los que despertarían serían los tipos de cambio. Los de las principales divisas del mundo frente al euro. Pero parece que no va a ser necesario: las primas de riesgo están empezando a despertarse solas.

Pese al dineral que inyecta el BCE en el mercado de bonos - el mismo que en plena pandemia - el diferencial de los bonos italianos se ha disparado al alza. En unos días ha pasado del 1,15 en el que se ha movido todo el año, al 1,37. Es una señal importante.

Cuando digo que el BCE está adormeciendo las primas de riesgo me refiero a que con sus compras masivas de bonos consigue que no haya gran diferencia entre prestarle dinero a Alemania o prestárselo a Italia o España. Las compras de bonos hacen que bajen los tipos de interés y las reglas del QE europeo ayudan a poner en hibernación las primas de riesgo, ya que, en la práctica, llevan a que se compren más bonos de los países que tienen más deuda en el mercado.

Cada día es más evidente que ya no se compran bonos para contrarrestar el efecto económico de los confinamientos. El objetivo es que los costes de financiación de los países del sur de Europa se mantengan bajos.

Foto: Foto: IStock Opinión
TE PUEDE INTERESAR
Inflación y bonos
Rafael Salama

Las primas de riesgo europeas son un dato que les servía a los inversores para valorar el diferente nivel de riesgo que supone prestarle dinero a un país de la UE con muy poca deuda frente a uno más endeudado. Ahora se han convertido en el termómetro de la capacidad del BCE para manipular el mercado de bonos. Por eso es importante ver si despiertan: nos están diciendo cuál es la capacidad que tiene el BCE de evitar que caiga el precio de los bonos europeos.

Pero lo que está haciendo es muy peligroso. En mi opinión, es el motivo por el que ha decidido dimitir Weidmann, el presidente del Bundesbank (otra mala señal). No quiere estar ahí cuando haya que dar explicaciones. Manipular los tipos de interés para ayudar a los gobiernos a enfrentarse a una pandemia es justificable. De no hacerlo habríamos entrado en una terrible, duradera y deflacionista depresión económica. “Dopar” los precios para que los países del sur puedan endeudarse sin control y a coste cero, con el riesgo añadido de estar echando leña al fuego de la inflación, ni es justificable, ni es serio.

Lo peor que le puede pasar a un banco central es perder credibilidad. Y el BCE la está perdiendo. Al menos la Fed ha reconocido que tiene que empezar ya mismo a reducir sus compras y ha establecido un calendario. La actitud de Lagarde de seguir como si nada hubiera cambiado es francamente peligrosa.

Porque, a este paso. entraremos en el relato de “el mercado contra Christine Lagarde” y eso no es bueno para los bonos. De hecho, ya tenemos los tres primeros episodios de la serie. El episodio “piloto” es el ya mencionado de la prima de riesgo italiana. El segundo, el hecho de que el mismo día que Lagarde anunció que seguiría comprando bonos a mansalva cayera el precio de todos los bonos europeos (algo impensable hace unos meses tras de un anuncio así). El tercer episodio es el del incremento de la volatilidad.

Foto: Christine Lagarde, presidenta del BCE. (EFE)

El día que el BCE no interviene masivamente caen con fuerza los precios. Los inversores no son tontos y no quieren un bono que cuesta dinero tenerlo o no paga nada con la inflación en el 4%. Y saben que, aunque baje, no va a volver a donde estaba antes de la pandemia. Al día siguiente interviene el BCE, para evitar que caigan demasiado los precios, y se produce un repunte importante. Y así llevamos más de un mes, sin que el BCE sea capaz de hacer subir los precios como hacía antes.

Me dirán que Draghi venció al mercado, pero hay dos grandes diferencias (aparte de lo desagradable que fue tener bonos europeos durante aquella batalla). En primer lugar Draghi tenía mucha más munición. Lagarde ya ha comprado deuda por un importe equivalente al 78 % del PIB de la UE. Pero además Draghi tenía autoridad moral: la del que hace lo correcto y además tiene razón.

Defendía la existencia del euro y el tiempo ha demostrado que estaba más que justificada. La agenda de Lagarde es política – las malas lenguas dicen que incluso es personal - y eso no da fuerza moral. Y tampoco tiene razón: no es normal intervenir en el mercado para que haya que pagar – si, pagar – por prestarle dinero a los híper endeudados estados español o italiano cuando la inflación europea es del 4%. Ni aunque bajara al 2,5% dentro de unos meses.

El BCE está manipulando la realidad y en los mercados la realidad muerde. Los tipos de interés actuales de los bonos europeos no reflejan ni la realidad de la inflación ni la de los niveles de deuda de los países de la Unión. Es mejor ir adaptándonos poco a poco a la realidad que volver a las andadas. Y que un día los inversores se den cuenta de la manipulación y decidan vender todos a la vez. Ya pasó una vez – crisis del euro – y los niveles de deuda eran muy inferiores a los actuales. Mejor no tentar la suerte.

Hace aproximadamente un mes escribí un artículo en el que decía que, si el BCE seguía adormeciendo las primas de riesgo, los que despertarían serían los tipos de cambio. Los de las principales divisas del mundo frente al euro. Pero parece que no va a ser necesario: las primas de riesgo están empezando a despertarse solas.

Banco Central Europeo (BCE) Prima de riesgo Christine Lagarde Tipos de interés Inflación Unión Europea
El redactor recomienda