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Telón de Fondo
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Estas elecciones alemanas pueden cambiar el futuro de la bolsa europea
Tiene que haber un cambio radical en la política económica. Pues bien, ese cambio podría estar gestándose en las próximas elecciones alemanas
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Llevo más de 15 años insistiendo en que hay que invertir más en EEUU que en Europa. Cualquiera que me haya leído aquí o sea cliente de Nextep lo sabe. Quitando repuntes técnicos interesantes para especular, la bolsa europea ha reflejado todos estos años la decadencia económica de la Eurozona.
En junio de 2007, un joven y esperanzado Eurostoxx 50 alcanzaba un máximo de 4.506 puntos. Ahora está en 5.362. Un euro invertido en la bolsa europea en aquella fecha se ha revalorizado un 19% en 17 años (y 8 meses). En ese mismo periodo, el SP 500 ha subido un 320%. Qué poco sabía el joven y esperanzado Eurostoxx la pesadilla que tenía preparada la clase política europea para la economía de la Eurozona. Especialmente para el tejido empresarial, los autónomos, la innovación y el emprendimiento.Y así, el peso de la bolsa europea en la bolsa mundial pasó de del 30% en 2007 a menos del 20% en la actualidad. Y el peso de las empresas norteamericanas del 50% al 70%.
La decisión de sobre ponderar bolsa norteamericana en las carteras recomendadas no fue muy difícil de tomar. Mientras Norteamérica se lanzaba a rentabilizar la revolución digital con sus, Google, Apple, Amazon, Facebook, Netflix y Tesla (y luego la de la IA con Nvidia, etc.), Europa se centraba en regular esas empresas y recoger las migajas de sus beneficios vía impuestos. Migajas porque, al final, esas empresas saben evitar los impuestos. Y quede claro que no estoy en contra de que haya regulación. Pero la regulación no es incompatible con la creación y la producción, es complementaria.
Por si todo esto fuera poco, Europa emprendió una alocada carrera para aumentar su dependencia energética externa, con un éxito que se hizo patente cuando se produjo la invasión de Ucrania. Y, para acabar de arreglarlo, países que pasan meses sin ver el sol y con cada vez menos espacio vital, piensan que podrían vivir de la energía solar y cuentan con espacio de sobra para instalar todos los molinos de viento que necesiten. Que se piense así en España tiene lógica - aunque tampoco conviene depender solo de energías inestables por naturaleza, nunca mejor dicho -, pero que pensaran así en Alemania, roza el surrealismo.
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Para acabar de estropearlo, la Unión Europea, que podría haber sido un poder dinamizador que promoviera la innovación, la investigación y el empresariado, se ha convertido en un enorme ministerio que necesita seguir creando regulaciones sin fin para dar trabajo a su cada vez mayor número de funcionarios. Pero incluso en la antigua Roma, paradigma de la decadencia, se produjeron cambios. Al loco de Calígula le sucedió, por puro azar, el competente Claudio. Si ocurrió en la híper decadente Roma ¿por qué no puede ocurrir en la decadente Europa actual?
Para que esto ocurra tiene que haber un cambio radical en la política económica. Y voy a insistir en lo de “económica”, porque yo no hablo de política. Mi negociado son la economía y los mercados financieros. Pues bien, ese cambio podría estar gestándose en las próximas elecciones alemanas. Y no me refiero a que gane la extrema derecha, sino a que la CDU ya no es el mismo partido que cuando la dirigía Angela Merkel. El programa económico es totalmente diferente: reducción de impuestos y de burocracia, reforma del sistema de prestaciones para incentivar el trabajo y, en resumen, apoyo al crecimiento económico mediante la implantación de reformas fiscales y políticas más liberales.
Lo bueno es que el debilitamiento de los partidos a la izquierda de la CDU, especialmente el colapso del partido socialista, facilitará obtener los apoyos que le pudieran faltar para la mayoría. Pero si no lo tuviera, los obtendría a su la derecha, porque el programa económico de Alternativa por Alemania (AfD) es clavado al de la CDU. Y lo es porque no tiene nada de nacionalsocialista - insisto, a nivel económico -. Es un programa de corte liberal. También es cierto que sigue abogando por salir del euro, pero, como no parece que vayan a ganar, lo que nos interesa es que apoyarían a la CDU en todo lo que coincida con ese programa liberalizador y dinamizador de la economía.
Imaginemos que Europa, que nunca ha estado tan barata respecto a EE.UU. - un 40 % en términos de PER -, cuyo principal índice bursátil ha estado plano o negativo hasta hace solo año y pico, aplicara la política económica contraria a la que le ha llevado a esta situación. No les puedo decir cuál sería exactamente el resultado, pero sí les puedo decir que sería bueno.
Europa no es peor que Estados Unidos
Europa no es peor que Estados Unidos. El problema de Europa es que sus políticos le han puesto un traje de cemento de regulaciones, impuestos y todo tipo de trabas a la innovación y al empresariado. Pero Europa no es “esta” Europa. Europa ha sido mucho más y durante mucho tiempo más tiempo que este periodo aciago. Ha sido tierra de descubridores, investigadores y sí, grandes empresarios. Durante siglos. Podríamos estar en uno de esos paréntesis oscuros a los que le siguen momentos mucho más brillantes.
Las elecciones son solo en Alemania, pero Alemania es el país más importante de Europa y tiene mucha influencia sobre el resto, que, por cierto, también empieza a darse cuenta de que, en materia económica, las cosas tienen que cambiar. Que no se puede seguir así. Si a esto añadimos que los tipos de interés pueden seguir bajando en la Eurozona, tendríamos financiación barata para ese cambio económico.
Nosotros ya hemos tomado algunas posiciones. Pero con cuidado: hoy mismo leemos que la UE planea invertir 200.000 millones de euros en IA. Una fortuna, cuyo destino decidirán políticos, no empresarios innovadores o investigadores de primer nivel. Cuando hasta en China Deep Seek es resultado de la inversión privada. Y no les quiero decir en EEUU. Aquí serán burócratas quienes decidan cuál es el camino para el liderazgo en la IA. En fin, la esperanza es lo último que se pierde. Y no vamos a tener muchas ocasiones como esta.
Llevo más de 15 años insistiendo en que hay que invertir más en EEUU que en Europa. Cualquiera que me haya leído aquí o sea cliente de Nextep lo sabe. Quitando repuntes técnicos interesantes para especular, la bolsa europea ha reflejado todos estos años la decadencia económica de la Eurozona.