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La seguridad vial preocupa a los españoles
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Carlos Cancela

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Carlos Cancela

La seguridad vial preocupa a los españoles

El tráfico y la seguridad vial están entre los asuntos que más preocupan a los españoles junto a otros aspectos como el paro o la corrupción

Foto: El mal estado de las carreteras preocupa
El mal estado de las carreteras preocupa

El tráfico y la seguridad vial están entre los asuntos que más preocupan a los españoles junto a otros aspectos como el paro o la corrupción política, según el Observatorio español de conductores Ducit elaborado por el RACE. Ante la próxima cita electoral, prevista para el día 20, este observatorio ha realizado una encuesta preguntando a los usuarios de la carretera sobre cuáles son las cuestiones de importancia que debería abordar el Gobierno que gane las próximas elecciones generales.

El resultado de esta encuesta es interesante. La primera de ellas, y no supone ninguna sorpresa, es el paro, que representa el tema más importante para el 48,6% de los encuestados. La segunda cuestión por importancia es la corrupción política, marcada por un 7,9% de los encuestados, muy próxima a la situación de la economía, con un 7,8%.

Tras ellos, la cuarta posición es para la educación, mientras que la quinta es el tráfico y la seguridad vial. Este tema está tomando cada día una mayor importancia entre los españoles e importa incluso más que la situación de Cataluña y su pulso independentista, según este estudio elaborado por el RACE.

La seguridad vial supone un grave problema en la sociedad actual. El año pasado fallecieron en accidentes de tráfico en España 1.688 personas y otras casi 10.000 tuvieron que ser hospitalizadas como consecuencia de un accidente en la carretera o en las calles de una ciudad. Y si hablamos a nivel mundial, el último año fallecieron 1,2 millones de personas en todo el mundo por esta causa.

Hay una gran diferencia entre otros de los temas que preocupan a la sociedad española y el tráfico. Mientras que el paro, o la economía, o la situación de Cataluña o las cuentas de la Seguridad Social no dependen de la actitud de cada ciudadano, sino de las políticas del Gobierno, en el caso de la seguridad vial si es algo que depende, sobre todo, de los ciudadanos y de su implicación en el problema.

Es lógico pensar que con unas carreteras mejores, con un mantenimiento mejor hecho, con una buena señalización y demás, es muy posible que se redujeran las víctimas del tráfico. Pero lo más importante para reducir la siniestralidad es la mentalidad de los propios ciudadanos que se sientan al volante o que simplemente cruzan una calle. Vamos, poner todo el interés en la conducción, en hacerlo bien, en ir pendientes del tráfico, o en el caso de un peatón cruzar por el sitio adecuado y con el semáforo en verde, y no por mitad de la calle mirando el móvil. Y mientras esta mentalidad no cambie, hay poco que hacer para reducir la siniestralidad.

Desde esta columna les hablo en muchas ocasiones de aspectos como ponerse siempre el cinturón de seguridad, llevar a los niños bien sujetos en el asiento y con los elementos adecuados a su edad. Por supuesto, también de cumplir con las normas de tráfico, con los límites de velocidad y con “detalles” importantes como llevar unos buenos neumáticos.

Pero, por encima de todo, es una cuestión de actitud a la hora de sentarse al volante, y en eso tenemos mucho, pero mucho que aprender. Circular por el carril central a 90 km/h en una autopista de tres carriles es simplemente por pereza y hace que el resto de usuarios de la carretera tengan que circular mal o ir de un carril a otro como si fuéramos en un tobogán.

Lo que más me molesta cuando circulo por una carretera, y cada día es más frecuente, es que el coche de detrás se nos pegue a nuestro maletero. Antes, hace unos años, eso solo pasaba en el carril de la izquierda cuando un coche más rápido quería pasarnos. Pero hoy en día pasa en cualquier momento, por cualquier carril o en todo tipo de carreteras y también con cualquier coche. Incluso en ciudad y circulando despacio, pero es la peligrosa manía de pegarse al de delante.

Es más, las furgonetas “son especialistas” en hacer una maniobra como esa, y lo peor es que lo hacen a 120 km/h, cuando tienen como la velocidad máxima limitada a 90 km/h y, sobre todo, cuando llevan un vehículo que frena mucho menos que un turismo. Si el coche de delante frena, el de detrás no podrá evitar el choque y el resultado serán heridas graves o incluso la muerte de algún ocupante del vehículo.

Hay un dato que hay que destacar en cuanto a la siniestralidad. En los últimos años ha bajado mucho en España el número de víctimas, pero ya parece haber llegado a su punto de equilibrio. Pero los 1.200 muertos en las carreteras españolas, o los 1.688 fallecidos si incluimos las cifras de accidentes en vías urbanas, son inaceptables.

Estas cifras hacen que los accidentes de tráfico sean la tercera causa de mortalidad para el grupo entre los 15 y los 24 años, y la cuarta causa en el grupo de edad entre los 25 y los 34 años. Y el coste económico de estos accidentes es de 9.688 millones de euros, lo que supone el 1% del PIB español.

El observatorio Ducit ha preguntado también a los conductores qué aspectos del tráfico deberían mejorar con el futuro Gobierno de forma inmediata y urgente. Y el resultado es muy interesante, el 24,5% de los encuestados aboga por la mejora de las carreteras y el segundo aspecto más valorado, con un 6,9%, es la educación vial.

El tráfico y la seguridad vial están entre los asuntos que más preocupan a los españoles junto a otros aspectos como el paro o la corrupción política, según el Observatorio español de conductores Ducit elaborado por el RACE. Ante la próxima cita electoral, prevista para el día 20, este observatorio ha realizado una encuesta preguntando a los usuarios de la carretera sobre cuáles son las cuestiones de importancia que debería abordar el Gobierno que gane las próximas elecciones generales.