Las ventas de coches crecen pero el parque es cada día más viejo

España mejora sus ventas de coches nuevos. Y este año se van a superar con facilidad, si todo sigue como hasta ahora, los 1,2 millones de unidades matriculadas al cierre del ejercicio. Pero estas cifras no son suficientes porque el parque de vehículos sigue envejeciendo año tras año y ya supera los 12 años de media. Hay que tomar medidas de manera urgente.

España fue el país europeo en el que mejor funcionó el mercado del automóvil en el mes de mayo, entre los grandes, y es el que mantiene el crecimiento de las ventas en Europa en lo que va de año. Las ventas de coches nuevos en Europa acumulan un crecimiento de un 2,4% en los cinco primeros meses del año, totalizando 6,87 millones de unidades. En ese mismo periodo las ventas en el mercado español subieron un 10,6% mientras que las de Alemania, el primer mercado europeo con diferencia, solo crecieron un 2,6%.

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Pero España se enfrenta a un grave problema, que es el de la vejez de su parque de vehículos, que según los últimos datos ya supera los 12 años de vida media en los coches en circulación. Y eso es un problema gravísimo, porque los vehículos que circulan son cada vez menos seguros y también más contaminantes. Y hay que buscar soluciones. El problema es muy grave, hasta el punto que el nuevo Gobierno ya ha dicho que no descarta poner en marcha un nuevo Plan PIVE para achatarrar los vehículos más viejos.

Por otra parte, las cifras de matriculaciones, que cada mes muestran signos de fortaleza del sector del automóvil, son en realidad unas cifras contaminadas por las conocidas como automatriculaciones. Si en las cifras de cada mes, las de mayo, por ejemplo, o las de cualquier mes anterior, se quitaran las ventas del último día hábil del mes hechas a nombre del concesionario y que suponen cerca del 20% de las ventas en todo el mes, las matriculaciones reales bajarían un 5 o un 10% cada mes. Y esa es nuestra realidad, un poco diferente de la que parecen contar las cifras oficiales.

El problema de la vejez del parque es fácil de entender. Cuando alguien se compra un coche nuevo y va a vender el suyo viejo a cambio, lo normal es que le den muy poco dinero por el antiguo si tiene ya 10 o más años. Y antes de tirarlo, se regala el coche a un amigo, se le da a un hijo para que lo use en un pueblo, pero no se recicla. O se vende a un precio muy barato para alguien que no puede pagarse el comprar un coche, pero sí puede pagar el mantenimiento escaso de uno viejo. Además, en el año 2005 se vendían 1,5 millones de coches y ahora con todas las automatriculaciones incluidas se matriculan 1,2 millones. Y por ello, el parque sigue envejeciendo y ya es el segundo más viejo de Europa, solo por detrás de Grecia.

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Cambiar la fiscalidad

Hace años que se habla de cambiar la fiscalidad del automóvil y adaptarla a la que está funcionando en los principales países de la Unión Europea. Es lo que se conoce como 'el que contamina, paga', que no es otra cosa que aumentar los impuestos de los carburantes, con lo que Hacienda aumenta la recaudación por el uso del vehículo. A cambio de ese aumento en los impuestos de los carburantes hay que reducir los impuestos a la compra de los coches, porque con ello se usarán coches más nuevos y seguros, pero que se usan menos para no pagar tantos impuestos.

Con ello, se puede racionalizar el tráfico en las carreteras y en las ciudades, se pueden usar buenos coches, modernos y seguros. Es lo que hacen los principales países europeos, pero el problema es que en España las tres administraciones cobran cada una de ellas su parte de los impuestos del automóvil. El IVA es un impuesto nacional, para Hacienda; el impuesto de matriculación es un gravamen que recaudan las comunidades autónomas; y el Impuesto de circulación, el IVTM, va a parar a las arcas de los ayuntamientos. De esta forma todos (ayuntamientos, comunidades autónomas y el Estado) se quedan contentos, pero los coches son cada vez más viejos, más contaminantes y menos seguros y se siguen llenando las ciudades de coches muy viejos, con los que nadie gana… menos las arcas de las tres administraciones.