Ellos votarán a la derecha, ellas no lo tienen tan claro

Si los pronósticos se cumplen, Alemania dará un fuerte giro hacia la derecha el próximo domingo. Fortísimo. Tres puntos rápidos para resumirlo:

1-. El conjunto de la izquierda –SPD, verdes y Linke– pasará de los 363 diputados obtenidos en 2021 a los 280 aproximados que señalan las proyecciones para el próximo domingo. Todos perderán representación y entrará en el Bundestag con una fuerza política de ultraizquierdamás –BSW–.

2-. Los liberales saldrán.

3-. Y el conjunto de la derecha –CDU y AFD– pasará de los 274 escaños a los 349.

En el género de los electores se encuentra una de las principales diferencias. No es inédito, lo hemos visto antes en otras naciones. En casi todos sitios, el voto a la derecha es, de manera muy acusada, predominantemente masculino.

¿Puede concluirse que el voto a la izquierda está igualmente feminizado? No por el momento, al menos no tanto. Llegar a esa conclusión es correr demasiado. Algunos de los últimos procesos electorales terminan contradiciendo lo que antes sí parecía más asegurado. Francia, sin ir más lejos. Pero miremos a Alemania…

No se aprecian diferencias tan grandes como las que sí se veían hace años. Y, desde luego, no puede hablarse todavía una feminización de voto progresista equivalente a la masculinización del voto hacia la derecha.

¿Qué está pasando con el voto de las alemanas? Algo muy parecido a lo que nos encontramos hace apenas unos meses en Estados Unidos. Su voto está menos decidido.

"¿Qué está pasando con el voto de las alemanas? Algo muy parecido a lo que nos encontramos hace apenas unos meses en Estados Unidos"

A principios de noviembre, vimos a los demócratas confiando ciegamente en una activación final del voto femenino que no terminó de producirse en los estados que definían la elección.

Ahora, los socialdemócratas germanos están trabajando la misma zona, priorizan su activación. ¿Lo terminarán consiguiendo? Veremos, lo que ya está visto es la desaparición del automatismo progresista en el voto de las mujeres. Eso ya no está tan garantizado como sí lo estuvo antes.