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'La Última Hora!': todo por la pluralidad informativa (hasta denunciar medios)
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Juan Soto Ivars

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'La Última Hora!': todo por la pluralidad informativa (hasta denunciar medios)

La suspensión de la cuenta es una anécdota, pero no las palabras de Bousselham cuando pensó que se la habían chapado. Dijo que seguirán "defendiendo la pluralidad informativa"

Foto: La cuenta de La Última Hora, en el momento de ser suspendida por Twitter.
La cuenta de La Última Hora, en el momento de ser suspendida por Twitter.
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Este viernes, Twitter suspendió la cuenta del panfleto de propaganda de Podemos 'La Última Hora!'. Muy mal hecho, Twitter: porque otra vez nos tomas a los usuarios por críos incapaces del más elemental discernimiento, porque a algunos masoquistas como yo nos dejas sin una fuente de diversión y, sobre todo, porque 'La Última Hora!' dedica al menos la mitad de su agenda a “noticias” sobre lo que los usuarios de Twitter le dicen a Javier Negre y otros enemigos del pueblo. ¿Qué clase de agradecimiento es este?

Pero la suspensión duró poco. Con algo de retraso, la directora Bousselham había salido a mediodía en un vídeo. Reaccionaba al cierre de la cuenta con lo típico: que era cosa de la ultraderecha con ataques coordinados, y tal y tal. Mi sospecha era que no. Que Bousselham aprovecha para señalarse víctima de la ultraderecha pero el verdadero motivo son las denuncias del periódico mallorquín 'Última Hora' por suplantación de marca. Pero si les devolvieron la cuenta, sería otra cosa. A saber.

La suspensión de la cuenta es una anécdota, pero no las palabras de Bousselham cuando pensó que se la habían chapado. Dijo que ellos seguirán “defendiendo la pluralidad informativa” y de esto, de la curiosa defensa de la pluralidad informativa que hace Podemos y su órgano de propaganda oficioso, es de lo que venía yo a hablarles. El cierre de la cuenta de Twitter se produjo la misma semana en que un colaborador del panfleto, Tomás Casas, se iba a los juzgados de Valencia a interponer una denuncia contra 'Atresmedia', 'El Español', 'El Mundo' y 'OkDiario'“en nombre de los votantes de Unidas Podemos”.

Sí, señora, como lo oye. Defensores a ultranza de Podemos denunciando a un puñado de medios de comunicación y a OkDiario, que no es un medio, sino algo parecido a 'La Última Hora!', por “incitación al odio”. Y todo esto mientras la directora de 'La Última Hora!', donde se señala habitualmente a periodistas desafectos del régimen como Carlos Alsina o Vicente Vallés, habla de la pluralidad. ¿Cuántas capas de maravilla tiene esta paradoja? ¿Cuántas ramificaciones de doble rasero y doble moral?
El poder judicial, al que Podemos y 'La Última Hora!' han atacado desvergonzadamente por la investigación sobre los presuntos manejos de Juanma del Olmo, recibe así el ataque más dañino: más papeleo inútil. Más legajos para leer, con el ventilador agitando las togas y las pelucas blancas de sus señorías, antes de echarlo todo al mismo cubo de la basura donde van las querellas que se ponen las famosas de la tele para llamar la atención.

Pero las paradojas no se quedan ahí. El tipo que ha denunciado a los medios de comunicación también escribe en 'La Última Hora!', como les decía. ¿Y qué publica? Esto: “La violencia, el odio y el periodismo: el periodismo en estos momentos está confundiendo libertad de prensa con libertad para difamar e incitar al odio y la violencia, además de contar bulos para conseguir un fin muy concreto”. El fin concreto es, según el redactor, que los fachas sigan hostigando al matrimonio vicepresidencial.

Desde el mismo panfleto, controlado como ningún otro por uno de los partidos del gobierno, se pide que se controle a los medios de comunicación

Así concluye el artículo (tome aire el lector, la sintaxis es espantosa): “La solución para evitar este tipo de ruidos y barbaridades en el periodismo debería ser empezar a controlar un poco más los medios de comunicación por parte del Gobierno con el objetivo de que las imágenes ofensivas o ‘fake news’ de otros medios como ‘OkDiario’ no puedan ser publicadas al resultar ofensivas y perjudiciales para mucha gente ya que rompen con la paz del país y generan violencia y odio al diferente, al que no piensa como ellos. O si se publican, que al menos sepan que ello conlleva unas consecuencias ante la ley”.

Bien. Recapitulemos. 'La Última Hora!' se caracteriza por señalar a periodistas, jueces y a cualquiera que le moleste la siesta de Pablo Iglesias. Su directora dice que defienden la pluralidad informativa porque les cierran la cuenta de Twitter. Y desde el mismo panfleto, controlado como ningún otro por uno de los partidos del gobierno, se pide que el gobierno controle a los medios de comunicación. ¡Ah! Y el autor de la pieza denuncia a un puñado de medios que según él están atentando contra la paz.

¿Lo tenemos? ¿Cabe todo esto en una cabeza humana, o hacen falta varias? Es todo tan complicado que me siento obligado a ayudar. Ya que el autor de la pieza ha demostrado tanta iniciativa denunciando a los medios en los juzgados, le recomiendo que redacte también el proyecto de ley y se la pase, vía Dina, al gobierno. No le costará ningún esfuerzo, porque la ley está, de hecho, ya escrita. En las bibliotecas jurídicas encontrará la Ley de Prensa de Fraga del año 1966, que le servirá de plantilla, porque ordenaba exactamente lo mismo que pide la gente de 'La Última Hora!', estos amigos de la pluralidad. Una ley para controlar desde el gobierno a los medios y evitar que falten al respeto a sus caudillos favoritos.

¿O no era eso?

Este viernes, Twitter suspendió la cuenta del panfleto de propaganda de Podemos 'La Última Hora!'. Muy mal hecho, Twitter: porque otra vez nos tomas a los usuarios por críos incapaces del más elemental discernimiento, porque a algunos masoquistas como yo nos dejas sin una fuente de diversión y, sobre todo, porque 'La Última Hora!' dedica al menos la mitad de su agenda a “noticias” sobre lo que los usuarios de Twitter le dicen a Javier Negre y otros enemigos del pueblo. ¿Qué clase de agradecimiento es este?