"Si tu negocio es de un billón de dólares, invierto; si no, no"

Para un emprendedor a veces la pregunta más frecuente acaba siendo la más tortuosa. ¿Cómo conseguir financiación para mi proyecto? En el mundo de las startups tecnológicas se recurre con mucha frecuencia a la figura de los inversores, tanto públicos como privados, pero a menudo conviene saber qué tipo de inversor es el adecuado y cuál no.

Con una experiencia así se encontró una vez Koldo García, cofundador de The Mad Video, en el mismísimo Silicon Valley: "Fui a un evento con un inversor y nos dijeron: Para nosotros, si esto es un mercado de más de un billón de dólares en tres años, nos puede interesar. Si es de cien millones, seguro que es un gran negocio para ti, pero no tienes que venir a nosotros sino a otros inversores más pequeños'".

Este emprendedor nos cuenta su experiencia en nuestro capítulo de Emprendedores e innovadores: de Silicon Valley a Israel. El documental sobre los dos polos de innovación tecnológica mundial producido por los premios EmprendedorXXI de Caixa Capital Risc con la colaboración de El Confidencial y Teknautas.

En esta ocasión hemos preguntado qué debe tener una startup o un emprendedor para no gustar en absoluto a sus posibles inversores. Para ello, además de con el propio Koldo García, hemos charlado con Joaquim Trias (JTPS), Jonathan Lipnik (Nutrino), Daniel López (Bitnami), Miguel Ángel Martínez (Beetailer) y Pepe Agell (Chartboost).

La idea no sirve de nada, "lo que vale es la ejecución"

Daniel López tiene muy clara una de las cosas que no gusta nada a un inversor: que el emprendedor ponga demasiado foco en su idea. "La idea no vale de nada, lo importante es saber ejecutarla, haber conseguido usuarios, tener tracción, etc."

Al final, "el nivel en Silicon Valley es bastante alto, sobre todo si no conoces esta cultura. Hay mucha gente que viene a buscar financiación con una mentalidad española, y así no funciona".

En cualquier caso, puede haber muchos más errores que al final condenen al emprendedor a quedarse sin financiación. Uno de ellos es el de perderse en ambientes engañosos, como nos cuenta Pepe Agell: "Hay dos Silicon Valley: uno es el de verdad, en el que están los inversores de verdad y los emprendedores de verdad, y luego está el negocio de Silicon Valley: consultores, falsos abogados, falsos inversores, etc.".

Para Agell esto es un peligro que puede desembocar en una pérdida de tiempo para el emprendedor que busca financiación: "Si no te sumerges en el verdadero Silicon Valley te puedes quedar en la superficie, y allí no vas a levantar financiación ni vas a sacar consejos de provecho".

Si quieres seguir la evolución de este documental, puedes seguirnos aquí todas las semanas.