Es noticia
Tú eres El Vaquilla...
  1. Televisión
  2. Carta de Ajuste
Nacho Gay

Carta de Ajuste

Por

Tú eres El Vaquilla...

En su implacable compromiso con la fechoría en todas sus formas de manifestación, Telecinco camina hacia la mimesis obligada con los grandes bandoleros de nuestro tiempo.

Foto: Tú eres El Vaquilla...
Tú eres El Vaquilla...

En su implacable compromiso con la fechoría en todas sus formas de manifestación, Telecinco camina hacia la mimesis obligada con los grandes bandoleros de nuestro tiempo. Suenan en off los acordes de Los Chichos para acompañar las desventuras de El Vaquilla versión new age.

La nueva sintonía de Telecinco tiene el mismo encanto que sus gentes. Ahí estaba ayer ese filósofo del delito llamado Jordi González para bailar el “Tú eres el Vaquilla, alegre bandolero”. Otra vez.

Aparece en pantalla el doño a eso de las diez de la noche para comunicar a sus fans insurrectos, entre ellos Curro Jiménez y El Dioni, por analogía profesiovocacional, que una jueza, ese tipo de gentuza que trabaja a sueldo del estado tocapelotas, está visionando el contenido de su nuevo reportaje de investigación -ejem- sobre Isabel I de Marbella, alias la Pantoja.

Se me abren las carnes al imaginarme a esa pobre señora, con la toga puesta por montera, visionando en el juzgado semejante metraje. Los sueldos de jueces y críticos de televisión deberían tener un plus por exposición nociva a la villanía. También me pregunto cuál es la reacción en un juzgado cuando llama una folclórica con ínfulas de monarca saudí para pedir medidas cautelares sobre un programa de Telecinco. O la cara con la que se deben personar dos señores vestidos de policías en la sede de la emisora para recoger el percal.

Desde luego, se saben muy bien el camino, porque Fuencarral, que es donde habita Telecinco, tiene ya en la escala Richter policial la misma categoría que Las Barranquillas. Es cojonudo que, en el far west del cátodo, tengan que ser una folclórica y cuatro funcionarios –a los que por cierto se les ha bajado el sueldo- los que saquen de vez en cuando las pistolas, única forma viable de ley en este territorio, mientras el Gobierno aprovecha los réditos de esta forma de hacer y ver TELEVISIÓN para que sus voceros vendan las bondades de no sé qué reformas de un hogar en ruinas.

En efecto, Pepiño se sentó el sábado en la silla que ayer ocupaba Julián Muñoz. No sé exactamente qué relación de sentido puede tener todo esto, pero muy buena no es. Eso seguro. Allí estaba el paleto marbellí, cocido al mismo fuego que el pollo a la Pantoja, contando todo lo que no había contado en los juzgados; aireando los pormenores de un proceso judicial en el foro romano del siglo XXI, mientras en su bolsillo los innumerables ceros de un cheque al portador también bailaban la canción de Los Chichos.

“Tenemos unas fotografías comprometedoras de Isabel Pantoja”, decía Jordi González mientras sujetaba con aires de diosa griega la balanza símbolo de no sé muy bien qué tipo de justicia. Una teorizada a pachas entre Chiquito de la Calzada y Harry el Sucio, supongo. En las fotos, gancho tramposo de un programa inane, aparecía la cantante bailando. Sospechoso. Muy sospechoso.

No sé sinceramente si bailar mal es constitutivo de delito, pero elaborar una bazofia como la de ayer debería estar tipificada en todos los códigos penales de esta España de autonomías. Así todo cobraría forma de película de Berlanga: Todos a la cárcel... de Alhaurín de la Torre. Bien pensado, Telecinco podría montar allí sus estudios centrales.

Audiencias: Telecinco sigue rentabilizando los problemas con la justicia de Isabel Pantoja. Anoche el especial de La Noria marcó un gran 17,7% y 2.232.000 espectadores, convirtiéndose en el único espacio que aguantó el tirón del fútbol. Seguir leyendo >>>

En su implacable compromiso con la fechoría en todas sus formas de manifestación, Telecinco camina hacia la mimesis obligada con los grandes bandoleros de nuestro tiempo. Suenan en off los acordes de Los Chichos para acompañar las desventuras de El Vaquilla versión new age.

Telecinco Julián Muñoz Isabel Pantoja