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Series caníbales: cuando la ficción devora a los personajes reales
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Aloña Fernández Larrechi

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Aloña Fernández Larrechi

Series caníbales: cuando la ficción devora a los personajes reales

La pequeña pantalla se nutre de la actualidad y la Historia para crear sus personajes

Foto: 'American Crime History'.
'American Crime History'.

El interés de la pequeña pantalla, y sus telespectadores, por las ficciones basadas en historias reales es casi tan viejo como el propio medio. Si 'Making a Murderer' hubiese interesado a alguien hace unos años, es muy probable que la producción de Netflix hubiese llegado al espectador con otro rostro, unos escenarios recreados y menos declaraciones frente a la cámara. Ya fuese en formato de docuserie o como una ficción dramatizada, la historia de Steven Avery contaba con todos los ingredientes necesarios para llevarse a la televisión: un suceso (o varios) que despierten el interés de los medios de comunicación, personajes interesantes y cierta relevancia. Un esquema que las cadenas siguen desde hace décadas y que van a continuar explotando desde un género que les resulta mucho más familiar, el de la ficción.

A pesar de que ver impreso en la pantalla “basado en hechos reales” puede espantar al espectador, ante la posibilidad de enfrentarse a un lacrimógeno telefilme de sobremesa, los creadores de series de televisión son muy aficionados a basarse o inspirarse en la realidad. Porque además de dar un punto de partida fácil sin tener que recurrir a la imaginación, aporta un interés mayor que el de una serie original. Si además, como es el caso de los dos próximos estrenos basados en sucesos reales, se trata de dos historias muy mediáticas, la producción tiene prácticamente garantizado el interés de la crítica y el público.

Simpson y Madoff

El próximo martes 2 de febrero, la norteamericana FX estrenará 'American Crime Story'. La nueva antología del padre de 'American Horror Story', Ryan Murphy, se interesará en esta ocasión por contar crímenes reales. Para su primera entrega, el director se ha fijado en uno de los juicios más mediáticos de la historia de los Estados Unidos. El del exjugador de fútbol americano O.J. Simpson, por los asesinatos de Nicole Brown, su exmujer, y su amigo Ronald Goldman.

Basado en el libro de Jeffrey Toobin 'The Run of His Life: The People v. O. J. Simpson', la serie analizará el proceso judicial contra la estrella deportiva desde el punto de vista de los abogados. Un juicio en el que un jurado más que discutible asistió durante ocho meses a las declaraciones de 150 testigos. Cuba Gooding Jr. se pondrá en la piel de Simpson, mientras que la elegida para interpretar a la fiscal ha sido Sarah Paulson ('American Horror Story'). John Travolta, David Schwimmer ('Friends'), Courtney B. Vance o Connie Britton ('Nashville') son algunas de las estrellas que encarnarán a otros rostros conocidos de la televisión norteamericana en esta serie que llega precedida de excelentes críticas.

Un día después, el miércoles 3 de febrero, ABC estrenará 'Madoff', que, en dos noches consecutivas y en formato miniserie, acercará a los espectadores los hechos que llevaron a la cárcel a uno de los mayores estafadores de este siglo, Bernie Madoff. En la piel del expresidente del Nasdaq se pondrá el veterano Richard Dreyfuss, mientras que Blythe Danner interpretará a su mujer Ruth. El guion se ha basado en el libro 'The Madoff Chronicles', escrito por el jefe de investigación de 'ABC News', Brian Ross. Y así todo queda en casa.

La historia de Madoff, que hasta 2008 solo era conocido en el mundo económico y empresarial, ha despertado un enorme interés en todo tipo de creadores y ha sido llevada al teatro y al cine. Ya fuese para dar lugar a un documental, 'Chasing Madoff', o inspirar a Woody Allen. Pero la de ABC no será la única adaptación que llegará a la pequeña pantalla. HBO está trabajando en una película para la televisión que, con Robert De Niro y Michelle Pfeiffer como protagonistas, y Barry Levinson a cargo de la dirección, adaptará el libro de Diane Henriques que dará nombre a la serie, 'The Wizard of Lies'.

Revisar la Historia

Si bien el interés de la pequeña pantalla por los hechos o los personajes históricos no es nuevo, llama la atención que en la actualidad los creadores se interesen por asuntos relativamente recientes. Durante la temporada estival, los serieadictos pudieron disfrutar en Netflix de 'Narcos', mientras HBO emitía 'Show Me a Hero'. La primera, con efectismo y algunas licencias, se sumergía en la visión norteamericana del ascenso de Pablo Escobar y su persecución. La segunda, como es propio en su creador David Simon, se trasladaba a las afueras de Nueva York, entre los años ochenta y noventa, para contar discretamente la historia de un heroico político que trataba de hacer lo mejor por sus ciudadanos. Aunque las dos últimas décadas del siglo XX han ganado interés en los últimos años, 'The Americans' o 'Halt Catch and Fire' son ejemplo de ello, no es una época que inspire habitualmente a los creadores.

Lo habitual a la hora de pensar en una producción basada en hechos reales, es recurrir a una serie histórica. Ya sea ambientada en la II Guerra Mundial, como 'Hermanos de sangre', centrada en una saga familiar, como 'Los Kennedy', o en un personaje relevante de la Historia, como 'John Adams'. En los últimos tiempos resulta especialmente destacada la presencia de vikingos en la parrilla, ya sea en la serie a la que dan nombre de History Channel, o en la versión británica de la historia, con 'The Last Kingdom'.

Hasta la llegada de esta última parecía extraño que la televisión inglesa no se atreviese a contar una parte de su historia que estaba funcionando tan bien al otro lado del Atlántico. Porque si algo les gusta a los canales británicos, tan acostumbrados a adaptar a sus figuras literarias, es hacer series históricas. Ya sea narrando la Guerra de las Dos Rosas con menos fantasía (o en realidad no) que 'Juego de Tronos' con 'The White Queen'. O indagando en los entresijos de los reinados de algunos de sus muchos monarcas, como en 'Los Tudor' o 'Wolf Hall'. Paradójicamente, la encargada de llevar a la pantalla la juventud de Isabel II será Netflix, que este año estrenará la serie creada por Peter Morgan, 'The Crown'.

Personajes y personas

Pero en la tele no todo es pompa y conocimientos históricos, y son varios los personajes famosos de la pequeña pantalla que se han inspirado en personas reales que, quizá, no aparecerán en los libros de Historia del futuro. Kathy Reichs, Judy Smith y Allison Dubois fueron la inspiración de los guionistas de 'Bones', 'Scandal' y 'Medium'. Tres procedimentales que a partir de una musa fueron capaces de construir extensas y atractivas historias que, en los dos primeros casos, aún interesan a la audiencia.

Las leyendas que rodean el terreno de la inspiración a partir de personas reales que no llegan a ser figuras históricas son terreno pantanoso. Y en muchos casos está basado más en rumores que en el arrebato creativo de un guionista. Aunque a cualquiera puede pasarle como a Sophia Eggleston, que un buen día se puso a ver 'Empire' y encontró nada menos que en Cookie Lyon un retrato de su propia vida. Como si la televisión necesitase inspirarse en alguien para dar forma a una extraficante de drogas a la que le gusta vestir abrigos de pieles.

El interés de la pequeña pantalla, y sus telespectadores, por las ficciones basadas en historias reales es casi tan viejo como el propio medio. Si 'Making a Murderer' hubiese interesado a alguien hace unos años, es muy probable que la producción de Netflix hubiese llegado al espectador con otro rostro, unos escenarios recreados y menos declaraciones frente a la cámara. Ya fuese en formato de docuserie o como una ficción dramatizada, la historia de Steven Avery contaba con todos los ingredientes necesarios para llevarse a la televisión: un suceso (o varios) que despierten el interés de los medios de comunicación, personajes interesantes y cierta relevancia. Un esquema que las cadenas siguen desde hace décadas y que van a continuar explotando desde un género que les resulta mucho más familiar, el de la ficción.

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