‘The Expanse’, la ópera espacial que ya le roba premios a ‘Juego de Tronos’

Siglo XXIII. Los seres humanos han conquistado el Sistema Solar. Al cargo del control de la Tierra se sitúa Naciones Unidas, mientras que Marte es una potencia militar independiente. Los planetas interiores dependen del Cinturón de asteroides, un conjunto de poblaciones en las que viven y trabajan los cinturonianos. Ciudadanos de segunda, que deben pelear por el aire y el agua como si de oro se tratase. Durante décadas, la tensión entre las tres naciones ha ido un aumento, y cualquier incidente puede hacer estallar la guerra. Un hecho que está a punto de suceder y que tendrá como protagonistas dos caballeros muy distintos, un par de damas de armas tomar y una nave con referencia cervantina.

Este es el punto de partida de ‘The Expanse’, la serie de la cadena temática de ciencia-ficción Sy-Fy que hace unas semanas se proclamó ganadora de una de las categorías de los prestigiosos premios Hugo. Los galardones más importantes de la ciencia-ficción y la fantasía reconocieron el último episodio de la primera entrega de la producción, imponiéndose a la archiconocida ‘Batalla de los Bastardos’ de ‘Juego de Tronos’ y al episodio titulado ‘La puerta’. ‘Black Mirror’ y ‘Doctor Who’ fueron otras de las producciones nominadas, pero nada pudieron hacer frente a ‘The Expanse’.

Una producción notable que gana enteros con el paso de los episodios, gracias a una propuesta narrativa interesante. Y un derroche de imaginación cargado de ambición, respaldado por un presupuesto al servicio de una audiencia más exigente, que disfrutará tanto con las escaramuzas en el espacio, como de los peligros que los protagonistas viven en su particular aventura. Un periplo que en España podemos seguir gracias a Netflix, que estrenó la segunda temporada de la producción la semana pasada.

El fin del Canterbury

Cerca de Saturno, el carguero Canterbury se dirige de vuelta a casa tras haber completado su misión: recoger hielo para poder proporcionar agua a los asteroides del Cinturón. En su trayecto de regreso, los tripulantes del ‘Cant’ reciben un misterioso mensaje de socorro, enviado desde la Scopuli, una nave situada en una apartada zona del Sistema Solar. Un lugar muy apropiado para que los piratas del espacio traten de emboscar a un buen samaritano. Este inconveniente, y la posibilidad de que puedan perder su plazo de entrega, llevan a la tripulación a descartar el rescate.

Sin embargo, el joven terrícola James Holden no podrá obviar la solicitud y, mientras sus compañeros descansan, pone rumbo a la Scopuli. Holden y cuatro de sus compañeros serán los elegidos para adentrarse en la nave, en la que no encuentran supervivientes. Desde allí son testigos de cómo una misteriosa nave lanza unos torpedos contra el ‘Cant’, que en cuestión de segundos desaparece del espacio.

En la Estación Ceres, situada en el Cinturón, el empleado de Star Helix Security, James Miller, recibe una última misión: encontrar a Julie Mao, la hija de un importante empresario del Sistema Solar. Todo indica que la joven ha desaparecido para incomodar a sus padres, pero Miller no tarda en descubrir que la desaparición de Mao es un caso mucho más complicado de lo que pensaba. Y ella no es otra misión que cumplir, sino una mujer por la que siente una profunda atracción.

Mientras tanto, en el planeta Tierra, la secretaria adjunta de Naciones Unidas, Chrisjen Avasarala ve interrumpida su idílica jornada familiar y es requerida para interrogar a un miembro de la Alianza de Planetas Exteriores (OPA en inglés). Heikki Sabong es un cinturoniano acusado de contrabando tecnológico, que en la Tierra sufre tremendos dolores por culpa de la gravedad, a la que no están acostumbrados sus pulmones y sus frágiles huesos.

Conspiraciones y tramas políticas

Con esta carta de presentación, que lleva por título ‘Dulcinea’, arranca ‘The Expanse’, la producción que algunos han definido ya como “el próximo ‘Battlestar Galactica". Y que adapta los libros publicados con el seudónimo de James S. A. Corey, bajo el que se esconden los escritores Daniel Abraham y Ty Franck. La saga, que arrancó en 2011, está compuesta hasta el momento por seis libros, de los cuales tan sólo uno se ha publicado en español en nuestro país. Se trata de ‘El despertar del Leviatán’, aunque Ediciones B tiene previsto lanzar el segundo libro ‘La guerra de Calibán’ el próximo 4 de octubre. Televisivamente, la serie estrenará su tercera entrega en 2018, y la distribución internacional de Netflix es un buen augurio para el futuro de la producción.

La discreción que ha caracterizado la emisión de las dos primeras temporadas no hace justicia a la calidad de ‘The Expanse’. Que entre naves espaciales y una ambiciosa propuesta audiovisual, alberga interesantes tramas políticas y conspiraciones, contra las que deberán luchar Holden y sus compañeros. La jefa de ingenieros Naomi Nagata, el oficial Shed Garvey, el piloto Alex Kamal y el mecánico Amos Burton. Un grupo caracterizado por su diversidad racial, que los creadores han trasladado a la totalidad de la serie.

Las tensiones entre Marte y la Tierra, los problemas que acarrea el cambio climático, la permanente amenaza de los movimientos terroristas radicales, o la disparidad económica que se expande por el Sistema Solar son algunos de los temas de los que se ocupan las tramas de 'The Expanse'. Que entre sus showrunners cuenta con Naren Shankar, guionista y director de varias series de televisión además de doctorado en física e ingeniería eléctrica. El aval para que la serie, además de servirse de la saga que lo inspira, cuente con los medios necesarios para respetar las posibilidades científicas de la historia que narra.

Poniente y el Sistema Solar

‘Hacía tiempo que no leía una space ópera tan buena’. Esta contundente afirmación no llegó de parte de un emocionado crítico literario, ni de un aficionado a la ciencia-ficción espacial. George R. R. Martin, creador de la saga que ha dado lugar a la serie de HBO ‘Juego de Tronos’, se mostró así de entusiasta cuando le preguntaron sobre ‘The Expanse’. Una obra que varios señalan como el equivalente en su género de la saga de Martin. A pesar de que esto son palabras mayores, no es complicado encontrar las similitudes entre ambas sagas literarias y sus adaptaciones a la pequeña pantalla.

Además de las intrigas políticas de ambas producciones, o la falsa premisa que termina desembocando en la trama principal, ‘Juego de Tronos’ y ‘The Expanse’ también son similares en la introducción de sus personajes, la racionalización de las tramas o sus personajes femeninos fuertes. Si en la producción de HBO encontramos roles como Daenerys Targaryen, Cersei Lannister o las hermanas Stark, la serie de SyFy tiene en Naomi, Chrisjen, o la marciana Draper, que aparece a partir de la segunda entrega, tres mujeres de armas tomar que, como Lyanna Mormont, no están dispuestas a quedarse en casa viendo como los hombres se encargan de resolver los problemas.

Los seguidores de ambas producciones no tienen dificultades en encontrar las separaciones territoriales de la producción de ciencia-ficción ciertas semejanzas con las casas de Poniente. Más personalmente, la evolución de los acontecimientos sitúan a James Holden en una posición similar a la que vivió Jon Nieve en su llegada al muro. La entrega de Alex Kamal nos trae a la memoria a Ser Jorah o Ser Davos, y el espíritu canalla de Miller tiene ciertos aires a los tiempos más rebeldes de Tyrion Lannister.

La saga del futuro

Con una tercera temporada prevista para el próximo año, y un séptimo libro pendiente de publicarse antes de que termine 2017, ‘The Expanse’ se presenta como una de las saga literarias y televisivas con mejor porvenir, con permiso de un ‘Juego de Tronos’ al que solo le queda ya su desenlace. Netflix no ha permanecido ajena a esta circunstancia, y en octubre de 2016 adquirió los derechos de emisión internacionales de la serie, algo que le permite presentarla a sus suscriptores como una producción suya.

Su apuesta por la serie de SyFy, y la próxima emisión del regreso de ‘Star Trek’ confirman el interés que la compañía de streaming hace por la ciencia-ficción. Un género muy exigente en lo económico, en el que Netflix no ha encontrado su propia producción, a pesar de que lo intentó con ‘Sense 8’. A quién le importa cuando la compañía de Sarandos siempre se muestra dispuesta a acoger con los brazos abiertos esas producciones que dejarán huella en el universo de la ficción serializada.