Buena idea la de escuchar a los lectores influyentes en el rediseño de El Confidencial

Rediseñar un periódico no es una decisión que se toma a la ligera. En ella, intervienen muchos factores, muchas personas, y para El Confidencial, hay un elemento determinante en este proceso: tú, nuestro lector.

Desde que empezamos a trabajar en este proyecto, en verano del año pasado, en el El Confidencial hemos reflexionado e imaginado qué espera el lector de nosotros. Este viaje empezó con la idea de hacer queCotizalia fuesemás visible en portada, y comprendimos que este cambio podía traer consigo otros que mejorasen la experiencia del lector, y que se traducen en nuevos formatos para contar historias, y en alternativas para hacer de este periódico un diario más rompedor y más innovador.

Este ejercicio creativo lo hicimos durante meses estudiando cómo lees este diario, inspirándonos en ejemplos de prensa y medios online vanguardistas en el diseño, y anticipándonos al periodismo que haremos en unos años, más móvil, más personalizado, más contextualizado. Pero no podíamos continuar avanzando en el nuevo El Confidencial sin conocer tu opinión. Así nació el Proyecto Betatesters.

El Proyecto Betatesters nos ha permitido, durante varias semanas del mes de estos meses de enero y febrero, mostrar las primeras versiones del diseño a algunos de nuestros lectores más fieles y activos, y contar con sus opiniones y propuestas, que incorporamos en fases avanzadas del diseño.

“Gracias por considerar las opiniones de los lectores”. “Gracias por darnos la oportunidad de dejarnos opinar en nuestro periódico”. “Muchas gracias por contar con nosotros para este feedback, se agradece mucho”… son algunos de vuestros comentarios.

Muchos lectores nos han agradecido escucharles: nosotros sólo podemos agradecer la pasión, el entusiasmo y la generosidad con la que han compartido sus opiniones. Para el LAB ha sido un intercambio valioso, que nos ha puesto en el contexto de la realidad de nuestros lectores, y nos ha acercado a sus necesidades, a sus expectativas y a la forma en que usan este diario. Las aportaciones de los lectores se sumaron a las mejoras que hemos incluido y han dado lugar a ajustes en aspectos visuales, y muchas propuestas nos han inspirado para añadir nuevos elementos y utilidades al diseño final.

“Todo muy grande”, “fotos demasiado grandes, demasiado scroll, portada kilométrica”, “la nueva disposición es un poco larga”, “demasiados espacios en blanco”, “excesivo peso gráfico”… “un salto muy brusco desde la versión actual”… La palabra salto la hemos usado varias veces en el Laboratorio: el salto entraña un riesgo, pero que supone llegar a un lugar concreto. Hemos apuntado estas recomendaciones, y las hemos conectado con otros comentarios, que insistían en que es necesario más tiempo (y uso) para dar una opinión definitiva.

“Soy animal de costumbres; tendría que probarlo durante unos días para pronunciarme”, y en la misma línea: “A mí al principio también me parecía demasiado cambio; tras verlo tres días creo que es mejor y no veo tanto cambio….impecable”.

En el extremo contrario, algunos usuarios han destacado la claridad y la pulcritud del diseño: “fantástico, muy moderno… muy gráfico”, “brillante y cómodo”, “espectacular, es un diseño limpio y mucho más gráfico”, “me parece equilibrada y moderna”, “la tipografía es preciosa y hay formatos nuevos muy sugerentes”.

Y un lector se anticipó a nuestras intenciones: “me fascina, el primer impacto es muy positivo, y más cuando sospecho que iréis mejorándolo atendiendo a nuestras sugerencias”. Así es, ¡nos has pillado!

El color, o la ausencia de él, también han generado muchos comentarios. Nos ha entusiasmado vercómo los lectores nos han pedido que les “devolvamos” cosas: “Devolverme el azul del logotipo de El Confidencial”… Ese sentido de pertenencia nos ha conmovido. El negro, que adquiere protagonismo en el nuevo diseño es considerado por algunos de nuestros lectores “demasiado sobrio”, “opresivo”, mientras que otros piensan que es “elegante, serio y moderno” y que nos aporta credibilidad.

Los lectores han insistido en que la información económica y financiera, de mercados y la bolsa, deben seguir teniendo una presencia destacada y diferenciada (recuerda que todo esto empezó porque queríamos complacerte precisamente en este aspecto), al igual que las columnas de opinión. Además, han subrayado que la eliminación de los elementos que “dividían” las noticias y secciones en portada las “mezclan y agolpan”, y crean un “batiburrillo” que dificulta la lectura. Hemos tomado buena nota de ello.

El nuevo diseño pone el titular en el centro y elimina las entradillas, el texto introductorio a cada noticia en la portada. Con esta modificación, los lectores nos han puesto deberes: “un buen titular es suficiente para saber si te interesa pinchar en la noticia; muchas entradillas parecían puestas para rellenar espacio; ahora será importante que tituléis aun mejor que antes”.

No todos los lectores opinan de la misma forma. La ausencia de entradillas es calificada como “un error” que dificulta la lectura. Otros usuarios no lo consideran “imprescindible”, incluso las consideran un elemento de distracción, y que prescindir de ellas, ofrece una estética “más actual, que es tendencia en otros grandes medios internacionales”.

Personalidad y más branding, diseño responsive, pestañas y guías de navegación, opciones para personalizar los contenidos según preferencias de cada lector… Son algunas de las ideas que han compartido los Betatesters con nosotros, al igual que observaciones sutiles, como el hecho de que el nuevo diseño “carga más rápido”; y es que la intención de cada una de las evoluciones tecnológicas que abordamos en el LAB es que tu experiencia en El Confidencial sea cada vez más satisfactoria.

Nos quedamos con algunos comentarios que nos dan energía para seguir adelante, y que al mismo tiempo, implican una gran responsabilidad con nuestros lectores:

“Realmente lo que importa es que nunca se pierda la independencia, la veracidad y la valentía de El Confidencial, y se mantenga siempre abierto, sin ningún tipo de censura, a la opinión de sus lectores”.

“Ahora estáis en la Champions League de los periódicos, incluso mejor que otros más conocidos. Seguir en esta lïnea. Buena idea la de escuchar a los lectores influyentes”.

“Seguir así: Innovando, dando exclusivas y siendo independientes”.

¡Eso haremos! ¿Nos ayudas?