Es noticia
Xabi Alonso y Cesc Fàbregas, con presente en la Liga pero con futuro en la Premier
  1. Deportes
  2. Es lo que hay
Antonio Sanz

Es lo que hay

Por

Xabi Alonso y Cesc Fàbregas, con presente en la Liga pero con futuro en la Premier

Real Madrid y FC Barcelona han cumplido pronósticos y se han clasificado, una temporada más, para las semifinales de la Liga de Campeones. Con inesperada ausencia

Foto: Xabi Alonso y Cesc Fàbregas, con presente en la Liga pero con futuro en la Premier
Xabi Alonso y Cesc Fàbregas, con presente en la Liga pero con futuro en la Premier

Real Madrid y FC Barcelona han cumplido pronósticos y se han clasificado, una temporada más, para las semifinales de la Liga de Campeones. Con inesperada ausencia de reprís en la aceleración del motor blanco y con espectacular sobresalto en la línea de flotación blaugrana pero con los dos accediendo a la fase siguiente, la penúltima y definitiva previa al choque de Wembley el próximo mes de mayo. Aún es pronto para definir el futuro de algunos integrantes de la plantilla, aunque dos nombres se sitúan como protagonistas en los créditos de la que será película estelar del estío. Se trata de Xabi Alonso, que cumple compromiso contractual en junio de 2014 y que penetra, por tanto, en último año de contrato sin intención de renovar; y de Cesc Fàbregas, cuyo rendimiento como culé está dejando demasiados epigramas descoloridos.

Fàbregas retornó al FC Barcelona después de una ardua negociación al segundo intento. Si su llegada se fraguó en agosto de 2011, el tiempo de espera se cifró en un año natural por imperativo de Wenger. Los números de la operación se cerraron, según aclararon diversas fuentes, en 40 millones de euros, repartidos de la siguiente forma: 29 eran fijos, 6 son variables y los 5 restantes se descontarán, un ‘kilo’ por temporada, de la ficha del centrocampista hasta junio de 2016. El desembolso de este costoso montante posibilitó la última petición formal de Pep Guardiola. Casi dos años después, con Tito ya en el banquillo, el rendimiento del catalán se debate con diversidad de opiniones en las oficinas del Camp Nou. Si la euforia producida por los tres goles al Mallorca despejó a quienes alegan críticas en su rendimiento, el oasis de esa noche no empaña lo ocurrido en las últimas semanas traducido en la pérdida de confianza del cuerpo técnico.

El rol que asume en la plantilla se posiciona a la sombra de Messi, pero también vive por detrás de Xavi e Iniesta e incluso en algunos tramos de la temporada de Pedro. Compite con el argentino por ocupar la misma zona geométrica, circunstancia que le termina ubicando en una extensión del campo más de creación y menos de llegada, donde es más funcional. En el tramo determinante del campeonato se ha sentido observado y señalado en dos momentos cruciales del curso: en el partido de ida de la Champions jugado en Milán, cuando abandonó el campo a la hora de juego con derrota parcial (1-0), y seis días después en la vuelta de la Copa del Rey cuando nuevamente fue el primer cambio ante el Real Madrid, también en el mismo minuto y con la eliminatoria muy en contra en ese instante (0-2). Aquello condicionó el mes de marzo, apareciendo única y puntualmente en la Liga aunque ocupando suplencia en el choque del Bernabéu. Mismo espacio que repitió en la remontada ante el AC Milan. Lejos quedaba aquel gol copero en Concha Espina que empataba el choque y que abría la ventana del optimismo antes de esperar a los segundos noventa minutos. En abril las cosas no mejoraron: suplente en París, ocupó el lugar del lesionado Messi, siendo el primer cambio nuevamente tras una nueva derrota parcial (0-1) en el enfrentamiento de vuelta que salvó el gol de Pedro.

Ni Fàbregas ni el Barça están satisfechos en la actualidad con el presente del jugador. Una importante inversión para un futbolista que no es titular en los momentos álgidos del curso. La salida no es sencilla, pero la fragilidad del mercado es lo que posibilita que sigamos viendo a Cesc en Barcelona. Eso sí, si se pone a tiro cualquier propuesta británica entraremos de lleno en una intensa negociación que forzarán ambas partes. Algo que igualmente prioriza Xabi Alonso. Con pactos de no agresión con Mourinho y el Real Madrid, el donostiarra es consciente de que se enfrenta este verano ante la penúltima oportunidad de regresar a Inglaterra, sociedad y estilo de vida que encaja a la perfección en su ideario vital. Si peleó como un jabato su marcha de Anfield para firmar por el Madrid tras sus desavenencias con Benítez, en esta ocasión no repite secuencia porque no existe problema alguno con el técnico para planificar el deseado cambio de aires. Lo que sí parece descartar Alonso es su retorno a Liverpool, de donde salió en agosto de 2009. Recordada es la anécdota ocurrida en el hotel Rey Juan Carlos I de Barcelona. Los ‘reds’ inauguraban oficialmente esa tarde el estadio de Cornellá midiéndose al propietario del campo, el Espanyol. En el desayuno, los jugadores debían presentarse enfundados en un polo de concentración de color rojo. Así vestían todos excepto Xabi que, por confusión, se puso el alternativo, que era blanco de presencia. La negociación entre Purslow, ejecutivo rojo, y Sánchez, dirigente blanco, bullía en esas fechas. Todos daban ya por cumplido el traspaso. Por eso, los compañeros bromearon con la equivocación aludiendo al pleno acierto en el subconsciente del centrocampista vasco.

Alonso busca esta vez acomodo en Londres. Tras recuperarse de la lesión de pubis que lo ha perseguido y condenado al descanso en los dos últimos meses, el formidable mediocentro del Real Madrid prefiere residir en esta segunda experiencia en la capital inglesa. Xabi pretende salir este verano con 31 años y no esperar a la finalización del contrato. Al club blanco le encantaría que ampliase, pero acumula ya varias semanas peinando el mercado para encontrar alternativas en esa demarcación. Algún chistoso ya bromea con que ‘Mou’ y Alonso seguirán juntos el año que viene… pero los dos residiendo en Londres y, ya que va de colores, vestidos de azul. 

Real Madrid y FC Barcelona han cumplido pronósticos y se han clasificado, una temporada más, para las semifinales de la Liga de Campeones. Con inesperada ausencia de reprís en la aceleración del motor blanco y con espectacular sobresalto en la línea de flotación blaugrana pero con los dos accediendo a la fase siguiente, la penúltima y definitiva previa al choque de Wembley el próximo mes de mayo. Aún es pronto para definir el futuro de algunos integrantes de la plantilla, aunque dos nombres se sitúan como protagonistas en los créditos de la que será película estelar del estío. Se trata de Xabi Alonso, que cumple compromiso contractual en junio de 2014 y que penetra, por tanto, en último año de contrato sin intención de renovar; y de Cesc Fàbregas, cuyo rendimiento como culé está dejando demasiados epigramas descoloridos.

Cesc Fábregas Xabi Alonso Premier League