Fue la ‘capitana’ del PP quien convocó urgentemente a la Junta Directiva

Reunión del máximo órgano político entre congresos del Partido Popular, convocada de forma inesperadapara el martes nada más regresar de las vacaciones de Semana Santa. Un cónclave que se entiende decisivo dadas las circunstancias por las que atraviesa el PP, con el temor a perder gran parte del inmenso poder municipal y autonómico que ostenta tras las elecciones del 2011.

La iniciativa partió de la secretaria general, María Dolores de Cospedal, que, tras consultarlo con el presidente, entendió que no había mejor método para implicar a los principales dirigentes a todas las escalas del partido que convocarlos en la sede central nacional de la calle Génova 13.

Objetivo: mostrar al país la unidad de todas las direcciones del partido en el Gobierno, máxime cuando ha comenzado de nuevo la ‘guerra de guerrillas’ entre algunos de ellos, que tratan de culparse de las dificultades electorales a las que parece enfrentarse el PP, especialmente tras el fiasco andaluz.

Una vez más, todos los dedos apuntan a Javier Arenas como uno de los filtradores de noticias contrarias a María Dolores Cospedal

La ausencia de todos los ‘barones’ regionales (excepto la propia Cospedal,que es también secretaria general) durante la reunión del Comité Ejecutivo el lunes 23 de marzo –un día después del batacazo andaluz–alarmó sobremanera a un Mariano Rajoy que, tras su exposición para explicar el descalabro, notó a su alrededor un silencio espeso hasta el punto de tener que decir: “Bueno, a ver si habla alguien…”

Una vez más, todos los dedos apuntan a Javier Arenas como uno de los filtradores de noticias contrarias a Cospedal, que ha dejado claro que ella no fue precisamente la inspiradora de la candidatura de Juanma Moreno Bonilla.

La idea central de la reunión de la Junta Directiva –que raramente es convocada–es que el presidente exija a todos los dirigentes lealtad al proyecto ‘popular’, además de llamar a rebato respecto a las disensiones internas (no le han gustado nada los reproches de algunos dirigentes que se han confesado en un diario nacional respecto a los errores de comunicación de otros), y combatir el pesimismo electoral con dos ideas clave: no hay alternativa real ni creíble al PP, y los peligros que se ciernen sobre la sociedad española si llegan los frikis que pongan de nuevo en almoneda los intereses generales de España.