Todo lo que 'Cervantes' sabe de los secretos de El Corte Inglés

No es natural de Alcalá de Henares, pero le apodan Cervantes. Tampoco es de prosa ilustre, pero abruma con su verbo fluido y arrollador. Ni siquiera ha combatido en ultramar, pero se ha pateado España entera levantando centros comerciales. Bien podría llamarse al menos Miguel, pero su nombre resultaría anónimo si uno es desconocedor del universo de El Corte Inglés.

Hablamos de Carlos Muñoz Gordivil, uno de los viejos rockeros de Isidoro Álvarez que todavía dan guerra en la cúpula del gigante de la distribución. Durante años, este ejecutivo fue el encargado de la expansión territorial, básicamente hasta que la crisis llegó para quedarse, el perfecto negociador para doblar el brazo de concejales y alcaldes: ganaba por las buenas o por agotamiento.

Canoso, cara afilada, gafas… Aunque su semblante pueda darse un aire cervantino, sin duda es su capacidad oratoria la que le ha hecho ganarse el apodo de Cervantes en el sector inmobiliario, donde trabaja desde hace años tratando de administrar y digerir el ingente patrimonio inmobiliario de El Corte Inglés. Aunque para hacer honor a su mote bien valdrían sus memorias.