El cierre mensual y trimestral pone la puntilla vendedora

Vuelta trimestral para el principal índice español, para confirmación bajista de las dos velas mensuales previas al producirse un cierre bajo la de mayo. Esto se suma a la isla potencialmente bajista desplegada en gráfico diario y semanal de la que ayer dábamos buena cuenta. La forma en la que los precios se acercan de nuevo al gap de ruptura semanal de la primera parte del ejercicio, y a la base del canal bajista de corto/medio plazo desplegado desde los máximos del ejercicio, no ofrece en ningún caso sensaciones como las que nos llevaron a plantear anteriormente que la zona de los 26.000 puntos es de fiable soporte técnico. La ruptura de los mínimos del ejercicio confirmaría las sensaciones potencialmente bajista que proyecta el índice en este momento.

En el conjunto europeo se confirmó un reversal trimestral, que en su versión total return se despliega en zona de máximo histórico ajustado por dividendo y ampliación.Esto supone la confirmación bajista de las dos velas mensuales previas como potencialmente bajistas tras la isla potencialmente bajista desplegada en gráfico diario y semanal de la que ayer dábamos buena cuenta. Las maneras en la que los precios se acercan de nuevo a niveles de importante soporte más allá del corto plazo son mucho más inquietantes y parecen plantear la incapacidad delsegundo intento de reconstrucción compradorconfirmado con un mercado norteamericano que, en esta ocasión, sí parece estar jugando en contra de los alcistas de un modo activo.

Al otro lado del charco, las pequeñas ganancias desplegadas en el día de ayer no alteraron nada. La brutal recuperación de la volatilidad, con ruptura de directriz bajista y primera resistencia relativa es un hecho. La pérdida de directrices alcistas y primeros soportes en los índices también. Y en el común de ellos se desplegaron patrones mensuales de tipo envolvente que son potencialmente bajistas y no necesitan confirmación. Son los mínimos del pasado mes de abril los que seguirían refrendando una continuidad en el deterioro más allá del corto plazo, donde ya es algo incuestionable.