La orquesta que transforma armas en instrumentos

“En la próxima era de la ilustración todos los conflictos habrán cesado”, reza el manifiesto fundacional del colectivo musical The Post War Orchestra. “El equipo militar sobrante será reciclado, y se transformará en instrumentos para crear música. El lenguaje universal de la humanidad”.

‘La orquesta de posguerra’, un concepto original de la artista británica Hilary Champion hace realidad el sueño de todo pacifista: convertir las armas en instrumentos musicales. Y no se trata de un proyecto utópico. Es una orquesta real, que ha dado su primer concierto en Glastonbury, y planea seguir actuando con la ayuda de una campaña de donativos, a través de crowdfunding.

Los integrantes de la orquesta, entre los que se encuentran Bruce Woolley, compositor de la archiconocida canción «Video Killed The Radio Star»; Kit Wolley, bajista de Stereo MCs; y el famoso flautista Tim Weather, buscan recaudar 27.000 libras para crear instrumentos con todo tipo de armas, para todo tipo de estilos musicales. 

Un casco convertido en lira

Hasta el momento la orquesta ha logrado transformar seis rifles Lee-Enfield (el fusil de cerrojo estándar del ejército británico entre 1895 y 1956) en sendas flautas, un casco de la Segunda Guerra Mundial en una lira, un lanzagranadas en un novedoso instrumento de viento (bautizado como Bazzokaphone), un par de rifles en una guitarra, y una ametralladora Maxim en un theremín (en la foto). Menos compleja es la sección de percusión, formada por cajas de munición vacías, componentes del motor de un Jeep, y casquillos de bala.

El simbolismo resultante de convertir las armas en bellos, e interesantes, instrumentos musicales porta un poderoso mensaje, y están decididos a hacer su música tan pulida y variada como sea posible.

La idea de formar una orquesta en la que los instrumentos fueran armas recicladas se le ocurrió a Champion después de ver por televisión imágenes del desastre del huracán Katrina: “En torno a 2005 había una gran cobertura de acciones de guerra en los periódicos y en la televisión. Entonces vi a un chaval reuniendo los enseres que habían quedado después de que su casa fuera arrasada por el Katrina. Cogió una escoba, le dio la vuelta, y comenzó a usarla como una guitarra. Se empezó a reír y pensé en la cobertura de la guerra y cómo la música une a las personas”.

Aunque la primera actuación de la orquesta se movió en terrenos de vanguardia, Woolley asegura que planean ahondar en el conocimiento de los instrumentos para hacer la música más accesible y llevar su mensaje a cuantos más lugares, mejor.