Vivo de alquiler sin contrato y pago en efectivo, ¿puedo denunciar a mi casero?

Estoy viviendo en Barcelona en un piso donde se me hace pagar en efectivo todos los meses, pero no existe contrato. No puedo deducirme en mi declaración ni empadronarme. ¿Puedo denunciar a mi casero?

Sí podrá denunciar a su arrendador por fraude fiscal y por fianza no declarada del alquiler. ¿Cómo hacerlo? Cualquier persona física o jurídica que conozca hechos o situaciones que puedan ser constitutivos de infracciones tributarias o tener trascendencia para la aplicación de los tributos podrá presentar denuncias públicas tributarias.

Es habitual encontrar casos en los que los propietarios e inquilinos llegan a un acuerdo para no declarar la vivienda a Hacienda. Y, efectivamente, si usted como inquilino quiere obtener algún tipo de beneficio fiscal o ayuda o quiere empadronarse allí, en el caso de que no lo esté, deberá declarar la vivienda de alquiler como vivienda habitual; supuesto en que el propietario tendría problemas con Hacienda por estar infringiendo la ley.

En virtud de lo anterior, si el inquilino declara como su vivienda habitual dicho piso alquilado, Hacienda, al cruzar datos de ambos contribuyentes, detectará irregularidades en las declaraciones del propietario, siendo un fraude fiscal y, por tanto, castigado.

La AEAT sabe que la vivienda es uno de los refugios más habituales de fraude y por eso lo persigue, no solo cruzando declaraciones sino comprobando datos como los consumos eléctricos. Puede incluso buscar en los datos del padrón si fuese necesario.

En cualquier caso, lo que debes saber es que si alquilas y no declaras, es muy posible que Hacienda termine averiguándolo por uno u otro medio. Al final, es relativamente fácil que una de las partes deje algún rastro del alquiler. En el caso del inquilino, porque tendrá que dar su dirección para acceder al servicio sanitario y para domiciliar sus facturas, entre otras cosas. Además, para el inquilino no supone ninguna ventaja no declarar el alquiler.

*Beatriz Setién Fernández y Sara Benayas Bolívar, abogadas de Lean Abogados.