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Masters de Augusta 2020: un sueño y un pronóstico
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Pablo Martínez-Arroyo

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Masters de Augusta 2020: un sueño y un pronóstico

Dustin Johnson y Rory McIlroy parten como principales favoritos del Masters de Augusta del coronavirus, pero, por supuesto, está Jon Rahm

Foto: Jon Rahm, en una imagen reciente. (Reuters)
Jon Rahm, en una imagen reciente. (Reuters)

(Un sueño). Desde aquel lejano 1934 en el que Bobby Jones y Clifford Roberts decidieron crear un evento que sirviera al deporte que tanto amaban, el Chalet social del Augusta National Golf Club, en Atlanta, Georgia, había acogido la llamada cena de los Maestros. Las risas y el champán solían circular sin restricciones. Esta vez, todo era un poco distinto. Enfundados en sus chaquetas verdes, distinción escogida como seña de identidad en los felices y prósperos años 50, los “Miembros Honorables” compartían junto a los ganadores aún vivos del Torneo -por primera vez sin sus familias, y con el estricto protocolo de seguridad- un momento mucho más solemne.

Tras el breve encuentro, las últimas palabras fueron de Jack Niklaus, el llamado ‘Oso Dorado’, el jugador que más veces logró dominar el evento con sus seis victorias; “chicos, quiero ofrecer mi plegaria para honrar a los que se fueron, y para agradecer a los responsables del Club la posibilidad de que estemos hoy aquí”. Con los campeones puestos en pie, Jack finalizó su intervención dirigiéndose a los sorprendentes líderes después de tres jornadas: “¡Oli, Tiger! gracias de veras por el regalo que nos estáis brindando a los viejos compañeros. ¡Sería un honor que alguno pudiera mantener el tipo ante todos esos jóvenes atletas que os persiguen!”.

placeholder Jack Niklaus y Hideki Matsuyama, en una imagen del 2014. (Reuters)
Jack Niklaus y Hideki Matsuyama, en una imagen del 2014. (Reuters)

En el rostro de José María Olazábal, Oli, uno de los jugadores más admirados en el mundo del golf, se dibujó una sonrisa. Tal vez, por un breve instante, sintió de nuevo el sonido del cohete con el que la Hermandad de pescadores de Hondarribia había celebrado sus dos triunfos anteriores.

(Pronóstico). ¿Por qué ganará Dustin Johnson o Rory Mcllroy? Es la versión actualizada de un titular que viaja conmigo desde 2005 (Why Tiger will win…). El original lo leí hace años en la revista Golf World. Quince años después, las cosas obviamente no son como en 2005. Hablamos de un hombre de casi 45 años, frente a rivales cada vez mejor preparados física y mentalmente. Los analistas, y las casas de apuestas (casi más fiables siempre estas últimas), optan por nombres muy evidentes; Bryson DeChambeau, Dustin Johnson, Justin Thomas, Rory McIlroy, Koepka y, por supuesto, Jon Rahm. De Rahm valoran los expertos su aprendizaje de estos últimos años, y algo que nos ha llamado mucho la atención; Jon, cumple estos días la edad con la que Seve Ballesteros logró su segunda chaqueta verde. Su victoria, sería el mejor homenaje cuando están a punto de cumplirse los diez años del fallecimiento de Seve.

Entre todos ellos, Chip Patterson, experto de la CBS, se decanta por Dustin frente a Rory, y su argumento me parece muy sólido. Johnson ha estado casi mes y medio sin competir, pero ha vuelto en el Houston Open del pasado fin de semana dejando muy buenas estadísticas en su juego largo y sus tiros a green. Dos partes del juego en las que también destaca mucho Rory, por cierto. Ni uno ni el otro, tienen el putt como su palo más fiable, pero dice Patterson que, entre todos los considerados favoritos, son los que han venido compitiendo por la victoria en Augusta de modo más consistente.

placeholder  Rory McIlroy Dustin Johnson, en el Masters de Augusta. (Reuters)
Rory McIlroy Dustin Johnson, en el Masters de Augusta. (Reuters)

Añadiré aquí una opinión de un jugador profesional con el cual he coincidido varias veces entrenando; “es verdad que el putt marca mucho, Pablo -me decía-, pero para mí la clave en nuestro entorno está en ser muy preciso con los tiros a green, que son los que te dan tranquilidad y verdaderamente te dan oportunidades de marcar diferencias”. Las previsiones del tiempo son malas, con lluvia, viento, serias opciones de interrupciones en el juego, y ni un solo grito de aliento hacia los jugadores en cuatro días. Eso abrirá mucho el torneo. ¿Se imaginan a…? Pongan aquí el nombre que prefieran.

(Un sueño). Desde aquel lejano 1934 en el que Bobby Jones y Clifford Roberts decidieron crear un evento que sirviera al deporte que tanto amaban, el Chalet social del Augusta National Golf Club, en Atlanta, Georgia, había acogido la llamada cena de los Maestros. Las risas y el champán solían circular sin restricciones. Esta vez, todo era un poco distinto. Enfundados en sus chaquetas verdes, distinción escogida como seña de identidad en los felices y prósperos años 50, los “Miembros Honorables” compartían junto a los ganadores aún vivos del Torneo -por primera vez sin sus familias, y con el estricto protocolo de seguridad- un momento mucho más solemne.

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