¿Hay esperanzas para McLaren? Puede que sí, por muchos memes que circulen

¿Cuántos memes humorísticos están circulando en las redes sociales sobre la situación de McLaren y Fernando Alonso? En España, el tema ya entra dentro del terreno sociológico. ¿Hasta dónde puede llegar el equipo británico en 2017 con el MCL32? ¿Tendrá el piloto español un monoplaza a la altura del rendimiento personal que está mostrando?

Para contestar, desde fuera solo cabe guiarse por algunos indicios. Es el equipo el que cuenta con la información, análisis del comportamiento y programa de evolución del MCL32. Honda es otro mundo aparte. En este entorno de negatividad alrededor de McLaren resulta difícil plantear creíblemente algunas señales positivas. Pero existen. Que el equipo británico gane en 2017 entraría dentro de la teoría de los universos paralelos. Sin embargo, quizás haya sorpresas en la segunda parte de la temporada. Si Honda lo permite.

Un piloto al límite, porque puede

Una de esas señales es la coincidencia de los pilotos con el comportamiento del monoplaza en curva. Si atendemos tanto a Alonso como Vandoorne, el MCL32 es un chasis con potencial. Incluso ya es razonablemente competitivo. El piloto belga comentaba en un periódico de su país que en Shanghái se sentía más rápido que Massa en las zonas viradas. Y Alonso saltó como un resorte cuando le avisaban que Sainz lograba la mejor vuelta en esos momentos de carrera. “¡Yo soy el más rápido en las curvas!”. Porque, según el asturiano, allí se comía al Toro Rosso . En Australia escuchamos algo parecido.

Alonso tiró como un “animal” en los entrenamientos. Las imágenes comparativas con la cámara a bordo de Hamilton y del español mostraban una sorprendente nobleza en el comportamiento del MCL32. En entrada y paso por curva, tracción… En algunos momentos el británico parecía trabajar más al volante en comparación al pasado año. Puede que para Alonso la sensación fuera diferente, pero desde el exterior no se apreciaban esos problemas en la entrega de potencia de los que nos hablaba el jueves. Lo más importante: en Alonso se veía a un piloto al límite y capacidad de ataque. Hasta el propio Vandoorne lo reconocía cuando apuntaba que “el chasis está progresando" y que tanto Fernando como él tenían "confianza para atacar”. Viendo al español el sábado, no parecían palabras para la galería.

Es cierto que un buen déficit de potencia no exige tanto a un chasis. Pero quizás pueda aplicarse al MCL32 ese adagio de las carreras: “Mejor un chasis rápido aunque no sea fiable, porque la fiabilidad llega, pero la velocidad nunca se sabe”. Mejor un monoplaza bien parido, que la potencia siempre se puede domesticar con la evolución.

Alonso confía en Woking

En términos de fiabilidad, Alonso ha abandonado dos veces por problemas de chasis. El MCL32 está verde aún. McLaren está llevando en estos primeros fines de semana de carrera el trabajo que casi todos los equipos aplicaron en Montmeló. Y, encima, se perdió el primer viernes de Shanghái. Es ahora cuando se empiezan a descubrir los problemas mecánicos propios de una pretemporada, como Alonso se encargó de recordar este fin de semana, eso sí, disculpando al equipo.

También se empiezan a introducir las evoluciones que quizás estaban previstas para Montmeló. Y tanto Alonso como Vandoorne reconocen que funciona la correlación entre el desarrollo virtual y lo visto en la pista. Ojalá hubiéramos escuchado algo parecido en los tiempos de Ferrari. Los elementos incorporados al MCL32 están funcionando. El sábado, el piloto español alabó el trabajo de simulación de McLaren. Y si no ha dirigido sus misiles hacia el equipo en esta tormentosa pretemporada es porque tiene gran confianza en la vertiente técnica de Woking. Y esto último no es una opinión personal de quien les escribe.

Honda y el desarrollo libre

Queda la médula del hueso. ¿Y Honda? Como mínimo se impone el escepticismo en este campo dada la experiencia hasta el momento. A Honda le está pasando un verdadero ‘tsunami’ por encima. Pero también cabe dejar la puerta abierta a lo desconocido, esto es, la capacidad de reacción del fabricante japonés en la primera temporada sin 'tokens'. Porque en 2017 el desarrollo es libre. Hasegawa ha apuntado los cambios de organización y la incorporación de nuevos técnicos extranjeros.Por ello, conviene dar margen a su reacción al llegar a los grandes premios en Europa. Y no olvidemos otro dato: la potencia y el consumo podrán ser deprimentes para sus pilotos, pero tras la tormentosa pretemporada pocos hubieran apostado que los motores hubieran aguantado algo más de un par de asaltos en las primeras carreras. No ha sido el motor lo que ha hecho abandonar a Alonso hasta el momento. En este aspecto, poco, pero algo se ha logrado.

En definitiva, McLaren es un equipo con enorme retraso, pero no un caso perdido. Recuperarlo será titánico, pero hay buenos mimbres para el cesto a poco que Honda sepa resolver sus carencias. Alonso tiene confianza para hacerse uno con su monoplaza, como era la sensación que transmitía el sábado en sus dos vueltas salvajes. Y este rasgo es crucial en un coche de carreras. No se coloca un monoplaza decimotercero con las rectas de Shanghái solo con manos. Aunque uno se fija donde está en estas primeras carreras ese piloto tan extraordinario que es Vandoorne, y ya no se sabe que pensar sobre Fernando Alonso. Dentro de unos meses…