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El Kun Agüero prepara su salida
La eliminación del Atlético de Madrid en la Liga de Campeones ha provocado la enésima polémica en el equipo del Manzanares. La decisión de Abel Resino
La eliminación del Atlético de Madrid en la Liga de Campeones ha provocado la enésima polémica en el equipo del Manzanares. La decisión de Abel Resino de dejar en la suplencia a Diego Forlán, totalmente incomprensible, ha supuesto un nuevo cisma en el inestable vestuario rojiblanco, reflejo de la inestabilidad institucional y económica que vive el Club Altético de Madrid Sociedad Anónima Deportiva. Y Sergio Agüero con sus declaraciones tras el partido y con el enfado que aún le duraba ayer ha vuelto a poner una excusa para allanarse el camino para su marcha. Una salida que ya está asumida y casi fomentada desde el propio club, por más que en sus declaraciones públicas tanto el delantero argentino como los dirigentes rojiblancos digan todo lo contrario.
Que Sergio Agüero continúe la próxima temporada en el Atlético no es imposible (no hay nada imposible ni en el fútbol ni en la vida), pero es algo harto complicado. El Kun se escuda ahora en un enfado con Abel por no haber alineado a Forlán (si no le hubiera sacado a él, su enfado sería aún mayor) y también transmitía ayer su mosqueo con el técnico porque el entrenador del Atlético no apareció ayer en los medios, salvo en la rueda de prensa, como sí hizo tras la victoria ante el Barcelona y el meritorio empate ante el Real Madrid.
Por cuestiones económicas resulta también muy improbable que el Atlético de Madrid mantenga en la plantilla al jugador mejor pagado. Los dirigentes del Atlético le subieron la ficha hasta los 4,5 millones de euros por temporada, según fuentes del club, y modificó su cláusula de rescisión el pasado verano, en una operación muy parecida a la que realizaron con Fernando Torres la temporada antes de ser traspasado al Liverpool.
Aunque Agüero ha dicho públicamente, indicado por el club para evitar protestas de la masa social, que quiere seguir en el Atlético, su discurso ante su círculo íntimo es muy distinto y ya habla sin ambages de su intención de marcharse a final de temporada. Las decisiones de Aguirre no le gustaron, las decisiones de Abel tampoco le cuadran y su objetivo es buscarse la vida en un equipo de mayor entidad que el Atlético de Madrid, que va a tener que pelear mucho para jugar la próxima temporada en Liga de Campeones, algo necesario para la viabilidad económica del equipo colchonero.
Diego Armando Maradona, seleccionador argentino y padre de la madre del hijo recién nacido de Agüero, ya ha manifestado su deseo de que el padre de su nieto se marche al Inter de Milán. El Inter le quiere, aunque le puede salir más barato Villa por la crisis que atraviesa el Valencia. Y Real Madrid y Barcelona también han anotado al Kun en su agenda.
Lo suyo, lo ideal para los atléticos es que el Kun Agüero continuara en el Atlético, igual que nunca se debía haber marchado Fernando Torres. El Atlético está mal porque está mal gestionado deportivamente. Ningún proyecto triunfa y se repiten y repiten los errores, sin buscar un modelo a seguir y dando permanentes bandazos. Eso provoca que el Kun se quiera ir ganando una ficha casi a la altura de muchos ‘cracks’ mundiales. Pero el Kun no se va por Abel, ni por Aguirre antes, se marchará por la ineficacia y la nefasta gestión de los dirigentes rojiblancos. El Atlético vive una situación económica muy mala y se verá obligado a vender al Kun, por más que la mayoría del dinero que paguen por él se lo lleve Hacienda por las enormes deudas que arrastra con el erario público, como sucedió con el traspaso de Torres. La masa salarial de la plantilla del primer equipo se ‘come’ todo el dinero de la sociedad, unas fichas puestas sin cabeza con unas cantidades estratosféricas comparadas al rendimiento que ofrecen los Maniche, Seitaridis y compañía que cobran como superclases, porque le han puesto esos sueldazos al ficharlos, claro, y no rinden al nivel exigible para un Atlético de Madrid.
La eliminación del Atlético de Madrid en la Liga de Campeones ha provocado la enésima polémica en el equipo del Manzanares. La decisión de Abel Resino de dejar en la suplencia a Diego Forlán, totalmente incomprensible, ha supuesto un nuevo cisma en el inestable vestuario rojiblanco, reflejo de la inestabilidad institucional y económica que vive el Club Altético de Madrid Sociedad Anónima Deportiva. Y Sergio Agüero con sus declaraciones tras el partido y con el enfado que aún le duraba ayer ha vuelto a poner una excusa para allanarse el camino para su marcha. Una salida que ya está asumida y casi fomentada desde el propio club, por más que en sus declaraciones públicas tanto el delantero argentino como los dirigentes rojiblancos digan todo lo contrario.