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La Roja: del desastre de Curitiba a ganar la tercera Eurocopa consecutiva
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Javier Gómez Matallanas

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La Roja: del desastre de Curitiba a ganar la tercera Eurocopa consecutiva

Ganar la tercera Eurocopa consecutiva es el objetivo y se puede conseguir, pero quizás, seguramente, haga falta otro líder para afrontar y conseguir el reto

Foto: Del Bosque, junto a Xavi Hernández e Iker Casillas (EFE)
Del Bosque, junto a Xavi Hernández e Iker Casillas (EFE)

Da mala sensaciones la Selección española de fútbol. Después de haber sido el referente de la Marca España y quesu manera de jugar y los valores que representaban sus futbolistas podían ser un ejemplo para la sociedad. Después de que sus victorias fueran una alegría para el castigado pueblo español por la crisis económica, parece que ahora La Roja, tras el desastre de Curitiba, lanza señales negativas. Ese pesimismo debe ser sacudido de inmediato porque España tiene potencial para seguir haciendo historia y ganar su tercera Eurocopa de manera consecutivaen 2016 en Francia.

España necesita una renovación profunda, obligada por la retirada de la Selección de Xavi Hernández, el futbolista que marcaba el modelo de juego, y por la salida ya confirmada por ellos de Alonso y Villa. El debate está en si esa renovación la puede hacer Vicente del Bosque o deberían haber buscado otro líder para realizar los cambios. Del Bosque debe montar un equipo nuevo y un modelo de juego. En su primera lista tras la eliminación mundialista, las más temprana y traumática en la historia de la Selección, no se atisba ese nuevo equipo que debe configurar.

La Real Federación Española de Fútbol debe realimentar el entusiasmo de la afición. El objetivo de ganar la tercera Eurocopa consecutiva debe ser el motor para realizar la transición. Además de estar centradas en presentar nuevos patrocinadores también deben poner cuidado en la parcela deportiva, donde no hay un plan claro. La planificación de los entrenamientos de la Selección absoluta se hace en función de los compromisos publicitarios de los internacionales. España cada vez se entrena menos y se ocupan muchas horas de entrenamiento en grabación de anuncios.

La elección de Curitiba como sede de concentración del pasado Mundial fue un síntoma más de que se hace más hincapié en lo comercial que en lo deportivo. Está claro que la Selección debe ser el motor económico de la Federación, pero sin olvidar que su razón de ser es jugar al fútbol, no hacer spots publicitarios. El actual cuerpo técnico, que también participa en esos anuncios en la figura de Del Bosque, está compuesto por hombres de empresa, pero en algún momento deberían imponer los criterios deportivos.

El desastre de Curitiba se produjo por múltiples factores, pero muy importante fue la falta del principio de autoridad. Una cosa es el ordeno y mando cuartelario y otra el gobierno de los caprichos de los futbolistas. Y hubo actitudes de indisciplina que se han premiado ahora con la nueva llamada para jugar con España. Y no pueden quedar impunes actuaciones que derivaron en el desastre de Curitiba como contestaciones fuera de tono delante de todo el grupo, falta de respeto a los horarios de concentración y graves insultos a periodistas, escuchados por toda la delegación del equipo nacional, de los que ni siquiera se ha disculpado el futbolista, ni los capitanes, ni el cuerpo técnico ni ningún responsable la propia Federación.¡Cómo si no hubiese pasado nada! Dejando entrever que algo habrá hecho el periodista para que le amenacen de arrancarle cabeza y le llamen “subnormal y gilipollas”. La tercera Eurocopa consecutiva es el objetivo y se puede conseguir, pero quizás, seguramente, haga falta otro líderpara afrontar y conseguir el reto.

P.D. Si algún seleccionador cita parte de este artículo en una conferencia o cualquier comparecencia pública se ruega cite también autor y procedencia. ¡Gracias!

Da mala sensaciones la Selección española de fútbol. Después de haber sido el referente de la Marca España y quesu manera de jugar y los valores que representaban sus futbolistas podían ser un ejemplo para la sociedad. Después de que sus victorias fueran una alegría para el castigado pueblo español por la crisis económica, parece que ahora La Roja, tras el desastre de Curitiba, lanza señales negativas. Ese pesimismo debe ser sacudido de inmediato porque España tiene potencial para seguir haciendo historia y ganar su tercera Eurocopa de manera consecutivaen 2016 en Francia.

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