Más irresponsable que Pablo Iglesias... y cómo se decidirá quién gana la Liga

En una situación inesperada como la que estamos viviendo en todo el mundo por la pandemia del coronavirus cabe cualquier tipo de reacción. Están los insolidarios e irresponsables que se van a la Pedriza o a pasar el fin de semana a la playa como si nada pasara, los que se saltan la cuarentena a ojos vista de toda España como Pablo Iglesias acudiendo al Consejo de Ministros y está la inmensa mayoría de los madrileños y españoles, gente solidaria y con conciencia social, que se quedan en casa desubicados y, los que los tienen, convenciendo a sus hijos de que no pueden bajar a la calle a jugar con otros niños.

Y eso es lo que ha pasado también en el sector del fútbol. Era momento de que se unieran todos los estamentos del fútbol y fueran todos a una. Y parecía que iba a pasar. La Real Federación Española de Fútbol, con su presidente Luis Rubiales a la cabeza, creó una comisión de seguimiento del coronavirus a la que invitó a LaLiga y a la AFE. La patronal y el sindicato debían acudir a la llamada de la institución que gobierna el fútbol español, que no es otra que la RFEF.

En las primeras horas de la crisis quedó retratado Javier Tebas por su insistencia en no suspender la Liga y empeñarse en jugar los partidos a puerta cerrada, cuando el avance del coronavirus en España obligaba a parar el fútbol. Y luego, aunque LaLiga aceptó, como no podía ser de otra manera, la invitación de la RFEF de estar en la comisión de seguimiento, Tebas no se personó en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas y mandó a Carlos del Campo en su nombre. Por su parte, David Aganzo, presidente de la AFE, sí estuvo presente, aunque su relación con Rubiales no es actualmente buena...

Tebas no quiso hacerse una foto de unidad con Rubiales que hubiera sido buena para el fútbol. Era lógico que estuviera en la sede de LaLiga preocupado por el enorme impacto económico que tendrá este parón en el fútbol, como lo tendrá en todos los sectores, pero no le habría costado nada abandonar la sede una hora para irse a Las Rozas. Un día antes, Tebas sí pudo pasarse toda la tarde en el Consejo Superior de Deportes con su abogado recabando datos para poner una querella por prevaricación a Irene Lozano, la secretaria de Estado para el Deporte, por haber adelantado las elecciones de al RFEF, dentro de su obsesión por quitar a Rubiales de la presidencia (¿qué más le dará a Tebas que se adelanten las elecciones de la RFEF si el también adelantó las de LaLiga?).

El momento de la unidad de verdad

Es buen momento para demostrar la unidad de todas instituciones españolas y en el fútbol es una ocasión pintiparada para que el enfrentamiento entre Rubiales y Tebas se supere por el bien de nuestro balompié. Pero parece que la mano tendida del presidente de la RFEF no la ha cogido el presidente de LaLiga. Aunque ahora no nos podamos dar la mano por el coronavirus, ese gesto de acudir a la reunión lo debería haber hecho Tebas.

Quedan ahora semanas de negociación sobre cuando se jugarán las jornadas aplazadas, si es que se juegan, o de cómo se hará si se suspende LaLiga y no se juega y decidir los criterios de quién sería el campeón, de los que descienden y los que se meten en Champions o Europa League, igual que en Segunda (qué equipos ascenderán y cuales descenderán). Para ello, la Federación escuchará las propuestas de LaLiga (se habla de que podría quedar la clasificación como en la primera vuelta) para decidir. Esperemos que Tebas esté a la altura y dialogue como se hace en democracia y como obliga una situación que ha provocado que el Gobierno de España decrete el estado de alarma.