Jaime Botín puso un autobús a la prensa para asistir a los resultados de su hermano

Jaime Botín sigue haciendo gala del altruismo que le llevó a pagar, junto a su familia, 200 millones de euros a Hacienda para contribuir a encarrilar el desbocado déficit público del país (nada que ver con la denuncia de Anticorrupción por delito fiscaladmitida porla Audiencia Nacional). Esta vez, derrochósu magnanimidad con los plumillas que se dedican a la información financiera, acuyadisposición puso Bankinter un autobúsel jueves pasado. Se trataba de que les diera tiempo a ir desde la presentación de los resultados de dicho banco, a las 10 de la mañana en la calle Marqués de Riscal, en pleno centro de Madrid, a los de la de la entidad que preside su hermanoEmilio, el Santander, en Boadilla del Monte, localidad del oeste de la capital a unos 18 kilómetros de la sede de Bankinter.

En realidad, de lo que se trataba era de que los periodistas fueran a la presentación de las cuentas de Bankinter, puesto que a la del primer banco de España iban a ir sí o sí. Por tanto, para que no ignoraran la del más pequeño, había que facilitarles el traslado de una sede a otra. De ahí lo del autobús. Ese mismo día presentaba también resultados el Banco Sabadell, el tercero más grande del país (el quinto si contamos los procedentes de cajas) a las 9 de la mañana. Pero a ese se le podía ignorar: no es de la 'famiglia'.

Resulta llamativo queJaime Botín (empeñado como está en aparecer como el hermano culto y el que da lecciones de moralfrente a un Emilio populachero, que hace el ridículo hablando en inglés y que ha estado en todos los charcos judiciales posibles) asuma lainferioridad de su banco y se avenga a correr con los gastos de transporte de la prensa en vez del Santander. Tal vez le haya despertado de sus ensoñaciones la multa de 700.000 euros que le ha puesto Economíapor ocultar un 8% del capital de Bankinter en Suiza. Una multa incomprensible puesto que él siempre dijo a los franceses de Crédit Agricole que "controlaba el banco a su antojo". Y siendo así, qué más da un 8% arriba o abajo. En todo caso, qué son 700.000 euros cuando tu familia tiene 2.000 millones en el país helvético.

Como pueden comprobar, esto de las presentaciones de los resultados de la banca es un auténtico carajal. Antes de la crisis, con 45 cajas y 15 bancos, era inevitable que siempre coincidieran, aunque los cotizados procuraban no hacerlo y muchas cajas simplemente obviaban ese engorro de rendir cuentas (así han acabado). Pero ahora, cuando sólo quedan 16 entidades en España (sin contar las cooperativas), la cosa no debería ser tan complicada. Pero lo es, para desesperación de periodistas y analistas.

La semana apsada no hubo ninguna presentación el lunes, ni el martes, ni el miércoles. Pero el jueves programaron las suyas Sabadell y Santander, una coincidencia que es habitual desde hace varios trimestres. Dado que una esa las 9 y la otraa las 12, da tiempo a la canallesca a asistir a ambas ruedas de prensa. El lunes pasado Bankinter decidió sumarse a la fiesta y también puso la suya el juevesa las 10. Ahí sí que los periodistas iban a tenerlo difícil para ir almustdel día, que erael Santander. De ahí la idea de fletar el autobús.

La cosa no acaba ahí, porque el viernes coincidieron los resultados de otras dos entidades cotizadas: BBVA y CaixaBank, pese a que en la semana que hoy comienza hay días libres (Bankia presentóel lunes y el Popular lo hace hoyjueves, víspera de puente). ¿Por qué este empeño en coincidir unos con otros? Todas las entidades tienen la excusa de que es el día que aprueba las cuentas su consejo y aseguran que la fecha está puesta hace mucho tiempo... igual que todas afirman que ganan cuota de mercado todos los trimestres. La sospecha generalizada es que, en estos tiempos de vacas flacas, prefieren coincidir para que sus malos resultados se diluyan en los medios con los de otras entidades.

Cuando vuelvan las vacas gordas, se cuidarán muy mucho de no coincidir para que los periódicos en papel (que en la banca siguen teniendo una veneración casi religiosa, no se sabe por qué) les concedan la página entera a cada uno al día siguiente. Ya lo verán.